La Copa Davis, con 125 años de gloria, tiene infinidad de rincones aún sin descubrir. Lejos de las luces de un Italia campeón con el número uno como estandarte, por ejemplo, hay tenistas que no están en el centro de la escena pero tienen cosas por decir. Marcas por romper. O historias que contar.
Es el caso de Brett Baudinet. Representante de Islas Cook, un archipiélago localizado en Oceanía concretamente en el océano Pacífico Sur, entre Hawai y Nueva Zelanda, que alcanzó un récord recientemente. ¿De qué se trata? Con su última victoria en dobles igualó a Leander Paes con 45 triunfos (45-22 es su registro total en esta especialidad).
Nacido el 1 noviembre de 1981 es el fundador y director ejecutivo de Smartie, una aplicación fintech diseñada para llevar los pagos móviles, la banca y el comercio electrónico a las comunidades del Pacífico. Además es director general de The Grand Resort Rarotonga, el primer hotel de lujo "cinco estrellas" en las Islas Cook; y hasta desempeña un papel clave en el turismo y el desarrollo económico de su país de origen.
A pesar de estos exigentes roles dice que es su fuego interior por el tenis lo que continúa impulsándolo a la cancha. Con 21 años en el deporte y 70 series disputadas es un símbolo para quienes abrazan el tenis bien lejos del tenis. Su trayectoria en la Copa Davis comenzó en Sri Lanka en 2000, y desde entonces ha liderado al equipo hacia logros históricos, incluido su ascenso al Grupo II en 2004 y su primera victoria en casa ante Fiji, en 2005.
En reconocimiento a su longevidad y dedicación, Baudinet se ganó un lugar en el Cuadro de Honores de la ITF en Londres después de completar su eliminatoria número 50. Fue nombrado Deportista del Año de las Islas Cook en 2017 y en 2021 se convirtió en el primer isleño en capitanear el equipo de Copa Davis de Oceanía del Pacífico.
En esta oportunidad representó a este combinado en el Grupo IV de Asia/Oceanía desde adentro de la cancha, en Malasia. Su equipo jugó contra Kuwait, Qatar, Irak y Filipinas, perdiendo los cuatro partidos. Sin embargo, Baudinet y su compañero de dobles, Maka Ofati, ganaron sus matches de dobles contra los tres primeros rivales y cedieron vs. los filipinos.
Esta no es una carrera definida por títulos ni fotos en los Grand Slams sino por algo quizás más significativo: la excelencia sostenida, la representación nacional y el servicio a su patria. Con 43 años lo único que ve en el futuro es seguir inspirando con récords y con pasión por el deporte.