Luego de dos ciclos mundialistas fallidos con entrenadores extranjeros (Juan Carlos Osorio y Gerardo Martino) al frente de la Selección Nacional, existe la consigna desde la cúpula del balompié azteca de que el próximo técnico tiene que ser mexicano, sí o sí.
Jaime Lozano, Nacho Ambriz o el regreso de Miguel Herrera son, por ahora, las cartas sobre la mesa en la Federación Mexicana de Futbol, y con menos fuerza más por su condición de extranjero que por capacidad y méritos, aparece el uruguayo Guillermo Almada.
Uno de los argumentos recurrentes de los directivos encargados de elegir al entrenador nacional es que la baraja de los ‘de casa’ es corta; sin embargo, la realidad indica que hay poco esmero y visión para buscar, por un lado; y por otro, se suele confiar más en el extranjero con todo y que su conocimiento del futbol mexicano sea nulo.
Cabe recordar que para el pasado ciclo mundialista, tras la salida de Osorio, Gerardo Torrado y Yon de Luisa “presumieron” haber entrevistado a 24 candidatos para ocupar la silla de entrenador tricolor.
Esta vez el escenario parece distinto, pero los hombres de pantalón largo están pensando en lo obvio, en lo evidente y hasta en lo inexplicable, como contemplar un posible regreso del ‘Piojo’, con todo y el episodio bochornoso que le costó su despido del Tri.
MODELO ARGENTINO
A los dirigentes se les está olvidando un histórico: Rafael Márquez, hoy entrenador del filial del FC Barcelona.
Cierto, Rafa tiene escasa experiencia como entrenador, pero en contraparte cuenta con el conocimiento del futbol mexicano, el aval de una carrera brillante como futbolista, y por si fuera poco no estaría solo.
¿Por qué no pensar en Jaime Lozano como su auxiliar?… Y más allá: en Ricardo La Volpe al frente de la Comisión de Selecciones Nacionales. El ‘combo’ no suena nada mal.
Lozano ya trabajó con la base que en el papel llegará al Mundial de 2026, pues ganaron medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio celebrados en 2021; el ‘Bigotón’ aportaría su conocimiento y experiencia desde un puesto directivo, y Márquez sería la cabeza y cara visible.
¿Alguien duda que ‘Jimmy’, que está sin trabajo por el momento, y La Volpe, en las mismas circunstancias, no aceptarían a ‘ojos cerrados’ ir con la Selección?
Y qué decir de Rafa, con todo y que ahora tenga un compromiso con el Barça B.
Lionel Scaloni, técnico Campeón del Mundo con Argentina, llegó al cargo sin haber dirigido a un club en Primera División y se rodeó de históricos de la albiceleste como Pablo Aimar, Walter Samuel y Roberto Ayala; mientras que el ‘genio’ César Luis Menotti ocupó un cargo como dirigente.
En México sería una apuesta arriesgada, desde luego, pero demostrado está que traer a extranjeros de cierto renombre no ha funcionado, pues tan pronto se concreta la eliminación del Tri en los Mundiales, regresan a sus países con los bolsillos llenos de dinero sin haber dejado progreso alguno en el balompié nacional.
¿BIELSA?
La realidad es que se trata de un sueño guajiro. El ‘Loco’ sería de los pocos extranjeros que tendrían las puertas abiertas de par en par en la Selección Nacional y contaría con absoluta aprobación; sin embargo, luce poco probable que esté interesado en dirigir al Tricolor.
Cabe recordar que ya lo han buscado en otras ocasiones y su respuesta ha sido “no”, y su rechazo obedeció más a los compromisos comerciales que tendría que aceptar si asume el mando, que a un tema deportivo o económico.
Al tiempo.