Francisco Lindor, paracorto de Mets, dijo que tenían que dejar atrás el revés en el J1 de SCLN y ser agresivos en el segundo, que fue lo que llevó a Mets a igualar serie a Dodgers
LOS ÁNGELES -- Francisco Lindor reconoció que el domingo por la noche habían jugado un partido difícil para batear, en el que fallaron buenos pitcheos para tratar de conectar y que al final había costado la derrota en el primero de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
Este lunes, dijo que querían asegurarse desde el principio que las cosas fueran diferentes, Y así sucedió desde el primer momento del partido que ganaron los New York Mets 7-3 a Los Ángeles Dodgers para igualar la Serie.
"Teníamos que empezar agresivos para empezar a marcar el juego", dijo Lindor en el vestidor visitante del Dodger Stadium. "Había que dejar el partido pasado atrás y enfocarnos en el día a día. Este equipo ha sido bueno toda la temporada haciendo eso".
Lindor pegó cuadrangular solitario para abrir el partido y convertirse en el sexto bateador en la historia de los Mets que la saca del parque en postemporada siendo el primero que enfrenta al pitcher rival.
"Sólo quería tener un turno de calidad al bate para empezar el juego", reconoció Lindor. "Afortunadamente le pegué bien y creo que eso nos dio mayor confianza a todos".
Lindor conectó al abridor relevista Ryan Brasier para detener una racha de 33 entradas sin que los pitcher de los Dodgers permitieran anotación y que incluyó la blanqueada que sufrieron sus Mets el domingo 9-0.
Después en el segundo inning llegó el tablazo que al final sería el que marcaría el partido de manera definitiva. Mark Vientos conectó grand slam, del que Dodgers ya ni siquiera pudo recuperarse.
Los Dodgers reemplazaron a Brasier en su juego de bullpen con Landon Knack, quien de inmediato recibió sencillo de Starling Marte; regaló pasaporte a Jesse Winker para que Taylor empujara la segunda carrera de los Mets con doblete.
Francisco Álvarez fue puesto out y los Dodgers decidieron caminar intencionalmente a Lindor. Ahí donde según Vientos sintió que era algo personal.
"Bien ¿Quieren que batee? Eso haré", dijo Vientos. "Voy a enseñarles que puedo batear".
Lindor consideró que esa confianza que siempre ha tenido vientos inspiró a todo el equipo; bateadores y lanzadores.
El abridor Sean Manaea lanzó cinco entradas con pelota de dos imparables; aunque recibió las tres carrera de los Dodgers, incluidas dos limpias entre la quinta y sexta entrada, la ventaja que le habían dado sus bateadores eran suficientes para ser más agresivo.
"Con esa ventaja las cosas se hacen un poco más sencillas", mencionó Manaea. "Sólo traté de atacar la zona y poner delante de los bateadores".
Los Mets saben que la serie por el boleto al Clásico de Otoño va a reiniciarse en su casa el miércoles al mejor de cinco partidos y que el camino a la Serie Mundial es más largo que el viaje de Los Ángeles a Nueva York del lunes por la noche.
Pero también reafirmaron que pueden batear, anotar y ganarle al equipo con más victorias en temporada regular de todas las Grandes Ligas.
"Esta no es una carrera de velocidad", dijo Manaea. "Será una serie larga y dura".
Los Dodgers están convencidos de que así será; de que tendrán que ir a Nueva York a tratar de ganar tres partidos para llegar a la Serie Mundial.
También saben que necesitarán de todos sus jugadores, en ofensiva y defensiva, incluido Shohei Ohtani, quien este lunes se fue en blanco en tres turnos al bate, con dos bases por bolas y dos ponches.
"Ohtani y el resto de los Dodgers son algunos de los mejores bateadores que hay en el béisbol", reconoció el relevista de los Mets, Edwin Díaz, quien logró salvamento de cuatro outs. "Tenemos que ir a casa y sólo enfocarnos en el partido que sigue".