Argentina fue de menor a mayor en una semana especial de Copa Davis. Como cuarto preclasificado del Grupo D en Manchester, el equipo de Guillermo Coria comenzó su participación con una derrota ante Canadá y, ya sin margen de error, se repuso con dos triunfos en días consecutivos frente al local, Gran Bretaña, y su verdugo en los Qualifiers 2023, Finlandia.
“Nos venimos haciendo fuertes como equipo y los chicos más que nadie se merecían un desahogo como el que tuvimos. Teníamos un grupo muy difícil. Jugamos una final contra Gran Bretaña y después tuvimos otra. Somos un equipo muy fuerte y estoy muy feliz por ellos”, fueron una de las primeras palabras de un capitán feliz, rodeado de sus jugadores a quienes no se les borraba la sonrisa de la cara.
Y agregó: “Nos vamos de este estadio como nos prometimos el primer día, con la frente en alto, mirándonos cada uno a los ojos, sabiendo que lo dimos todo y que esta vez la moneda cayó de nuestro lado. No es casualidad tampoco. Los chicos lo buscaron, se rompieron el alma. Les agradezco al cuerpo técnico y también a los entrenadores de los chicos”.