Los adjetivos calificativos se quedan cortos para describir el momento que atraviesa Iga Swiatek en el circuito más exigente del mundo. La N°1 del mundo ganó su quinto título al hilo al derrotar en la final del WTA 1000 de Roma a Ons Jabeur (7ª) con un doble 6-2 en el marcador.
En la definición del torneo italiano se cruzaban dos rachas importantes. Por un lado, la polaca con 27 partidos ganados desde aquella primera victoria en Doha, a lo que luego se sumaron Indian Wells y Miami. Ya en Europa, luego de un exitoso estreno como la líder de la gira en su presentación en la Billie Jean King Cup, debutó en el cuadro principal de Stuttgart y, días más tarde, volvía a alzar los brazos en una instancia decisiva.
Tras su baja en Madrid, comenzó una nueva campaña en Roma, evento que defendía luego de superar en la edición anterior a Karolina Pliskova con un doble 6-0 memorable. En el Foro Itálico frenó a Gabriela Ruse (57ª), Victoria Azarenka (16ª), Bianca Andreescu (90ª), Aryna Sabalenka (8ª) y, por último, a Ons Jabeur.
La tunecina accedió a la última ronda del certamen con una seguidilla de 11 partidos ganados gracias a su buena semana en España, en donde conquistó el segundo y más destacado título de su ascendente carrera. Sin embargo, pese a la batalla que presentó en la final, fue Iga quien estiró su momento luego de una hora y 22 minutos de juego.
El momento que atraviesa la tenista de 20 años, que ahora cuenta con una mochila de 28 victorias al hilo -solo detrás de Justine Henin y las hermanas Williams-, se traduce también en la regularidad que ha adquirido con el correr de los meses en competencia. En 2021, después de la gran irrupción que tuvo gracias a la consagración en Roland Garros, se convirtió en la única jugadora del circuito en tocar la segunda semana en los cuatro torneos de Grand Slam. Sumado a eso, cuenta con 79,7% de balance positivo desde el retorno de la actividad en agosto de 2020 debido a las 82 victorias y 21 derrotas que acumula desde entonces.