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La obra silenciosa y del corazón de Plaza Colonia con amputados, ciegos, sordos y chicos con síndrome de down

Hay obras que van más allá. Están lejos del marketing, de las grandes sumas de dinero que mueve el fútbol. No tienen difusión. Son silenciosas, pero de corazón. Plaza Colonia abrió el suyo. Un rincón donde los sentimientos están a flor de piel.

Desde el año 2015 el club brinda un espacio a chicos amputados, ciegos, sordos y con síndrome de down.

Todo comenzó a través de Giovanna Rivas, hija de un exjugador del club que en su condición de asistente social plantó la semillita de la inclusión en la institución.

“Primero comenzó insertando a las mujeres en el fútbol, una tarea compleja porque todos sabemos, y más en el interior, que los clubes son 100% machistas. Pero ella se involucró y como plazista se arrimó a trabajar y a aportar su impronta”, reveló el vicepresidente del club, Emilio Fernández, a ESPN.

Como Rivas en su actividad particular trabaja con gente con capacidades diferentes, generó el acercamiento con Plaza Colonia. “Nos abrió la cabeza con que el club y el deporte podían ayudar a un montón de gente”, comentó Fernández.

Fue entonces que se hizo un acuerdo con la huerta Buscando Espacios, una ONG para chicos con síndrome de down. “Ellos tenían una parte deportiva pero solo regenerativa, y querían comertir. Plaza les puso en profesor y de esos chicos de la huerta hay seis en la selección uruguaya que ojalá pueda concurrir al Mundial de Perú 2022”, expresó el vicepresidente del club.

Pero no todo terminó ahí para Plaza. Un día se presentó en el club Cristian Butín, un chico de la localidad de San Pedro, que había perdido una pierna en un accidente.

Butín comenzó a hacer deportes y propuso la idea de comenzar a practicar fútbol para amputados en Plaza Colonia. La sugerencia tomó forma.

En el año 2018 el club organizó un encuentro internacional con equipos de Argentina y esos mismos jugadores de Plaza formaron parte después del Mundial de amputados que se jugó en México.

Un dato que habla de la importancia de la inclusión es que en el equipo de amputados juega una chica llamada Florencia.

Fernández agregó que “tenemos un equipo de salón de sordos que nace de una necesidad de la asociación de sordos que necesitaban hacer ejercicios. Eso nos motivó a armar un equipo de fútbol sala y el 22 de noviembre del año pasado se jugó un amistoso con Peñarol, en Montevideo, cuya revancha será el 18 de setiembre en Colonia”.

Ese mismo día se aprovechará la oportunidad para jugar un partido con el equipo de no videntes de Peñarol. “Nuestros chicos no empezaron a practicar pero queremos motivar con esta venida de Peñarol. Como nosotros no tenemos muchos jugadores, ellos nos van a prestar algunos para completar el cuadro”, dijo el vicepresidente de Plaza Colonia.

Otro de los deportes que abarca el club es a través de un convenio con la Fundación Oportunidad, donde hay un equipo de fútbol de sillas sobre rueda.

“Hicimos dos campeonatos nacionales en Colonia en 2018 y 2019. La pandemia nos cortó para 2020 pero a fines de octubre arrancamos el tercer torneo nacional”, comentó el directivo. Otro de los convenios es con la Asociación de Tenis para la inclusión de chicos en sillas de rueda.

El profesor Ignacio Perdomo, golero de Fútbol Sala, es el profesional que está a cargo de todos los planteles.

La movida reúne alrededor de 70 personas que practican deporte. Todos juegan con la camiseta de Plaza Colonia y el escudo que identifica al deporte. La obra sigue. Es silenciosa, pero de corazón.