La directiva de Cruz Azul intentará impedir que aficionados ingresen al interior de La Noria, como ocurrió tras el título del Invierno '97
El Consejo de Administración y Vigilancia de Cruz Azul, que encabezan José Antonio Marín y Manuel Velázquez, ordenó dar inicio a los preparativos de la fiesta que se espera en las instalaciones celestes de Xochimilco, en caso de que se rompa la sequía de 23 años sin título de liga.
Un amplio grupo de trabajadores de Cruz Azul comenzaron con una limpieza general de las instalaciones y continuaron con arreglos del salón de usos múltiples -a unos metros del gimnasio-, en donde se darán cita los integrantes del club después de terminar el decisivo encuentro, a celebrarse la noche del domingo en el Estadio Azteca.
Parte de los preparativos incluye una valla metálica que se colocó en las afueras de La Noria, que protegen la barda a lo largo de los tres accesos; el objetivo es evitar que aficionados salten al interior y así cuidar la integridad de las personas que estén adentro festejando.
El alto mando pretende evitar una posible invasión de gente y que no ocurra lo mismo que cuando se ganó el campeonato del Invierno '97; aquella ocasión, gente burló la vigilancia, brincándose la cerca, sin embargo, esta vez sería imposible escalar, puesto que las vallas son más altas y planas.
Por otro lado, una fuente de Cruz Azul informó a ESPN que, debido a la pandemia de Covid-19, los invitados al posible festejo serán muy selectos; prácticamente las esposas de los integrantes del plantel, de la directiva y los trabajadores del club, sin medios de comunicación. No se tiene planeado espectáculo musical alguno.