Mauro Icardi fue presentado este domingo como nuevo jugador de Galatasaray, en medio de una multitud que se acercó al Rams Park para celebrar el regreso del delantero argentino.
El rosarino de 30 años, que ya había sido recibido por una muchedumbre en su arribo a Estambul, firmó contrato a la mañana con el club turco y, horas después, se sumó al evento en el que fueron presentados los refuerzos.
En vísperas del partido de vuelta de la segunda ronda de clasificación de la UEFA Champions League (NdR: el miércoles definirán en casa la serie ante Zalgiris Vilnius, tras empatar 2-2 en Lituania), Icardi y su familia, incluidos su esposa Wanda Nara y sus hijos, recibieron el cariño de 40.000 hinchas.
El alemán Kaan Ayhan, el italiano Nicolo Zaniolo, el neérlandes Halil Dervişoğlu, el francés Cedric Bakambu y el marfileño Wilfried Zaha fueron los otros futbolistas presentados, aunque las mayores muestras de cariño y fervor se las llevó el atacante argentino, que en la temporada pasada se ganó a la hinchada al convertir 23 goles y repartir 8 asistencias en 26 partidos. En ese período, Galatasaray volvió a ganar la Süper Lig luego de cuatro años de sequía.
Dursun Özbek, presidente de la institicuión, informó precisiones sobre la compra de Icardi: "Nuestro estimado jugador rechazó una oferta de aproximadamente 40 millones de euros por año y aceptó la nuestra de 10 millones de euros, de los cuales cuatro millones de euros serán pagados por nuestros patrocinadores".
El ahora ex PSG, de destacado paso por Inter de Milán, tomó la decisión de continuar su carrera en el equipo en el que jugó cedido durante el pasado curso.
Y al saltar al campo de juego del estadio junto a su familia, recibió el apoyo de los fanáticos, que colgaron banderas bancando a Wanda Nara, quien recientemente atravesó problemas de salud.