El entrenador del PSG inició su defensa en contra de dos periodistas y ex directivo que lo acusaron de racismo.
El entrenador del París Saint-Germain, Christophe Galtier, comenzó su defensa de las acusaciones de racismo con tres denuncias contra dos periodistas y en contra del exresponsable deportivo del Niza, Julien Fournier, según indicó este viernes su abogado, Olivier Martin.
Además, se ha presentado otra demanda para que se investiguen las amenazas de muerte y el acoso al que ha sido sometido el técnico del PSG desde que salieron a la luz las acusaciones de racismo contra él y que se difundió su número de teléfono móvil a través de las redes sociales.
Julien Fournier y los periodistas Daniel Riolo, de RMC Sport, y Romain Molina, independiente, han sido denunciados por difamación, indicó el letrado al diario L'Équipe.
La Fiscalía tiene ahora tres meses para abrir diligencias por estas denuncias, lo que abriría un nuevo frente, después de que la Fiscalía de Niza comenzara ya a investigar las acusaciones de racismo contra Christophe Galtier.
Un registro tuvo lugar en la sede del Niza por la fiscalía hace una semana. La fiscalía confirmó la semana pasada la apertura de una "investigación preliminar" sobre los presuntos comentarios racistas emitidos por Christophe Galtier.
Las pesquisas hicieron referencia a la filtración a la prensa de un supuesto correo electrónico del entonces director deportivo de ese club, Julien Fournier, a la directiva, en el que detallaba la presunta actitud racista de Galtier.
"Queremos que cese esta situación inaceptable para Christophe Galtier", dijo el letrado del entrenador.
En el origen de la polémica está la publicación de un mensaje interno cuando Christophe Galtier era, la pasada campaña, entrenador del Niza, en el que se queja de que la plantilla cuenta con un exceso de jugadores "negros y musulmanes", que no se corresponde con la realidad poblacional de la ciudad.
El mensaje fue revelado por Julien Fournier y, posteriormente, por los periodistas denunciados.
Galtier, que al final de la pasada campaña abandonó el Niza para sentarse en el banquillo del París Saint-Germain, negó enseguida esas acusaciones y anunció acciones legales.