Las secuelas de Wimbledon comienzan a salir a la luz. La edición de Londres, que en estas horas afronta sus rondas finales, dejó como saldo un gran número de tenistas lesionados, entre ellas figuras de renombre. Uno de ellos fue el polaco Hubert Hurkacz (7º ATP), quien debió abandonar en segunda ronda por un incesante dolor en la rodilla derecha mientras disputaba el cuarto set ante el francés Arthur Fils.
El gigante de Wroclaw, de 27 años de edad, que sufrió esa molestia tras ganar un punto fantástico en la red en un momento crucial del compromiso, anunció su baja del ATP 250 de Gstaad, donde planeaba hacer escala antes de alinearse a los Juegos Olímpicos de París, cuya decisión favorece directamente al argentino Tomás Etcheverry, quien recientemente compartió prácticas con Rafael Nadal, puesto que pasará a ser preclasificado número cuatro del evento y obtendrá bye en el estreno.
La postura de Hurkacz es concentrarse de lleno en su rehabilitación y doblegar esfuerzos con el fin de llegar en condiciones a las olimpiadas, presencia que a esta altura se presenta como un gran interrogante, donde representaría a su país nada menos que en el complejo de Roland Garros del 27 de julio al 4 de agosto.
No obstante, donde hay un perjudicado, hay otro que se ve favorecido. En este caso fue el tenista platense, actual 31 del ordenamiento, quien pasará a ser cabeza de serie por detrás del griego Stefanos Tsitsipas (1º), el francés Ugo Humbert (2º) y el canadiense Felix Auger-Aliassime (3º), en un torneo que reunirá, también, a los experimentados Stan Wawrinka y Fabio Fognini, además del italiano Matteo Berrettini y los sudamericanos Pedro Cachin (campeón defensor) y Daniel Galán, entre otros.
Cabe resaltar que Etcheverry, tercer mejor argentino del ranking, participó en el césped de Wimbledon y tras superar la primera ronda con holgura ante el italiano Luca Nardi, se despidió en cinco reñidos sets ante el australiano Alexei Popyrin.
El torneo suizo se realizará en superficie de polvo de ladrillo del 15 al 21 de julio.