Javier Hernández reconoció que un lapso de depresión y otros factores mermaron su primera campaña con LA Galaxy
El delantero Javier Hernández reconoció que un "lapso de depresión muy profunda" mermó su primer año con LA Galaxy, en conjunto con diversos factores externos que influyeron en su estado anímico.
"Sería muy dificil enumerar los factores, pero la pandemia, la muerte de mi padre (abuelo), situaciones personales que se juntaron; caí en una depresión muy profunda de la que no me di cuenta. Toda mi realidad era responsabilidad mía y era un vacío tan fuerte que tenía conmigo mismo que luego me di cuenta que solo se iba a llenar con amor propio".
"Imaginarse cosas chin... está bien, pero hacerlas es lo que he tratado de hacer en mi carrera y mi vida", señaló en entrevista para ESPN.
Además ahondó en la pérdida de su abuelo, a quien calificó como una "imagen paterna en lo professional, personal y emocional".
"Mi abuelo era una imagen paterna en lo profesional, personal y emocional, a lado de mi padre. Gente que ha estado cerca de mi familia sabe que es un equipo más que de amor, de trabajo para mí. Han sido mis mayores apoyos y críticos hasta la fecha", expresó.
Por último señaló que debe comportarse como uno de los mejores jugadores de la liga para retribuir la confianza que el club depositó en su persona para realizar su fichaje.
"Si no existiera ese amor no le dedicaría tanto tiempo al deporte para poder ser uno de los mejores jugadores de la liga. Tengo que comportarme como tal y yo se que dos o tres horas no son suficientes para regresarles esa confianza", concluyó.