El ayuntamiento de Merton, el barrio en el que está el All England Club, aprobó la expansión de Wimbledon, que pretende transformar el parque contiguo al club para dar lugar a un estadio para 8.000 espectadores y 38 pistas de hierba.
El siguiente paso para que la reforma de Wimbledon Park, otrora un campo de golf, siga adelante, será recibir luz verde del ayuntamiento de Wandsworth y del alcalde de Londres.
Esta medida ha sido controvertida, ya que los vecinos de la zona se han unido para protestar por el trastorno medioambiental que supondría, al tener que destruir una zona verde como es el actual parque.
Esta iniciativa, llamada Save Wimbledon Park, recogió más de 13.000 firmas y llevó a 75 personas a manifestarse en la sede de la votación, que recibió seis votos a favor y cuatro en contra.
Si la expansión consigue el visto bueno de Wandsworth y del alcalde, las nuevas pistas no estarían en uso hasta 2030 como pronto.