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¿Qué necesitan hacer los Chiefs para volver a la cima de la NFL?

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Pasquel: Dudo mucho que Mahomes pueda llegar a la altura de Brady (2:45)

Javier Trejo, Miguel Pasquel y Ramiro Pruneda debaten sobre si Patrick Mahomes está a la altura de Tom Brady en la historia de la NFL. (2:45)

Trazamos el mapa que podría ayudar a Kansas City a recuperar su lugar en la cima


Luego de verse humillados en el Super Bowl LIX ante los Philadelphia Eagles, por 40-22 --créanme que el partido nunca estuvo tan cerrado como podría sugerir ese marcador-- llegó el momento para que los Kansas City Chiefs se miren largo y detenido al espejo, y tracen los pasos a seguir para dejar atrás la vapuleada y retomen su sitio en la cumbre de la NFL.

Un poco de confianza y un poco de soberbia, podrían haber sido factores influyentes para que Kansas City, el equipo con la mejor marca de la NFL en campaña regular, se quedará dolorosamente lejos de convertirse en el primer tricampeón en la historia del Super Bowl.

Pero, problemas en el armado de plantilla y ejecución en el campo de juego del Superdome de New Orleans fueron obstáculos insalvables ante los Eagles.

Entonces, ¿cómo se recuperan de esto? Dibujemos el mapa.

1. Certeza con Andy Reid

En los días previos al Super Bowl LIX, Reid declaró que dirigiría a los Chiefs por, al menos, un año más. Después de todo el cúmulo de trabajo que tiene Reid a su nombre, lo menos que Kansas City puede hacer es dejarle la puerta abierta para que decida, cuando él lo considere conveniente, cuándo se va.

Sin embargo, con 66 años de edad, y dirigiendo en la NFL desde 1992, no hay duda de que estamos más cerca del final que del inicio de su carrera. Las especulaciones en torno a un posible retiro han cobrado volumen en años recientes, y de ahí el hecho que haya tenido que responder sobre su futuro ante la prensa previo al Super Bowl LIX, en primer lugar.

Aunque llevar año con año el asunto de su continuidad no es lo recomendable, necesariamente, no hay manera de presionar a Reid para fije un plazo rígido. Lo que sí se puede hacer, no obstante, es comenzar a crear una estructura de transición para cuando llegue ese momento, similar a cuando Jimbo Fisher heredó las riendas de Florida State de Bobby Bowden.

Lo que es claro es que Reid todavía disfruto mucho la vida en la banca de un equipo de NFL, y tiene la oportunidad de seguir construyendo sobre un legado ya masivo, gracias a la plantilla que ha ayudado a armar, una que ha ganado tres Super Bowls en cinco apariciones durante los últimos seis años. Reid entiende que es parte de algo excepcional, y seguramente querrá ver hasta cuánto le saca a la colección de talento que posee ahora, comenzando por su quarterback.

Si la idea de Reid es mantenerse en el club durante unos dos o tres años más, aprovechando todavía la plantilla actual y antes de que sea obvia la necesidad de una reconstrucción, quizás valga la pena salir a declararlo abiertamente, para apagar especulaciones continuas sobre su futuro. Si no está seguro de ello, comenzar los preparativos de una transición que brinde tranquilidad a la organización sobre la continuidad del proyecto, podría ser el camino sugerido.

2. Nuevo contrato para Patrick Mahomes

El 6 de julio del 2020, Mahomes firmó un contrato récord de 10 temporadas y 450 millones de dólares con Kansas City. Cuatro ajustes después, Mahomes está bajo contrato con los Chiefs hasta el 2031, con dos años rescindibles adicionales, para ayudar a diluir impactos contra el tope salarial en temporadas futuras.

Como están las cosas ahora, las tres campañas que vienen tendrán los tres mayores impactos contra el tope salarial, hasta ahora, de ese pacto: 66,258,269 dólares para el 2025, 68,664,888 dólares para el 2026, y 64,814,888 dólares para el 2027. Pero, las compensaciones anuales en efectivo para Mahomes serán de 50 millones de dólares para el 2025, 56.75 millones para el 2026, y 52.9 millones para el 2027. Después de los primeros cinco años del acuerdo, lo más que se ha visto afectado el tope salarial de Kansas City han sido cargos por poco más de 37 millones de dólares, en cada una de las dos temporadas pasadas.

Kansas City podría seguir intentando patear cargos presentes al futuro, convirtiendo salarios base en bonos por reestructurar, pero una reestructuración más profunda a los siete años que restan en el convenio --sin contar los dos años rescindibles-- alinearía la compensación de Mahomes con la del resto de los quarterbacks de élite de la NFL, es decir, sobre los 60 millones de dólares anuales, al tiempo que reduciría los cargos contra el tope salarial para los siguientes, presuntamente, todavía los años de esplendor de la carrera del pasador.

Ese espacio liberado bajo el tope salarial en el futuro inmediato debería servir para atraer talento a la línea ofensiva que proteja al activo más importante de la organización, Mahomes.

3. Decisión sobre Travis Kelce

"No ha tomado una decisión, que yo sepa", comentó el propietario de los Chiefs, Clark Hunt, respecto a si Kelce seguirá con Kansas City para el 2025 durante la semana previa al Super Bowl LIX. "Personalmente, creo que estará de regreso porque ama tanto al juego, pero vamos a permitirle tomarse el tiempo que necesita para tomar esa decisión y ciertamente esperamos que desee regresar".

Kelce sí comentó frente a reporteros en los días previos a la derrota ante Philly que le gustaría jugar en el 2025, pero verlo salir derrotado del Superdome, en solitario, fue suficiente para disparar toda clase de especulaciones en redes sociales sobre si sería la última vez que abandonaba un estadio como jugador.

A Kelce solo le resta un año de contrato, uno que llega con un impacto contra el tope salarial del 2025 de 19,801,667 dólares. Similar a Reid, Kelce se ha ganado el derecho de decidir, bajo sus propios tiempos, si sigue o no. Similar a Mahomes, una reestructuración contractual disminuiría significativamente ese cargo, repartiéndolo en años futuros, permitiendo la adquisición de talento para el club.

Donde se diferencia el caso de Kelce de los otros dos es que, en caso de que Kelce decida no jugar, los Chiefs necesitarán moverse para cubrir la posición. Detrás de Kelce, aparecen en plantilla Noah Gray, Peyton Hendershot y Jared Wiley. En una ofensiva que depende tanto de yardas después de la atrapada, y que no necesariamente estira el campo verticalmente como lo hacía en los tiempos de Tyreek Hill, el papel del ala cerrada es vital para crearle espacios a los receptores abiertos en el perímetro.

Cualquier decisión que tome Kelce está bien, pero será mejor conocerla antes de que sea muy tarde hallar un reemplazo adecuado para él en el ataque, si es que se decide por el adiós.

4. Ayuda urgente en la posición de tackle ofensivo

Cualquiera que haya visto el Super Bowl LIX reconocerá ésta como las más apremiante de las tareas que tiene por delante la directiva en Kansas City.

Por alguna razón, los Chiefs dejaron escapar a un tackle ofensivo cuatro veces seleccionado al Pro Bowl de 26 años de edad que les ayudó mantener limpio a Mahomes --cero capturas en el Super Bowl LVII-- ante unos Eagles que lideraron la liga en ese departamento para aquella campaña, con cuatro jugadores ubicándose en doble dígitos.

Se le permitió caminar a Orlando Brown Jr. después de la victoria sobre Philadelphia hace dos años, y en su lugar, Kansas City importó para el 2023 a Jawaan Taylor de los Jacksonville Jaguars, mediante contrato de cuatro años y 80 millones de dólares. Eso fue considerablemente más que los 67 millones de dólares por cuatro años que acordó Brown con los Cincinnati Bengals en el mismo receso de campaña.

En aquella victoria sobre Philadelphia, el tackle derecho fue Andrew Wylie, un veterano que fue inconsistente durante la mayor parte de su carrera, pero que había encontrado estabilidad jugando al lado del guardia derecho estelar Trey Smith. Con Joe Thuney como guardia izquierdo y Creed Humphrey en el centro, más el aporte como relevo de lujo de Nick Allegretti, Mahomes no tenía que correr por su vida como sucedió anoche.

Hoy, Wylie y Allegretti son titulares en la línea ofensiva de los Washington Commanders. Taylor ha sido una decepción mayúscula, no solo por su bajo nivel de juego, sino por el número de penalidades que comete. Thuney alineó como tackle izquierdo, donde suele ser cumplidor, aunque sufrió todo el partido ante Nolan Smith Jr. en el Superdome. Adicionalmente, al sacar a Thuney de su posición de guardia, donde es All-Pro comprobado, se debilita el interior de la línea ofensiva. Con Humphrey, Creed y Thuney en el medio, Kansas City puede presumir la mejor línea interior ofensiva de la NFL, pero todo cambia cuando debe ingresar alguien más al guardia izquierdo, como fue evidente con Mike Caliendo ocupando ese sitio en el Super Bowl LIX.

Los Chiefs necesitan encontrar dos tackles titulares con urgencia, para poder permitir el regreso de Thuney a la posición de guardia izquierdo. El veterano D.J. Humphries fue una adición de media temporada, procedente de los Arizona Cardinals, pero es agente libre y no aportó demasiado en su poco tiempo con la organización.

Recontratar a Trey Smith

Para algunos, el guardia derecho de los Chiefs sería el mejor agente libre disponible en toda la NFL en el receso de campaña que está por iniciar. Smith comandará muchos billetes en el mercado abierto, si Kansas City le permite explorar sus opciones.

Pero, con tareas pendientes en las posiciones de tackle ofensivo, ¿para qué sumar una más con la búsqueda de un nuevo guardia derecho? Kansas City no está como para renovar, de golpe, tres de las cinco posiciones en su línea ofensiva. Smith es, entonces, la razón principal por la que liberar dinero contra el tope salarial de los contratos de Mahomes y Kelce es fundamental para Kansas City.

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1:33
Mahomes: "Esta es la peor sensación del mundo"

Patrick Mahomes y Travis Kelce reaccionan ante la derrota de los Kansas City Chiefs ante Eagles en el Super Bowl.

6. Renovar el grupo de receptores abiertos

Cuando los Chiefs enviaron en canje a Hill a los Miami Dolphins en el 2022, Kansas City perdió verticalidad de modo asombroso. Skyy Moore y Kadarius Toney fueron decepciones ofensivas. Rashee Rice cumple en la parte de sumar yardas después de la atrapada, pero su área de trabajo realmente es la zona corta e intermedia. Hollywood Brown tuvo nulo impacto en su primer año con los Chiefs.

Fuera de Xavier Worthy, recluta de primera ronda del año pasado, no hay muchas opciones para que los Chiefs vayan largo. Kelce ha dejado de ser una amenaza por las costuras, atacando a los safeties en lo profundo del campo. El libro de jugadas ofensivas se ha acortado para Reid y Mahomes.

Quizás, Brown pueda ser factor el año entrante, pero por ahora no tiene contrato vigente. E incluso en sus temporadas sano, los pases dejados caer fueron una preocupación. Los Chiefs han tirado los dados con ex reclutas de primera ronda de otros equipos, conocidos por su velocidad (Toney y Brown), pero los réditos no han sido suficientes.

Worthy seguirá mejorando y su protagonismo aumentará en el ataque, pero los Chiefs necesitan quién le ayude a sacarle la tapa a las defensivas por las laterales. Eso, en cambio, abrirá espacios para que Rice y otros maniobren en la zona corta. Y, devolverá algo de la capacidad de jugadas grandes a este ataque. Las últimas dos temporadas han sido las peores para Mahomes en términos de yardas promedio por intento de pase, con 7.0 en el 2023 y 6.8 en el 2024. Cuatro de las cinco temporadas campañas previas en que fue titular de tiempo completo, las terminó con promedios por intento de pase arriba de las 8 yardas.

7. Hallar una posición definitiva para Trent McDuffie

Esto tiene que ver, en realidad, menos con McDuffie y más con el resto de los esquineros de los Chiefs.

McDuffie, recluta de primera ronda del 2022, se instaló de inmediato en la ranura y se convirtió en un jugador All-Pro con la defensiva de los Chiefs.

Pero, cuando los Chiefs negociaron a L'Jarius Sneed en el pasado receso de temporada a los Tennessee Titans, McDuffie fue trasladado al exterior, donde volvió a cumplir como All-Pro durante la pasada temporada.

El problema, es que Kansas City necesita algo más que solo McDuffie. Jaylen Watson juega la otra posición externa, y no hay por qué moverlo, ahora, pero la duda está en Chamarri Conner, quien alinea ahora en la ranura. Quizás, convenga buscar la transición con Conner al exterior, o probar con alguien más, para volver a acercar a McDuffie al ovoide.

En la NFL actual, el esquinero en la ranura ya no es automáticamente el tercero mejor en la plantilla. En un esquema defensivo agresivo como el de Steve Spagnuolo, cargar con backs defensivos siempre será importante, y hacerlo desde la ranura te acerca al quarterback. Además, con los alas cerradas de la NFL contemporánea, te conviene en muchos partidos poner a tu mejor hombre en cobertura en el interior.

No es que McDuffie sea un desperdicio jugando por fuera, donde ya es el señalado para cubrir al mejore receptor abierto del oponente, pero podría tener un mayor impacto por dentro, si los Chiefs resuelven favorablemente la esquina opuesta a Watson.

8. Recobrar el ataque terrestre

Pacheco viene del peor año de su carrera, uno donde se perdió una porción importante por una fractura en la pierna. Y, aunque Kareem Hunt cumplió durante su ausencia, no es una solución a largo plazo.

No estamos pidiendo que los Chiefs regresen a los tiempos de Christian Okoye, Barry Word o Larry Johnson, pero con un ataque aéreo recortado por la falta de verticalidad, y con tu pasador sufriendo detrás de una línea ofensiva pobre, correr el balón con autoridad te puede sacar de aprietos.

Durante el Super Bowl LIX, los Chiefs solo lograron un primer intento por tierra, y apenas 49 yardas terrestres. Un juego terrestre decente hubiera ayudado a frenar a los defensivos de Philly en su asedio constante sobre Mahomes.

Además, Hunt está en la lista de los que están por convertirse en agentes libres, también.

9. Ayuda para Chris Jones contra los quarterbacks

Hace apenas dos años, Jones fue no solamente el mejor liniero defensivo de la NFL, sino estaba en la conversación por el mejor jugador de la liga, independientemente de la posición.

Jones sigue siendo un jugador de élite, pero el talento que le rodea se ha degradado un poco. Felix Anudike-Uzomah no ha podido justificar su selección en la primera ronda del 2023, y juega detrás del veterano Mike Danna. George Karlaftis cumple, por arriba del promedio, pero Charles Omenihu, quien también a la espera de convertirse en agente libre, no ha tenido el impacto esperado, entre una suspensión en el 2023 y una lesión de rodilla que le robó buena parte del 2024.

A sus 30 años de edad, es improbable volver a verle otra temporada de 15.5 capturas a Jones, de las cuales lleva dos. Pero, todavía puede ser una fuerza para presionar. Solo que necesita más ayuda de sus compañeros que en años previos.

El único error grave de Jalen Hurts en el Super Bowl LIX, fue la intercepción lanzada al inicio del juego, cuando no consiguió completar la mecánica de lanzamiento debido a la presión por el centro en una carga del linebacker Nick Bolton, quedándose muy corto su envío. Fuera de eso, Hurts no sufrió, ni cerca, la clase de presión que enfrentó Mahomes este domingo.

Y, aunque los Chiefs hicieron un buen trabajo limitando el daño de Saquon Barkley por tierra, permitieron a Hurts imponer una nueva marca para Super Bowl en yardas terrestres para un quarterback, con 72.

10. Mantener las distracciones a un mínimo

Se entiende, no es fácil mantener los pies en el piso y no adelantarse a los hechos, cuando se está a un partido de convertirse en el primer tricampeón en la historia moderna del juego.

Quizás, eso era el obstáculo autoimpuesto más complicado para los Chiefs, de cara al partido ante Philadelphia. Aquí es donde ciertos detalles sugieren que Kansas City pudo haber sufrido un exceso de confianza.

Por ejemplo, el atuendo que eligió Mahomes para llegar al estadio, portando un tono de verde idéntico al de los Eagles, pareció ser una declaración de que él era dueño de los Eagles, después de lo sucedido hace dos años en el Super Bowl LVII. Y, la elección de indumentaria de Travis Kelce, también parecía dar por sentado que habría celebración y champaña, y no caras tristes, al final del encuentro para los Chiefs.

No significa que los Chiefs no sean un equipo bien preparado. Fueron el mejor club en temporada regular, y quedaron mejor posicionados al final que otras 30 de las 32 franquicias de la liga. Eso, después de aparecer en su quinto Super Bowl en los últimos seis años.

Pero, todo ese éxito podría haberle restado un poco al hambre y a la concentración de Kansas City, que nunca encontró ritmo en el partido. Quizás, la confianza de que habían sido capaces de remontar déficits de doble dígito en sus últimos tres triunfos de Super Bowl, les hizo perder un poco el sentido de urgencia cuando Philadelphia empezó a apilar puntos.

De cualquier manera, Kansas City recibió un balde de agua fría del tamaño del Superdome en New Orleans, y eso les servirá para encarar la campaña del 2025 con una determinación distinta. Después de todo, no van a dejar de ser uno de los mejores equipos de la NFL de la noche a la mañana, como queda de manifiesto por el hecho de que aparecen como favoritos en las líneas de apuestas para conquistar el Super Bowl LX.