LOS ÁNGELES -- Día 59 DQ (después de Qatar). Yon de Luisa sigue agazapado. Este domingo se cumplen ya los 60 días de plazo, de su plazo. Hasta hoy, sigue en tinieblas. Organiza su búnker y se rodea de compinches. 59 días y no ha sido capaz de elegir un técnico para la Selección Mexicana ni de definir un modelo de trabajo para 2026.
“¿Por qué Dios le dio sombrero a quien no tiene cabeza?”, preguntaba la chilena Violeta Parra.
Como una tabla para un náufrago, le llega el acuerdo entre Conmebol y Concacaf, para matrimoniarse futbolísticamente. Ya tiene atole en el dedo para embarrarle a la ávida afición mexicana. Esa será la cortina de humo para su discurso, aún sin fecha. Queda clara su incompetencia para cumplir sus propios plazos.
Atiborra de amigos, socios y cómplices, la Comisión de Selecciones Nacionales. Cuatro clubes, dos en caos (Chivas y Xolos), y dos con sentido común al menos (América y Santos). Coloca al frente del organigrama a Rodrigo Ares de Parga, el tipo que, entre aires de purga y tufo a azufre, fue echado de Pumas. Esos son los cinco subordinados de Yon de Luisa. Cinco Jinetes de un nuevo Apocalipsis.
¿Había mejores que estos cinco? Unos pocos. Acaso, el Grupo Pachuca, el único capaz de argumentar y cuestionar la toma de decisiones. Podría agregarse a Andrés Fassi, hoy asesor de Juárez FC, pero enemistado fuertemente con Jesús Martínez, y a punto de romper legalmente todo vínculo entre ambos.
Sin embargo, Yon de Luisa supo elegir bien, no para el futuro del futbol mexicano, sino para el suyo propio. Se ha blindado. Vito Corleone y sus cinco Luca Brassi. Cinco pies izquierdos y ninguna mano derecha.
Estos cinco designados, alabarán, sordos, ciegos y mudos, las decisiones que él tome como presidente de la FMF. Los tres changuitos de la cultura japonesa: Mizaru, Kikazaru e Iwazaru, ahora son cinco: no veo, no oigo, no hablo. Pajecitos perfectos.
Dentro de sus limitaciones, ciertamente, De Luisa trabaja buscando soluciones. Por supuesto, en los sitios incorrectos. Fue a una ferretería en busca de herramientas para una cirugía a corazón abierto.
Dicen, quienes rodean a De Luisa, que desde el 30 de noviembre de México, ya las primeras horas de diciembre en Qatar, Emilio Azcárraga Jean, de manera poco gentil, le ordenó limpiar el estercolero del fracaso en la Copa del Mundo, dar conferencia de prensa de inmediato, y encontrar soluciones. Pobre Yon, era como enviar a un tipo vegano al restaurant Carnivore en Muldersdrift, en los suburbios de Johannesburgo, un buffet donde todo se mueve, y lo que se come, se arrastra, galopa o vuela.
En entrevista para ESPN, el ex arquero histórico del 'Tri' habló sobre los cambios que vienen en la Federación Mexicana de Futbol.
La realidad es que hoy, Día 59 DQ, México no tiene director técnico. Ya se sabe que el ungido es Miguel Herrera, y se sabe desde que abandonó Doha y las transmisiones de Telemundo en pleno mundial. O al menos esa fue la explicación que dio a la televisora, que le aguardaba una oferta del Tri en México.
La vox pópuli, que ya no es la voz de Dios, pide a Guillermo Almada. Méritos sobran: ha armado un equipo espectacular, con fe en el jugador joven mexicano, y con la habilidad para generar revulsivos tácticos de acuerdo al partido. Recuérdese que el mismo Gerardo Martino se arrimó al técnico uruguayo para consultarle sobre cómo conseguir que el Tri tuviera esa intensidad, esa capacidad de presión, de inteligencia en la transición, porque el argentino, en cuatro años, nunca lo consiguió.
Divorciados y todo, pero desde sus alcobas separadas, Andrés Fassi y Jesús Martínez presionan para que sea Marcelo Bielsa. La duda es por qué, en tantos años, y supuestamente con tan profunda amistad con El Loco, ninguno de los dos fue capaz de llevarlo a La Bella Airosa en su momento.
Tras la falacia filtrada de que a Grupo Pachuca ya le había dado el sí, lo cierto es que Bielsa viajó a Londres y finalmente no pudo arreglarse con el Everton. Propuso un plan similar al que desarrolló con Atlas.
Me imagino a Gerardo Martino hablando con su ídolo Bielsa sobre su experiencia con el Tri, y revelándole lo que un auxiliar del Tata filtró a Mac Reséndiz, reportera de ESPN: que los jugadores “europeos” hacían lo que les pegaba la gana, obvio, bajo la complacencia de directivos, desde Gerardo Torrado hasta Yon de Luisa.
Y recuérdese que El Loco ha desdeñado invitaciones de La Casa Rosada y del presidente argentino en turno, para bochorno de su hermano, el político Rafael Bielsa. ¿Alguien cree que andaría besando en el imprescindible besamanos de la corte de Emilio Azcárraga Jean?
Más allá de que le exigió 16 millones de dólares al Everton por firmar, Bielsa podría ocupar un cargo, que, mire Usted, no existe en el futbol mexicano. Sería el tipo perfecto para crear, desarrollar y supervisar un plan maestro de selecciones nacionales y fuerzas básicas, en todo el país, incluyendo a equipos de la Liga Mx y de la Liga de Desarrollo.
Sí, suena utópico, sin duda. Ni la FMF, ni la Liga Mx, ni la #YuntaDeDueños (dixit Sven-Göran Eriksson), están preparados para hablar de ello. Miopes, voraces, mezquinos, todos ellos, sólo buscan las limosnas inmediatas de la próxima Copa del Mundo.
El escenario es ese: El Piojo, con la unción de Emilio; Almada, con la bendición generalizada de dueños acobardados, y Bielsa, una quimera, porque sería un proyecto Gulliver para cabecitas muy, pero muy, liliputenses.
Y este domingo, el día 60 DQ. Y Yon seguirá agazapado y los dueños de clubes, anegados en los pañales de sus propios miedos.