Todos los tenistas de primer nivel del circuito ATP culminaron su temporada en las últimas semanas y aprovechan sus respectivas vacaciones para liberar estrés y enfocarse en otras cosas, más aún sabiendo que en poco tiempo se disputará el Abierto de Australia 2025.
Ya sin actividad en el Tour, exceptuando los torneos Challengers, hace unos días había ocurrido algo llamativo, porque tres jugadores de elite le pidieron casamiento a sus parejas en cuestión de horas.
El primero en tomar la lanza y atraeverse había sido el noruego Casper Ruud (6°), de 25 años y dos veces consagrado durante 2024, quien el pasado 26 de noviembre se comprometió con su novia Maria Galligani, comuncando a través de redes sociales: "No puedo esperar a casarme contigo".
Posteriormente, precisamente el 28 del mismo mes, el australiano Alexei Popyrin (24°), último campeón del Masters 1000 de Montreal al sorprender al ruso Andrey Rublev en la final, haría lo propio con Amy Pederick: "Por siempre contigo".
El tercero en cuestión había sido el canadiense Felix Auger-Aliassime (29°), ex número seis del planeta y ganador de cinco trofeos en el máximo nivel, el cual emuló a sus dos colegas y se casará con su pareja Nina Ghaibi: "No podría haber soñado un mejor por siempre".
Aprovechando el envión, el húngaro Marton Fucsovics (104°), reciente proclamado en el ATP 250 de Bucarest para volver a las primeras planas, no quiso ser menos que el resto y le propuso matrimonio a Nini Molnar, eligiendo la coqueta Torre Eiffel como sede para tamaño ofrecimiento: "Tuyo por siempre".