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Los Sacramento Kings de la temporada 2001-02 dejaron escapar la corona de sus manos

Sacramento Kings ESPN

En la historia de los deportes profesionales nos encontramos con innumerables casos de equipos que cautivaron a las masas por la acumulación de talento, carisma y juego colectivo alegre y de calidad, pero que no pudieron lograr la meta final de obtener un trofeo de campeonato.

Los Sacramento Kings, franquicia de la División del Pacífico de la NBA, reunieron esas condiciones en la Temporada 2001-02.

Con una escuadra que venía ya mostrando gran potencial gracias a la presencia de estelares como Chris Webber, Peja Stojakovic y Vlade Divac, los Kings agregaron al armador Mike Bibby al plantel.

La meta de este grupo no era fácil: destronar a Los Angeles Lakers, un equipo que ya había ganado los últimos dos campeonatos encabezados por la explosiva pareja de Shaquille ONeal y Kobe Bryant y el legendario entrenador Phil Jackson.

Sacramento lució muy bien desde el inicio de la temporada, a pesar de la ausencia de Chris Webber por una lesión que lo mantuvo fuera los primeros dos meses. La química del conjunto era notable, especialmente del lado ofensivo de la cancha.

Además de las estrellas del equipo, los Kings contaban con jugadores especiales que hacían al equipo más peligroso. El armador Bobby Jackson salía de la banca y no dejaba sentir la ausencia de Bibby. Doug Christie era un especialista defensivo que le daba esa rudeza necesaria en cualquier club de baloncesto con aspiraciones.

El primer gran paso que dio ese equipo fue registrar la mejor marca de ganados y perdidos en toda la NBA con 61–21 en la serie regular. Eso le daba ventaja de la casa en los playoffs, un arma de suma importancia en su plan de destronar a los Lakers.

En la postemporada Sacramento mostró su poder al derrotar fácilmente al Utah Jazz y Dallas Mavericks en las dos primeras rondas y entonces llegó el duelo esperado, Kings vs Lakers.

Como lo habían hecho en toda la campaña, el equipo de Sacramento lució superior y llegó a tomar la ventaja de la serie 3-2. Apenas una victoria separaba a los Kings de una final contra un débil rival de la Conferencia Este. Era prácticamente una garantía que el conjunto que saliera con vida del Oeste, ganaría el título de la NBA:

Los Lakers ganaron los dos últimos partidos para ganar la Final de Conferencia, pero la serie superó las expectativas. Robert Horry conectó un disparo de tres milagroso en el cuarto partido mientras terminaba el reloj que permitió al equipo de Los Ángeles empatar la serie a dos victorias por bando.

Además, los juegos cuatro y cinco de la serie finalizaron por apenas un punto de diferencia, con ambos equipos ganando uno de esos partidos.

Esos Sacramento Kings son considerados uno de los mejores equipos que no ganaron un título y al día de hoy no hay dudas de que si hubieran alcanzado la Serie Final hubieran conquistado la corona de la NBA en la campaña 2001-02.