Alegría grande para Diego Schwartzman. El argentino, que partía como cabeza de serie N°6 en Río de Janeiro, se impuso al español Fernando Verdasco por 6-2, 6-3, para levantar su primer trofeo de categoría ATP 500.
Para el argentino, sexto favorito en Brasil, el partido suponía su primera final en un ATP 500, mientras que para el español significa el mejor resultado esperado en su primera participación en el abierto carioca.
Además, el nacido en Villa Crespo había cumplido con jugar la definición de al menos un torneo al año por tercera temporada consecutiva. Ganó en Estambul en 2016 y jugó las finales de Amberes 2016 y 2017.
Esta vez, el jugador de Buenos Aires añadió la segunda corona ATP a su palmarés tras una final que se prolongó durante una hora y 23 minutos. Schwartzman no levantaba un título desde la edición del torneo de Estambul en 2016.
Verdasco y Schwartzman fueron los sobrevivientes de un torneo en que se quedaron por el camino los cuatro primeros favoritos: el croata Marin Cilic, número tres del mundo, el austríaco Dominic Thiem (6), campeón del año pasado, y los españoles Pablo Carreño (11), finalista en 2017, y Albert Ramos Vinolas (19).
El Abierto de Tenis de Río de Janeiro forma parte de la gira sudamericana sobre arcilla que comenzó hace dos semanas en Quito, pasó la anterior por Buenos Aires e irá a Sao Paulo en la entrante.
La competición repartió 1,46 millones de dólares en premios y el vencedor se adjudicó, claro, 500 puntos en la clasificación ATP y 365.560 dólares.
Esos 500 puntos para el ranking ATP, le permitirán al argentino irrumpir por primera vez en su carrera en el Top 20 de la clasificación mundial este lunes. De hecho, subirá al 18° lugar.