Nunca deja de sorprender. Cuando parece que no hay nada más para agregar, Novak Djokovic (2º ATP) se sale con las suyas. Esta vez se convirtió por primera vez en su carrera en finalista de los Juegos Olímpicos y a raíz de ello sumó a su gloriosa carrera una infinidad de nuevas marcas.
El tenista balcánico, de 37 años de edad, jugará este domingo la final del evento en la capital francesa ante Carlos Alcaraz, en lo que será, probablemente, la definición más importante de su carrera, pese a haberlo ganado todo. Superó en semifinales a Lorenzo Musetti (16º) en dos parciales y se convirtió, entre otras cosas, en el jugador más longevo de los Juegos en acceder a la ronda decisiva desde Seúl 1988.
Pero hay más: el serbio, ex 1º del mundo, se unió a las leyendas del suizo Roger Federer y la estadounidense Serena Wiliiams, ambos en Londres 2012, en el listado de jugadores que arribaron a dicha instancia después de haber cumplido 30 años.
Además, es el cuarto hombre en toda la historia en disputar el compromiso por el título en los cuatro Grand Slam (Abierto de Australia, Roland Garros, Wimbledon y US Open) y en los Juegos Olímpicos, siguiendo los pasos del propio Federer, del español Rafael Nadal, del recientemente retirado escocés Andy Murray y del estadounidense Andre Agassi.
Como si no bastara, el 98 veces ganador ATP se dio el gusto en París de cortar la negativa racha de cuatro semifinales perdidas. En Beijing 2008 cayó con Nadal, en Londres 2012 no pudo con Murray, mientras que en 2021 fue derrotado por el alemán Alexander Zverev.
De esta manera, la premonición se hace cada vez más realidad, y Novak Djokovic, que ganó 10 de sus últimos 11 partidos y estadísticamente es el más grande de todos los tiempos, está a tan solo un partido de ganar todo lo que se puede en el tenis.
Para eso deberá batir al increíble español Carlos Alcaraz, a quien le tiró la responsabilidad y fue su verdugo en Wimbledon, que se convirtió en el más joven en llegar a la final y quiere seguir derribando récords.