CLEVELAND - Esta postemporada los bates de los Azulejos de Toronto se han asemejado mucho más a la poderosa máquina ofensiva a la que estuvimos acostumbrados la campaña pasada.
No fue hasta la noche del viernes, en su quinto partido en playoffs, que Corey Kluber se convirtió en el primer lanzador en blanquear a los Azulejos esta postemporada, donde habían promediado 6.75 carreras por partido.
No obstante, fue más una noche de oportunidades desperdiciadas, con los Azulejos teniendo corredores en posición anotadora en cada una de las primeras cuatro entradas. Toronto estuvo muy cerca, pero nunca lograron ese hit decisivo que los había acompañado en todo el recorrido en los playoffs.
Antes de toparse con Kluber, Toronto había registrado un promedio de bateo de .478 con corredores en posición anotadora esta postemporada (de 23-11) con 15 carreras impulsadas.
En sus primeros cuatro partidos de postemporada, la victoria en el partido por el comodín de la Liga Americana sobre los Orioles de Baltimore y la barrida en tres partidos de los Rangers de Texas en la Serie Divisional, los Azulejos se combinaron para 27 carreras anotadas y 25 impulsadas.
No sólo eso, los bateadores de Toronto sumaron 10 cuadrangulares en esos primeros cuatro juegos, lo cual es prácticamente al número de jonrones que conectaron el resto de los equipos de la Liga Americana en los playoffs en el mismo lapso.
Ha sido un despertar sumamente oportuno para los bates de Toronto después de una campaña donde fueron principalmente llevados de la mano de su pitcheo, y donde finalizaron el mes de septiembre y sus tres juegos en octubre promediando apenas 3.7 carreras por partido.
"Todos los equipos, tengan buena o mala ofensiva, tienen períodos donde los resultados a veces no están ahí", destacó el jardinero José Bautista. "Vino en un momento poco difícil para nosotros en el mes de septiembre. Idealmente sería mejor que sucediera en otro mes del año, pero eso fue lo que pasó".
"Lo más importante fue que en la última semana de la temporada y en la primera serie de los playoffs hemos hecho un buen trabajo", agregó el dominicano, que ha bateado para apenas .167 pero cuenta con 2 cuadrangulares y 5 carreras impulsadas en estos playoffs.
"Nuestro nivel de concentración por haber jugado ese tipo de juego donde no teníamos el lujo de perder ya en las últimas dos semanas de la temporada y en el juego del 'wild card' nos llevó a un nivel mental de enfoque un poquito más alto de lo que teníamos antes. Eso lo hemos mantenido y si Dios quiere lo vamos a mantener por el resto de los juegos que nos quedan en esta temporada".
El primera base Edwin Encarnación reiteró que lo más importante para Toronto es que la ofensiva supo despertar en la situación propicia, aunque la noche del viernes haya sido una excepción contra el lanzador ganador del Cy Young hace dos años.
"En el año entero no tuvimos una ofensiva como la hemos tenido en los playoffs", destacó el toletero dominicano. "Gracias le damos a Dios que hemos explotado en el momento adecuado, en el momento de que debemos hacerlo. Todos hemos puesto un granito de arena, por eso estamos aquí discutiendo el título de la Liga Americana".
Encarnación, quien fue el motor ofensivo de los Blue Jays toda la campaña al batear para .263 con 42 cuadrangulares y 127 carreras impulsadas, también ha sabido extender su excepcional desempeño a la postemporada.
El toletero de 33 años ha registrado un promedio de bateo de .400, con 7 carreras impulsadas y 3 cuadrangulares, incluidos el jonrón decisivo en el partido del comodín contra los Orioles.
"De mucho orgullo me llena ya que uno cuando conecta sus jonrones para ganar un juego y avanzar a la próxima ronda; me hace sentir mucho orgullo", destacó Encarnación. "Trato siempre de hacer lo mismo [con mi swing] sólo estar más consistente y seguir haciendo ajustes cada día".
No obstante, ambos toleteros reiteraron que aunque los Azulejos se han destacado por su ofensiva esta postemporada, su cuerpo de lanzadores ha sido el verdadero responsable de haberlos colocado en la misma posición que estuvieron el año pasado, la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Así lo demostró Marco Estrada en el primer juego contra Cleveland, donde Toronto cayó por marcador de 2-0 en lo que fue el primer partido completo de su carrera. Estrada limitó a los Indios a sólo cinco hits en ocho entradas, aunque uno de ellos fue el jonrón decisivo de dos carreras de Francisco Lindor.
"Sin la labor del pitcheo abridor y del bullpen no hubiéramos tenido el chance de estar en esta situación; la ofensiva ha tenido sus altas y bajas igual como la defensa", explicó Bautista.
"Creo que si nosotros no hubiésemos tenido el pitcheo que tenemos no hubiésemos estado aquí hoy en día; eso fue de bastante ayuda para nosotros", agregó Encarnación. "Sin ellos no hubiésemos estado aquí donde estamos".