Si nombramos la palabra "Grand Slam" es inevitable no pensar en los tres tenistas más ganadores de la historia en este rubro: Novak Djokovic (24), Rafael Nadal (22) y Roger Federer (20). Y justamente el suizo, quien hoy tiene 43 años y ya lleva casi tres retirado de la actividad profesional, fue el primero de todos ellos en presentarse en un major. Un 25 de mayo pero de 1999, comenzaba la leyenda.
En épocas de Roland Garros, hay que remontarse a la París de fines del siglo pasado. En un tenis dominado por Pete Sampras y André Agassi, Roger Federer apenas intentaba meterse entre los 100 mejores jugadores del planeta y todavía no había sido campeón en el circuito ATP ni tampoco en el Challenger.
En ese contexto, quien para muchos es el mejor tenista de la historia se presentaba por primera vez en un torneo grande. Pese a su ranking (N°111) no tuvo que jugar qualy e ingresó directamente al cuadro principal de Roland Garros gracias a un wildcard. Un certamen que, décadas después, es reconocido como el primer torneo de Grand Slam en recibir a "Su Majestad".
Si bien Federer había sido N°1 Junior en singles y N°7 en dobles, sus primeros resultados en el nivel profesional no fueron los esperados. Es por eso que en su presentación ante Patrick Rafter (N°3 del planeta en ese entonces), no se esperaba mucho de él. Pese a un primer set sorpresivo, el triunfo fue para el australiano por 5-7, 6-3, 6-0 y 6-2. Pero el resultado no importaba: el primer paso ya estaba dado.
Curiosamente, su primera incursión en un Grand Slam fue en el que más difícil se le hizo ganar. De los 20 que posee, solamente una vez pudo salir campeón de Roland Garros. En 2009 aprovechó la sorpresiva derrota de Rafael Nadal en los octavos de final ante Robin Soderling (NdR: el español venía de ganar el trofeo entre 2005 y 2008) y se cargó al sueco en la gran final en sets corridos.
En la arcilla de París solamente perdió 17 partidos y ganó 73. Pero de esa cantidad de derrotas, siete corresponden a caídas contra integrantes del Big 3, es decir, Nadal o Djokovic. Y el manacorí le ganó nada más ni nada menos que cuatro finales: 2006, 2007, 2008 y 2011. Un recinto en el que sin dudas Rafa se hizo gigante, ya que Roger nunca pudo vencerlo allí.
Roland Garros fue el primero, pero también el anteúltimo. Después de su regreso al tenis, entre operaciones de rodilla y Covid-19, Federer pisó París por última vez. Llegó hasta los octavos de final, donde no pudo presentarse ante Matteo Berrettini. El físico le estaba diciendo basta. Un par de semanas después, en su querido Wimbledon, jugó por última vez un Grand Slam, despidiéndose en los cuartos de final ante Hubert Hurkacz.
Toda la actividad de Roland Garros podrá seguirse en VIVO por Disney+.
