Brian Rodríguez, extremo del Club América, habló en AUF TV sobre sus inicios en el fútbol del interior, de los sacrificios que tuvo que hacer hasta llegar a Peñarol, de los aspectos que tuvo que corregir para dar el salto a Primera División y de la posibilidad de volver al conjunto Carbonero.
Cerca de la llegada de la tradicional 'Noche de la nostalgia' en Uruguay, el Rayito habló sobre los aspectos de su vida que le generan nostalgia mirando hacia atrás.
"Nostalgia uno siente de su infancia, de mi pueblo, de jugar con mis amigos de Tranqueras. Hoy vuelvo a mi casa y nos juntamos, jugamos y nos divertimos, cuando se puede", expresó entre risas.
Consultado por sus inicios en el fútbol, Brian Rodríguez recordó lo sacrificado que fue alejarse de su familia siendo tan joven para cumplir su sueño de jugar al fútbol.
"Los que me conocen saben lo que me costó llegar. Me fui de Tranqueras siendo muy chico, con 11 o 12 años. Primero fue a Rivera, después a Tacuarembó, estaba solo, y todo lo hice para que me vieran de Montevideo, hasta que llegó la posibilidad de llegar a Peñarol", recordó.
Posteriormente, el extremo recordó sus primeros pasos en el club Carbonero, y de los entrenadores que lo ayudaron a encontrar su mejor versión para dar el salto a Primera División.
"Llegué a Peñarol en 2015, en Quinta División. Me dirigía el Chueco Perdomo primero y el Tato García después. Siempre me puntualizaron que veían en mí cosas que no veían en los demás, pero que tenía que enfocarme y tener disciplina, en aquel entonces faltaba mucho a entrenar, no me gustaba. Un día me dieron una charla muy serie, que supe escuchar, y me hizo un click. A partir de ahí cambié por completo".
Al futbolista le preguntaron si, en algún momento, sintió la presión de tener que dedicarse al fútbol cuando había abandonado los estudios siendo muy joven.
"Nunca se me pasó por la cabeza hacer otra cosa que no fuera jugar al fútbol. Ahora de grande pienso en el estudio, que muchos tuvimos que dejarlo como un sacrificio para dedicarnos a esto, pero por suerte en estos últimos tiempos lo pude retomar. Nunca sentí presión, yo solo quería jugar al fútbol y tenía claro a donde quería llegar", comentó.
Posteriormente, el Rayito recordó sus primeros pasos en la Selección Uruguaya de la mano del Maestro Tabárez, y de lo cerca que estuvo de volver a Peñarol después de la disputa de la Copa América 2024.
"Jugué en 2017 y en 2018 en Peñarol y en 2019, cuando estaba en Los Ángeles FC, me cita el Maestro Tabárez para la Selección. Fueron dos amistosos, uno en Costa Rica y uno en Estados Unidos, y en Estados Unidos me tocó marcar mi primer gol. Lo que me pasó hace un tiempo fue que después de la Copa América yo no estaba bien en el América, no me sentía feliz. Quería volver a Uruguay para volver a sentirme jugador. Peñarol es mi casa y no me iba a sentir mejor en ningún otro lado más que en mi casa. En aquel momento no se llegó a un acuerdo entre América y Peñarol, pero mis ganas siempre estuvieron. Peñarol a mi me hizo como jugador y como persona y siempre le voy a estar agradecido, siempre quiero volver", afirmó.