Romero estuvo en selecciones menores de México, pasó por las inferiores de Pachuca y peleó por un puesto en el Porto, antes de su debut en Primera División
Abraham Romero apostaba con Carlos Vela cinco dólares. El arquero mexicano del LAFC se jugaba la suerte con el ex jugador de la Real Sociedad y el Arsenal de Inglaterra en los tiros libres, "a veces ganaba él, pero muchas veces yo", dice, entre risas, en entrevista con ESPN. Ahora, está bajo la tutela de Hugo Lloris, el arquero de Francia que fue campeón del Mundo en el 2018.
"Me metió muchos goles. En el entrenamiento, me acuerdo que cuando él te quería ganar, te ganaba. Hacíamos tiros y te decía que cinco dólares por tiro, le atajaba tres y decía que iba arriba 15, entonces me metía cuatro. Muy buen tipo. Hubo un día que yo gané, llegamos al camión y me dió 20 dólares. Luego él me ganó y en el camión le dí el dinero, me dijo que no me preocupara, que sólo me quería ganar, no cobrarme", cuenta Abraham Romero, portero del LAFC, en entrevista con ESPN.
Romero hizo el proceso de selecciones mexicanas en divisiones menores. Tiene 26 años, estuvo en las fuerzas básicas del Pachuca y peleó por un puesto en el Porto de Portugal, antes de su debut en la Primera División. Entre sus competencias estuvo Diogo Costa, portero de los lusitanos en la Eurocopa. En el LAFC hizo amistad con Carlos Vela.
"Carlos Vela, un tipazo, un buen capitán, y muy buena persona para el vestidor, es de esos jugadores que son generacionales, con un talento impresionante, el día que quiera llega al entrenamiento y es el mejor, nadie le toca ni los talones, me tocó verlo, a pesar de su talento, se manejaba humildemente. Yo en ese momento era el cuarto portero, me hablaba y me trataba como cualquier otro compañero, no es común en el futbol", recuerda Abraham Romero.
Bajo la tutela de Hugo Lloris
Abraham Romero inició como cuarto portero en el LAFC y actualmente está sólo por detrás del francés Hugo Lloris. El arquero de 26 años sigue los pasos del campeón del Mundo en 2018 y subcampeón en 2022, para cumplir el sueño de algún día ir a Europa.
"Le he aprendido bastante, es un estilo diferente, distinto al estilo mexicano. El estilo mexicano es de achicar, acortar espacios, reacción, lo que he visto de Hugo es más posicionamiento. Él se queda a dos pasos de la línea, se da tiempo de reaccionar, se pone en ángulos que te ayudan a proteger más zonas. Diario me da un consejo, es otro nivel. Antes de que yo llegara pensaba que era buen portero, pero llegó él y vi que la diferencia es que él es muy consistente. Él hace nueve de 10 ejercicios bien, y yo seis de 10. Es muy bueno y mira que he estado con buenos porteros como Ochoa, Talavera, Corona, Conejo", narra el portero del LAFC.
Romero estuvo a punto de ir a Europa, en categorías menores, pero no pudo conseguir un lugar en el Viejo Continente. El sueño sigue intacto, pero sabe que antes se tiene que consolidar en el LAFC. "Lo que tengo más presente y es sólo porque me hizo sentir bien. Le pregunté las diferencias entre el futbol de Estados Unidos y Europa, me dijo que la diferencia es la consistencia. Que hay muchos jugadores con gran nivel, pero no constantes, nos falta hacer lo básico de forma perfecta. Me hizo sentir bien, no sé si mintió, pero me dijo que tenía nivel para jugar en Europa, en Portugal o España, al igual que los arqueros de Estados Unidos o de México. No muchos pueden jugar ahí, la clave es adaptarse y seguir trabajando. Seguir constante, ser seguro y no fallar".