BARCELONA -- Ousmane Dembélé y Sergi Roberto son los dos jugadores de la plantilla del Barcelona que acaban contrato al finalizar esta temporada, al margen de los cedidos Luuk de Jong y Yusuf Demir, y si en el caso del futbolista catalán no está para nada asegurada su continuidad, con el delantero francés no existen dudas: el club estima prioritaria su renovación y lleva semanas trabajando en una propuesta que, reconocieron fuentes del club a ESPN Digital, debería ser concreta antes de acabar este año. Y que será novedosa en cuanto a sus conceptos básicos.
Si Xavi Hernández, en primera persona durante su presentación explicó que Dembélé "en su posición, bien trabajado puede ser el mejor jugador del mundo" y entendió que su renovación "es prioritaria", los ejecutivos azulgrana, bajo el liderazgo de Mateu Alemany van dando forma a un nuevo contrato por tres temporadas de duración en el que se partirá de un salario fijo ajustado a la actual situación económica del club y que obtendrá bonus en cuanto a su rendimiento, a su participación en el terreno de juego.
Esto es, un mínimo que irá en aumento a partir de un mínimo de partidos jugados y que Alemany, recordó a ESPN Digital un ex futbolista del Mallorca, ya utilizó en el club balear. "Tenías un bonus por llegar a equis partidos, para nada del tipo que se utilizó en el Barça estos años pasados de fácil alcance, y que te obligaba a esforzarte siempre al máximo”, explicó este ex jugador, pudiendo aumentar considerablemente su salario final en caso de alcanzar el objetivo.
A Dembélé, que actualmente disfruta de unas condiciones que el club considera excesivas, se le presentará una rebaja ostensible... Que podría convertirse en aumento en el caso de convertirse en imprescindible para el entrenador y con los bonus colectivos por títulos.
El delantero francés, que recibió con agrado los elogios de su nuevo entrenador, es partidario de seguir en el Barcelona y aunque su representante Moussa Sissoko tiene sobre la mesa otras propuestas confía en alcanzar un acuerdo que desde el club se estima ajustado a las necesidades de las dos partes.
OTROS CASOS
Menos clara está la continuidad de Sergi Roberto, con quien las conversaciones quedaron paralizadas hace ya varias semanas, aunque el deseo del jugador se mantiene en renovar aceptando la rebaja salarial que ya se le remitió desde el club a su representante para prolongar por dos temporadas su contrato.
En el caso de los dos jugadores cedidos, Luuk de Jong y Yusuf Demir, la situación es distinta. La continuidad del delantero neerlandés, que llegó desde el Sevilla por expreso deseo de Ronald Koeman, está descartada más allá del final de temporada y, más aún, no se descarta que pudiera abandonar el Barça durante el mercado de invierno, mientras que con el joven austriaco, por quien tiene el club una opción de compra valorada en diez millones de euros, la euforia inicial de principio de temporada se ha enfriado y no se valorará su compra, o descarte, hasta la parte final del curso.