MANKATO -- En el último día de prácticas del campamento de los Minnesota Vikings en la Minnesota State University, el coach Mike Zimmer terminó la práctica cerca de 20 minutos antes de lo programado. Y no se debió a su satisfacción por lo mostrado.
Zimmer exclamó una dura reprimenda a sus jugadores en la conferencia de prensa tras la sesión matutina del jueves, llamándola una "práctica terrible" y diciendo que no estuvo "a la altura de mis estándares". Cuando se le preguntó qué fue lo que no le gustó del día, Zimmer fue expedito: "todo".
"Más les vale que mejoren pronto, o se desatará un infierno", advirtió.
En cuanto al apoyo que podrá recibir de sus veteranos para alinear al equipo nuevamente, Zimmer expuso, "me apoyaré en mi propios zapatos".
Reconoció que lo único positivo del día fue que el equipo se marchaba a casa.
El coach de segundo año detuvo la práctica al cabo de aproximadamente 25 minutos el jueves, obligando a los jugadores a correr vueltas alrededor del poste lejano y de regreso. El apoyador Chad Greenway dijo que era la primera vez que lo ponían a correr vueltas desde la preparatoria, pero ni él no otros jugadores se atrevieron a decir que no era merecido.
"Avanzado el campamento no puedes tener esa mentalidad, que simplemente vas a venir acá y rodar el balón", aceptó el mariscal de campo Teddy Bridgewater. "El coach Zimmer, es un entrenador duro. Quiere que todo sea preciso en la práctica y no hicimos un buen trabajo.
"Somos un mejor equipo que lo mostrado hoy en la práctica. Los muchachos probados que tenemos en el vestidor aprecian eso. Regresaremos más tarde hoy para el ensayo lento y con la mentalidad adecuada".
Los Vikings, que terminaron 7-9 la temporada pasada, se han vuelto una selección reiterada en los pronósticos de playoffs con el regreso de Adrian Peterson, pero se esperaba que Zimmer colmara esas expectativas a lo largo del campamento. Se mostró feliz con el desempeño de los Vikings durante su victoria de 14-3 sobre los Pittsburgh Steelers en el juego de Salón de la Fama el domingo pasado, pero no estuvo en posición de ofrecer reflexiones brillantes el jueves.
"Eso no es lo que hacen los equipos buenos. Los equipos buenos se enfocan en la tarea que hay enfrente", sostuvo Zimmer. "No se enfocan en lo que ha sucedido los últimos 13 días. Se preocupan por el ahora y atienden el deseo de mejorar. Eso hacen los equipos buenos".
Cuando se le pidió relatar lo dicho a sus jugadores al final de la práctica, Zimmer consideró que "probablemente no lo pueda repetir".
Información de AP fue utilizada en la redacción de esta nota.