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¿Quién gana y quién no?

Matsui recibió anillo en uniforme de los Angelinos en 2010 por la victoria de NY en 2009. Alan Maglaque/US Presswire

Hay dos aspectos sobre la postemporada que generan poca prensa a pesar de ser bastante interesantes. Uno trata del dinero que obtienen los jugadores por esos partidos y el otro es sobre las reglas que existen para poder recibir los famosos anillos de Serie Mundial. En eso nos concentraremos esta semana.

El artículo X del Convenio Colectivo entre MLB-MLBPA explica el punto de la remuneración de los peloteros que participan en la postemporada. De acuerdo con las reglas, primero se debe crear un "pool" o fondo de la Serie Mundial, Series de Campeonatos y Series Divisionales que será nutrido de la siguiente manera:

1) 60% del total de la taquilla de los primeros 4 juegos de la Serie Mundial;
2) 60% del total de la taquilla de los primeros 4 juegos de cada Serie de Campeonato; y,
3) 60% del total de la taquilla de los primeros 3 juegos de cada Serie Divisional.

Ese fondo luego se distribuye a los jugadores de la siguiente manera:

1) El ganador de la Serie Mundial recibe un 36% del fondo
2) El perdedor de la Serie Mundial recibe un 24% del fondo
3) Los perdedores de las Series de Campeonatos un 24% del fondo
4) Los perdedores de las Series Divisionales un 12% del fondo
5) Un 4% del fondo para los equipos que, sin ser los comodines, terminaron en el segundo lugar en su división.

La posterior división de ese dinero se decide por el voto de los jugadores de cada equipo, que se reune a tales fines. Esa distribución solo debería abarcar peloteros pero se le puede dar una remuneración o premio en efectivo al personal no uniformado siempre que no exceda de la porción que recibe cada jugador.

El convenio colectivo establece unos límites mínimos, como 2.416.450 dólares para el ganador de la Serie Mundial, que los equipos debe garantizar pero normalmente esas cifras son superadas con creces. Por ejemplo, en el 2005, los Medias Blancas de Chicago recibieron casi 15 millones de dólares del fondo, lo que representó aproximadamente unos 300 mil dólares por jugador.

Vamos a resumir los aspectos más importantes antes de dar algunos ejemplos. Con el dinero de la taquilla de la postemporada se crea un fondo que luego es distribuido entre los jugadores. La división de las "acciones" del fondo se determina en una reunión de peloteros y normalmente abarca solo aquellos que hayan estado más tiempo en el roster pero a veces se dan excepciones.

En el 2009, los jugadores de Anaheim decidieron darle una acción a la familia de Nick Adenhart, lanzador que había fallecido en un accidente de tránsito a principios de esa temporada. Esa acción terminó valorada en unos 138.087 dólares.

En el 2004, los jugadores de los Medias Rojas de Boston le otorgaron ¾ de acción a Nomar Garciaparra a pesar que había sido cambiado a mitad de temporada.

En el 2007, los jugadores de Colorado le dieron una acción a la familia de Mike Coolbaugh, un coach que murió en un juego de ligas menores luego de haber sido golpeado en el cuello por un batazo de foul. En ese caso la acción terminó valorada en 233.505 dólares.

La regla sobre los anillos de la Serie Mundial es mucho más sencilla pero igualmente se presta a controversia. Todo jugador que haya acumulado tiempo de servicio en el roster de un equipo que gane la Serie Mundial tiene derecho a un anillo.

Un caso curioso es el de Fred Lewis quien en el 2010 no jugó ni un solo inning para San Francisco antes de ser enviado a los Azulejos de Toronto y aún así, al haber estado en el roster por unos días, le tocó recibir su anillo de Serie Mundial e incluso una pequeña participación del fondo, que al final se determinó en unos 15 mil dólares.

Bengie Molina tenía asegurado un anillo de Serie Mundial en el 2010 independientemente de quien ganara ya que había estado en el roster de los dos equipos que participaron en ese clásico.

El mismo Nomar Garciaparra recibió su anillo de Serie Mundial por la victoria de Boston en el 2004 a pesar que ya no estaba con el equipo y, además, de tener una relación un poco turbulenta con muchos de los jugadores de los Medias Rojas.

En fin, algunos detalles que no son publicados con frecuencia pero que son buenos temas para la discusión.