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Último día de la ventana de transferencias: Cómo los clubes contratan jugadores en 24 horas

Una guía paso a paso sobre cómo podrían ser las últimas horas de un mercado de traspasos para un director deportivo

(Nota del editor: Tor-Kristian Karlsen es un cazatalentos del futbol noruego y exdirector ejecutivo y deportivo del club francés AS Monaco que se ha enfrentado al escenario de tener que llegar a un acuerdo en el último día de transferencias)

Idealmente, todos los clubes querrían hacer sus negocios lo antes posible en la ventana de transferencia, pero las cosas no siempre salen según lo planeado.

Las últimas 24 horas antes de que la ventana de transferencias se cierre presenta a fanáticos que aparecen afuera de los estadios, helicópteros que transportan a los jugadores entre ciudades y peleas desesperadas con la tecnología en un intento por cerrar un trato antes de la fecha límite.

Puede ser frenético y salvaje, aunque si bien los fanáticos generalmente disfrutan de ese tipo de drama, los clubes mismos prefieren que las cosas vayan mucho más tranquilas.

A continuación una guía paso a paso sobre cómo podrían ser las últimas horas de un mercado de traspasos para un director deportivo.

Mañana

Lo primero que hay que entender: ningún trato se concreta en 24 horas. Es el resultado de días, meses, a veces años. Incluso cuando se acerque la fecha límite, los clubes tendrán una buena idea del jugador al que están contratando, pero es importante tener a los scouts y a los analistas disponibles desde el principio para proporcionar información adicional y comentarios rápidos en caso de que no haya habido mucho tiempo para hablar.

Obviamente, se necesita el aporte del entrenador, junto con su equipo médico, el secretario del club, alguien que sirva de enlace con la federación, el equipo legal, así como el personal de relaciones públicas y comunicaciones para difundir la noticia sobre su fichaje.

Una vez que se acepta la oferta, cuanto antes todos estén en la misma página, mejor, ya que deberá organizar vuelos si el jugador involucrado reside en el extranjero. Sujeto a las reglas locales de entrada y cuarentena con respecto a COVID-19, también podría existir la necesidad de reservar habitaciones de hotel.

-Hablar con el jugador

Después de haber obtenido el visto bueno del club para hacer contacto oficial con el jugador -aunque no se puede negar que muchos de los detalles se arreglan con el representante de un jugador mucho antes de que el club haya sido informado o dado su permiso para mantener conversaciones- uno desea intercambiar algunas palabras directamente con el jugador.

Hablar de la posible incorporación horas antes de que tengas que tomar una decisión sobre la contratación de un jugador no es de ninguna manera lo ideal -realmente a uno le gustaría tener una charla completa con ellos- pero al ser el ultimo día, el reloj no se detiene y sus opciones son limitadas. Es poco probable que una llamada de cortesía de este tipo haga algunas de las partes sea más sabia, pero al menos el jugador tiene la oportunidad de aprender un poco más sobre su club, que es mejor que nada. Tener al entrenador en la llamada para explicar cómo ve al nuevo jugador encajar tácticamente también es obligatorio. Hacer que alguien se sienta querido nunca es una pérdida de tiempo.

Cualquier señal de alerta que surja -como la falta de entusiasmo o interés en su club, o si está claro que la información que el agente le ha dado al respecto no cuadra- podría hacer que se arruine el trato. En última instancia, una apreciación del comportamiento social ayudará e incluso en esta época de análisis, debe confiar en su instinto. Una llamada no le dará la imagen completa, pero todavía hay valiosos consejos que debe captar y es lo mejor que puedes hacer en ese momento.

- Finalizar términos con el agente

Una vez que hayas colgado el teléfono con el jugador, pasas con el agente. En el improbable caso de que esta sea la primera vez que el tema de los términos personales (salario, tarifa de fichaje, comisión de agente, así como cualquier cláusula adicional para aumentos relacionados con el desempeño y bonos) esté sobre la mesa -tales casos suceden- sin embargo, esta será una de las conversaciones no deseadas que tendrá. Además de eso, habrá discusiones sobre los arreglos de alojamiento, vuelos, acuerdos de patrocinio y derechos de imagen... dependiendo del estado del jugador.

El agente es muy consciente de que está bajo presión, que está desesperado y que probablemente no tenga otras opciones preparadas. En este punto, lo mejor que puede hacer es establecer una cifra aproximada de salarios y tarifas y esperar hasta que el jugador llegue con su séquito más tarde ese día.

- Resuelva la logística y prepare a su personal

Corriendo contra el reloj, no hay otra opción que reservar un jet privado, siempre que dicho servicio esté disponible en este rincón particular de Europa. No es estrictamente necesario que la firma de un préstamo o incluso una transferencia permanente llegue antes de la fecha límite de transferencia, ya que toda la documentación obligatoria se puede procesar fácilmente de forma digital y remota. Usted quiere que el agente también esté allí en persona (puede que venga de algún lugar diferente al jugador) para resolver las formalidades antes de que se realice cualquier presentación.

Una vez que se hayan resuelto los arreglos del viaje, puedes tomar un respirar, pero no antes de haber delegado en serio. En un club de élite, obviamente, tendrías personal dedicado para ayudar en todas las tareas prácticas, pero todavía hay quienes tendrán que reunirse con el cuerpo médico y de comunicación para una breve sesión informativa.

Lo ideal sería que su propio departamento médico de confianza realice un examen del jugador (aunque sea breve) y conozca al jugador, ya que los problemas pueden surgir en cualquier momento. Otra opción es llevar a su personal médico para evaluar al jugador en una instalación cercana a su club actual, lo que puede ahorrarle algo de tiempo en ciertos escenarios.

Para el departamento médico, es una cuestión de reservar todas las citas que puedan hacer dentro del plazo disponible: querrían hacer una resonancia magnética completa, y preferiblemente también una tomografía cardíaca, que requiere equipo especializado, así como más controles rudimentarios realizados en su gimnasio y centro médico local.

En la mayoría de los casos, el club al que se une el jugador también tendría registros médicos transmitidos por su antiguo club, que serían enviados electrónicamente y posteriormente estudiados por el médico del equipo en las horas previas a la llegada del jugador.

Como un examen médico completo generalmente toma al menos un día, y a menudo dos, tener solo cinco o seis horas puede hacer que este aspecto de una transferencia sea algo arriesgado. En estos días, la tecnología mejorada, además de un acceso más fácil a la información (como el historial de lesiones anteriores de un jugador), ha ayudado a reducir el peligro hasta cierto punto. Sin embargo, en interés del club y del propio jugador, no conviene dejar nada al azar en lo que respecta a la salud. Un examen médico adecuado requiere tiempo.

Su equipo de comunicaciones también debería estar debidamente informado. Aunque se puede encontrar toneladas de información en línea, algunos comentarios del entrenador en jefe sobre las habilidades del jugador y la razón por la que se están incorporando es el tipo de información que le gustaría compartir con los seguidores del club y mostrar en su sitio de internet tan pronto como se cierre el trato. Se deben hacer arreglos para la sesión de fotos y los videos cortos para las redes sociales, aparentemente indispensables en esta época.

Mediodía

- Ponte al día con las noticias

Con un poco de suerte, puede tomar un pequeño respiro y almorzar. Idealmente, te gustaría ponerte al día con lo que está sucediendo. ¿Alguien más está haciendo algún negocio? ¿Se han enterado los medios de tu nuevo fichaje estrella? Quizás incluso pueda leer sus correos electrónicos o mensajes. Incluso puede haber ofertas de cesión o transferencia permanente para sus propios jugadores, aunque la mayoría de ellos tienden a ser agentes que lo están probando y son una pérdida de tiempo.

Por lo general, se tiene una idea clara en los días anteriores de si uno de sus jugadores se moverá, por lo que puede prepararse para eso. Sin embargo, si algo más urgente está sucediendo en su club, debe asegurarse de que todos sepan cómo encontrarlo, probablemente comunicándose con usted en un segundo teléfono. La mayoría de los directores deportivos tienen más de un teléfono ¡algunos incluso pueden tener tres o cuatro!

Temprano en la tarde

- Consultar con los propietarios

Antes de la llegada anticipada de su nuevo fichaje, es posible que también desee tocar base con los dueños. No hay nada que despierte más entusiasmo en un club de futbol que las transferencias, y los directores ejecutivos, los miembros de la junta o incluso los propietarios millonarios no son diferentes al fanático común en ese sentido.

A menos que ya esté equipado con todos los mandatos esenciales, deberá verificar con los propietarios qué tan interesados ​​están en los procedimientos de transferencia en curso. Por mucho que todos reconozcamos que la contratación de nuevos jugadores debe basarse exclusivamente en decisiones futbolísticas siempre que se ajusten al presupuesto asignado, tener a la persona que paga las facturas a bordo nunca es algo malo... especialmente si necesitas algo de influencia por inconvenientes inesperados (y costosos) más tarde. Deben confiar en su juicio, y todo debe estar bien, pero nunca está de más preguntar.

Media tarde

- Alojar al jugador

En ese momento, el jugador y su agente deberían haber llegado sanos y salvos. Les ofreces un recorrido rápido y clandestino (al menos en la medida de las posibilidades) por el estadio, preferiblemente acompañado por el entrenador o el capitán del club. Hay tiempo para una breve comida para los invitados que llegan antes de que se lleve al jugador para realizar los procedimientos médicos apresurados y ligeramente improvisados.

- Volver a las negociaciones del contrato

Mientras lo hacen, aquí es donde a menudo se llega al aspecto complicado para resolver los detalles del contrato. Dependiendo de su relación con el agente o agentes, la próxima hora puede ser solo una formalidad o un peligro potencial para la finalización del trato.

Un agente de confianza puede mantener su palabra y mantenerse fiel a lo que se acordó principalmente por teléfono, mientras que alguien menos preocupado por la reputación o las relaciones futuras podría incluso poner todo en riesgo al intentar todo tipo de travesuras.

Si tiene suerte, puede salirse con la suya con solo tener que pagar algunos vuelos para los amigos y la familia del jugador (y, sí, aún se pueden exigir incluso en ofertas por valor de millones) o terminará teniendo que enfrentar solicitudes por tarifas de registro exorbitantes, bonos o comisiones de agentes que no han aparecido anteriormente. Estas cosas pueden resultar caras y, a menudo, se abordan al final de las negociaciones.

Vale la pena mencionar que este último escenario se ha convertido en una ocurrencia más rara con el surgimiento de agentes generalmente más confiables y profesionales que reconocen el valor de mantener buenas relaciones con los clubes. Pero, si no es así, siempre existe la opción de retirarse del trato.

Con solo unas horas para que se cierre la ventana de transferencia, a veces ser llevado a dar un paseo es literalmente el precio que paga por tener que hacer negocios de última hora.

Temprano en la noche

- Dale un vistazo final al papeleo

Con los términos personales fuera del camino, la preparación real del papeleo es relativamente sencilla. Ambas partes revisarán la primera y la segunda página de los contratos profesionales, además de echar un vistazo a los apéndices en los que se indican bonos o complementos excepcionales.

Mientras que anteriormente el contrato del jugador podría modificarse y se necesitaban profesionales legales para tener la última mirada (esto todavía sucede) ya que la letra pequeña estaba sujeta a muchas críticas, la mayoría de los contratos profesionales en las ligas europeas se basan en general en las plantillas estándar de la Federación que no se pueden modificar (obviamente, con la excepción de la duración y los términos financieros).

El acuerdo de transferencia entre los clubes, ya sea un préstamo o un acuerdo permanente, también debe ser analizado. A diferencia del contrato del jugador, el acuerdo de transferencia no se basa en una plantilla establecida como tal, pero a menudo puede ser un mosaico basado en múltiples alteraciones de correo electrónico entre los dos clubes. Con cantidades significativas involucradas regularmente, ayuda tener un equipo legal experimentado (que tienen la mayoría de los clubes de primer nivel) supervisando la finalización del acuerdo.

Noche

- Investigue los resultados de las pruebas médicas

A medida que se acerca la hora límite de transferencia, es momento de sentarse con el médico del club o el jefe del departamento médico para escuchar los hallazgos del apresurado chequeo médico. A menos que los profesionales médicos hayan planteado alguna inquietud en particular, el informe se firma con la recomendación de proceder con el registro del nuevo jugador.

Ahora es el turno del jugador de echar un buen vistazo al contrato. Cualquier consulta que pueda surgir normalmente se plantea con el agente (que ya ha revisado los contratos a primera hora de la tarde).

Justo antes del cierre de la ventana

- Envíe la documentación

Antes de que el reloj llegue a la hora límite, todos los contratos se firman y se entregan a la persona apropiada a cargo de tratar con la federación sobre los asuntos de registro.

La primera etapa, para una transferencia internacional, es cargar todos los documentos relevantes en el FIFA TMS (Transfer Matching System). Esta plataforma en línea extremadamente útil fue lanzada por la FIFA en 2010 y ha acelerado significativamente el proceso de registro de jugadores que cruzan fronteras (de una federación a otra). El sistema solía ser relativamente complejo y no particularmente fácil de usar, pero ahora funciona a la perfección.

Una vez que ambos clubes combinan toda la información relacionada con la transferencia (es decir, información idéntica en lo que respecta a las condiciones de pago, las cuotas, el porcentaje de venta, los datos bancarios y varias cláusulas), lo que generalmente se realiza en unos 10-15 minutos. El resto del proceso de registro, incluida la autorización para jugar partidos competitivos, es luego manejado por las federaciones participantes involucradas.

En este punto estás en casa y tranquilo. El fichaje se puede presentar con un elegante anuncio en redes sociales y puede sentarse y ver a los fanáticos enloquecer. A veces, en casos extremos, la aprobación final puede retrasarse, como cuando la llegada de Andrei Arshavin al Arsenal fue interrumpida por una tormenta de nieve en 2009, pero en general, siempre que el papeleo se presente a la hora establecida, todo está bien.

Después del cierre de la ventana de transferencias

Una vez que haya felicitado a su personal por lograr el acuerdo, finalmente es hora de sentarse, servirse una bebida, encender ese cigarro y disfrutar de la gloria. La forma en que el jugador se adapta en tu club está fuera de tus manos y has hecho el mejor trabajo que puedes. Alégrate de que la ventana de transferencias haya terminado y trata de evitar una situación tan apresurada con una mejor planificación y comunicación la próxima vez.