En vísperas de su esperado regreso a las canchas en Brisbane, Nick Kyrgios ha intensificado sus críticas a Jannik Sinner tras el polémico antidoping del italiano.
“Es para disgustarte. Yo puedo perder los nervios, tirar la raqueta, pero eso no tiene nada que ver con hacer trampa y tomar productos que mejoren el rendimiento”, aseguró el tenista local cuando le preguntaron por los positivos del italiano y la polaca Iga Swiatek, en el Media Day previo al torneo.
Y siguió: “Dio positivo dos veces en diferentes momentos. Si no había hecho nada malo, ¿por qué le quitaron las bonificaciones y los puntos ATP? Claramente sintieron que algo malo había sucedido".
A Sinner le quitaron 325.000 dólares en premios y puntos para el ranking después de que una investigación de cinco meses concluyera que había dado positivo dos veces en un control de la sustancia prohibida clostebol durante las semifinales de Indian Wells en marzo. A pesar de ello, evitó una suspensión, ya que la Agencia Internacional de Integridad del Tenis aceptó su explicación de que su fisioterapeuta había utilizado accidentalmente un spray curativo que contenía clostebol sobre un corte.
Kyrgios, conocido por sus opiniones sinceras, se burló de Sinner llamándolo “el Grinch” en las redes sociales. Expresó aún más su descontento cuando Iga Swiatek recibió solo un mes de suspensión por un problema similar, enfatizando su determinación de no permanecer en silencio.
“Que dos N°1 del mundo sean descubiertos por dopaje es repugnante para nuestro deporte. Da una imagen horrible. Sinner es increíble en la cancha, pero la justicia debería ser fundamental. La forma en que se han manejado estos casos de dopaje es atroz y pone en riesgo la credibilidad de nuestro deporte”, cerró.
Kyrgios comparó la situación de Sinner con la de su compatriota Max Purcell, quien denunció por su cuenta que había infringido las normas antidopaje y destacó la importancia de la integridad. “Purcell reconoció su error. Yo nunca me doparía; la integridad es crucial. Hacer trampa es una falta de respeto”, afirmó.
Kyrgios expresó tolerancia cero hacia cualquier miembro del equipo que ponga en peligro su reputación. “Invierto en mi equipo para garantizar la profesionalidad. Mantener a un equipo problemático durante meses sin acción es dudoso”, comentó.
A pesar de la controversia en curso, el regreso de Kyrgios es esperado. Está previsto que se enfrente a Giovanni Mpetshi Perricard en Brisbane, lo que marcará su primer partido competitivo desde su larga pausa por lesiones.
Kyrgios, que formó un vínculo inesperado con Novak Djokovic, se unirá a él en dobles, lo que marcará un paso importante en su regreso. Si bien está emocionado por estar de regreso, el campeón del Abierto de Australia está concentrado en tomar su recuperación partido a partido en lugar de aspirar a grandes títulos.
Kyrgios, que se mostró preocupado por su recuperación, admitió: "Esta lesión es impredecible. Estoy agradecido de poder volver a jugar y planeo afrontar este proceso con cuidado".