Cuando pensamos en referentes actuales del futbol femenil, nos viene a la mente Megan Rapinoe. Y es que la jugadora estadounidense ha sido un pilar en los últimos años, no solamente por lo que ha conseguido la selección femenil de Estados Unidos dentro de la cancha, sino por utilizar la plataforma del deporte para levantar la voz en contra de las injusticias y desigualdad de género.
Este domingo 5 de julio la capitana del combinado estadounidense celebra su cumpleaños número 35, y no precisamente de la manera que ella hubiera deseado, pues de no ser por la pandemia actual estaría por disputar este verano los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 con la selección estadounidense.
En la cancha, Rapinoe lo ha ganado casi todo, oro olímpico en Londres 2012, dos Copas del Mundo en 2015 y 2019, un subcampeonato en la Copa del Mundo en 2011, el segundo Balón de Oro en la historia del futbol femenil, Bota de Oro y premio The Best como la mejor jugadora de FIFA en 2019. Pero lo que más ha dejado huella en sus seguidores, es utilizar su plataforma como deportista para hablar de sexismo, racismo, homosexualidad y la diferencia salarial entre hombres y mujeres en el futbol.
En 2018, Megan compartió su homosexualidad públicamente y ese mismo año al lado de su novia, la basquetbolista cuatro veces medallista olímpica en baloncesto con la selección de Estados Unidos, Sue Bird, fueron la primera pareja homosexual en estar en portadas de revistas como el ESPN Body Issue.
Públicamente ha externado su desacuerdo con el actual Presidente de Estados Unidos, Donald Trump y su postura en dicho temas. En 2019, previo a coronarse campeonas del mundo en Francia 2019, se le preguntó a Rapinoe si de ganar el campeonato aceptaría una invitación a la Casa Blanca, a lo que ella respondió: “No iré a la p***a Casa Blanca. No creo que nos inviten de todas maneras”.
La respuesta del Presidente Trump a Megan fue que se dedicara primero a ganar en la cancha y después a hablar. Durante la final contra Holanda, Estados Unidos se llevó la victoria, además que Rapinoe abrió el marcador de penal en la final que se sentenció 2-0 favor de USA.
Hoy más que nunca se han hecho presentes las protestas en pro de las vidas afroamericanas que sufren día con día el racismo y brutalidad policiaca en Estados Unidos. En 2016, Colin Kaepernick fue de los primeros atletas que utilizó su plataforma en el deporte siendo el quarterback de los San Francisco 49ers y se hincó durante el Himno Nacional estadounidense. Megan Rapinoe también se hincó en solidaridad a la causa y apoyo a Kaepernick durante el Himno Nacional en un juego de su club, Seattle Reign, ante Chicago Red Stars.
“Siendo una mujer estadounidense homosexual, sé lo que significa ver la bandera y no sentir que proteja todas mis libertades. Fue algo pequeño que podía hacer para contribuir y seguiré haciéndolo”, externó Rapinoe durante la entrevista post partido.
Y tal como lo dijo en 2016, tres años más tarde Megan seguía firme y solidaria a la causa pues en la mayor vitrina como lo es la Copa del Mundo, se mantuvo firme en no participar durante el Himno Nacional de su país. Megan estaba presente con sus compañeras durante el protocolo, más no lo entonaba ni ponía la mano en le corazón.
Ya sea con el cabello teñido de morado, rosa o rubio, emanando esa seguridad que proyecta cada que pisa la cancha o sube a un podio, Rapinoe nos sigue regalando momentos memorables con su liderazgo, pero también reflexiones de vida invitando a las nuevas generaciones a ser mejores.
“Tenemos que ser mejores, amar más y odiar menos. Escuchar más y hablar menos. Es nuestra responsabilidad el hacer de este mundo un lugar mejor”, fue parte del mensaje que compartió Rapinoe en Nueva York durante el desfile de celebración por ganar la Copa del Mundo 2019.
Feliz cumpleaños a la rebelde favorita de Estados Unidos, esperemos poder seguir viéndola en la cancha para los pospuestos Juegos Olímpicos en 2021 y por qué no, como ella misma puso en redes sociales, en la siguiente Copa del Mundo en Nueva Zelanda y Australia en 2023.