La Caja Mágica y el torneo de Madrid cerraron una Era del deporte español con la despedida de Rafael Nadal, que recibió un homenaje tan sencillo como su persona, pero cargado de un cariño tan descomunal como su carrera.
Su mujer y su hermana lloraban en el palco, mientras de lo alto del estadio caía una pancarta conmemorativa de las cinco victorias de Nadal en el torneo de Madrid, con la leyenda 'Gracias, Rafa'. Aparecieron las imágenes de las grandes victorias y el protagonista aguantó a duras penas las lágrimas.
Nadal ha disputado veinte ediciones del Masters 1000 de Madrid, pero solo las catorce últimas en el recinto de la Caja, a donde el torneo se mudó en 2009. Ya para entonces había ganado una vez el M1000 de la capital española.
En esa cancha central levantó el título en 2010, 2013, 2014 y 2017, contra cuatro rivales distintos: Roger Federer, Stan Wawrinka, Kei Nishikori y Dominic Thiem.
También se enfrentó por primera vez a Carlos Alcaraz, en 2021, y por última, en 2022. En aquella ocasión con victoria frente al entonces 120° del mundo, en esta con derrota ante el ya noveno del ranking, que poco mas tarde sería el número uno más joven de la historia. Madrid presenció aquel relevo generacional.
Nadal abrió la puerta de la Caja Mágica en 2009 como número uno del mundo y la cerró como 512, tras caer en el tobogán de las lesiones. Nadie dijo la palabra 'despedida'. Solo se habló de 'homenaje'. Sencillo y emocionante, para abrir el año uno después de Nadal.