El directivo de Nacional, José López Rubio, habló en el programa HDF de Radio 1010 AM, donde se refirió al clásico frente a Peñarol en el Gran Parque Central, el presente del equipo de Pablo Repetto, la llegada de Luis Suárez y la posible salida de Brian Ocampo.
Respecto al partido clásico ante los Carboneros, López Rubio dijo: "Van a ser 2.000 mil entradas las que le vamos a dar a Peñarol. El precio de las entradas va a ser parecido al que le cobraron a la gente de Nacional cuando fue este año al estadio de Peñarol”.
Consultado sobre el hecho de que el encuentro se dispute con público visitante en las tribunas y lo que se puede provocar, el dirigente aseveró: "Yo no quiero que el clásico sea una fiesta, porque el partido uno lo ve con dramatismo. Ojalá sea una fiesta después para nosotros. Queremos que todo transcurra en los cánones normales y que no haya hechos de violencia”.
El dirigente albo también se refirió al buen presente del equipo, aunque destacó el duro golpe que significó la eliminación de las competencias internacionales: “Nos pesó mucho y a mi en lo personal me pegó fuerte quedar eliminado de la Sudamericana. Goianiense no era ni Flamengo ni Palmeiras. Nos habíamos ilusionado con la llegada de Luis Suárez y con el plantel que tenemos.”
Sobre lo que provocó y sigue provocando la presencia del Pistolero en Nacional, López Rubio dijo que "es un referente porque él mismo dentro del plantel habla con los jóvenes y vuelca toda su sapiencia de carrera como profesional. Este momento de Ocampo, por ejemplo, es porque tiene a una persona como Luis que lo aconseja constantemente”.
Justamente, otro de los temas que trató fue la posible salida del talentoso futbolista tricolor, pretendido por el Cádiz de España: “Es público y notorio que Nacional en el 2022 no ha vendido jugadores y tenemos la necesidad de vender. Por año en ventas nos tienen que entrar entre 3 y 4 millones de dólares. Anoche tuvimos reunión de directiva y no había llegado ninguna oferta concreta sobre la venta de la ficha de Ocampo”.