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Mundial 1995, la única final en la historia entre Springboks y All Blacks

Joel Stransky convierte el drop que le dio el triunfo a Sudáfrica en la final del Mundial 1995 ante los All Blacks. Getty Images

Tras el triunfo de los Springboks ante Inglaterra por las semifinales de la Copa del Mundo, quedó confirmada la final entre los últimos dos campeones del certamen: Sudáfrica y Nueva Zelanda. Estos dos gigantes se vieron las caras en esta instancia en una sola ocasión: el tan recordado Mundial de 1995 disputado en tierras africanas, el cual terminó con triunfo para los locales. Toda la cita mundialista, en Star+.

Los All Blacks y los actuales campeones defensores, los Springboks, están en una nueva final de Mundial. Sin embargo, este duelo tan repetido en el Rugby Championship y en distintas ediciones de la Rugby World Cup (cinco veces en diez eventos), solo regaló una final entre los equipos más ganadores del certamen. Dicha edición está cargada de historia tanto rugbística como socialmente.

Aquella final, disputada en Johannesburgo, fue la conclusión del torneo que vio el regreso de los Springboks a la competencia internacional tras la suspensión impuesta por las políticas de Apartheid, las cuales dieron un vuelco de 360 grados tras la llegada de Nelson Mandela a la presidencia de Sudáfrica en 1994. El triunfo sudafricano en el torneo, coronado con un 15-12 en la final ante los All Blacks, adquirió una significancia tanto política como social en el marco de los esfuerzos del presidente sudafricano de unificar a la población, la cual se enfiló detrás del equipo campeón.

Por otra parte, desde lo deportivo tomó relevancia a partir del triunfo de una nación que no era considerada favorita por su estreno en Copas del Mundo (no participó en 1987 y 1991) sobre el equipo que incluyó a siete jugadores dentro del XV ideal, entre ellos al histórico Jonah Lomu y a cinco jugadores dentro del pack de forwards (gran virtud histórica de los sudafricanos). Aquella final fue una batalla desde lo físico que terminó definiéndose en tiempo extra gracias a la precisión de Joel Stransky, el mejor apertura del torneo.

Esta también es la segunda final que los Springboks disputarán en Francia y la cuarta en general. En su anterior registro definiendo en París, los sudafricanos vencieron 15-6 a nada más y nada menos que a Inglaterra.