El joven Lajal dio pelea, pero el español se llevó la victoria en sets corridos por 7-6 (3), 7-5 y 6-2.
Detrás de cada mago hay un truco. Y Carlos Alcaraz no lleva una varita mágica pero sí una raqueta que casi que cumple esa misma función. El español, luego de su auspicioso debut en Wimbledon, reveló cuál es el ritual que trata de hacer antes de cada partido para mantenerse enfocado y concentrado para rendir al máximo nivel.
Curiosamente, el murciano comparte por fuera del tenis una misma pasión con Rafael Nadal, y es el golf. Este deporte al que muchos tenistas y deportistas en general acuden como una suerte de sesión terapéutica, es una de sus escapatorias de la rutina. "Siempre que puedo intento ir a jugar. Es algo que me ayuda mucho a calmarme, a desconectar a nivel mental y a no pensar en el próximo partido", destacó en rueda de prensa.
El actual N°3 del mundo también habló acerca de cómo se sintió bajo esta superficie: "Cada vez que juego en pasto lo disfruto. Lo mismo fue el año pasado o en 2022, siempre disfruto jugar en Wimbledon. Es una superficie en la que puedo desplegar mi estilo".
El campeón defensor sacó adelante un partido importante ante Mark Lajal, un joven de Estonia que desplegó un gran tenis y sorprendió con sus golpes. "Jugó como si no tuviese nada que perder, y siempre es algo más complicado enfrentarse a un rival así. Como he dicho, las primeras rondas no son nada fáciles", reconoció 'Charly'.
Por último, Alcaraz dijo que se sintió muy cómodo en La Catedral y se mostró positivo de cara a lo que viene: "Estoy muy feliz por estar de vuelta en la Pista Central y por volver a jugar en esta maravillosa cancha".
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