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Las 'Gargantas Profundas' del deporte

'Garganta profunda' se le llamó a Mark Felt, un ex alto funcionario del FBI, que sirvió de fuente a los reporteros de 'The Washington Post' en el escándalo Watergate que precipitó la renuncia del presidente estadounidense Richard Nixon en 1974.

Gústele o no, el lanzador de los Oakland Athletics, Mike Fiers, fue el último en ganarse un espacio en la historia de los 'soplones' en el deporte.

Ya solo no será recordado por los dos pelotazos a Giancarlo Stanton --uno de ellos en el rostro que obligó al entonces jardinero de los Marlins a someterse a una cirugía reconstructiva-- sino por su revelación de que los Houston Astros robaron señales durante la temporada de 2017, la misma en que ganaron la Serie Mundial.

Fiers desveló el tema en una entrevista con The Athletic. Como consecuencia, Major League Baseball comenzó una investigación.

Muchas personas se preguntan si la carrera del lanzador habrá llegado a su fin por 'garganta profunda'*. Y es que él violó la regla no escrita de que lo que sucede a lo interno de un equipo ahí se queda.

Él formó parte de aquel grupo que superó en siete juegos a Los Angeles Dodgers en la Serie Mundial de 2017. Asalta la duda de por qué no habló entonces, cuando supo lo que estaba haciendo su hoy exequipo.

Fiers no es el primero --tampoco debe ser el último-- en revelar un secreto de connotaciones importantes. Acá les dejo con otros ejemplos de atletas reconocidos que también abrieron, o se sospecha, la boca.

José Canseco (MLB/Cuba): Después de una exitosa y extrovertida carrera, el cubano destapó todo el escándalo de uso de anabolizantes en el deporte de las bolas y strikes. En 2005 publicó su libro 'Juiced: Wild Times, Rampant 'Roids, Smash Hits & How Baseball Got Big' donde aseguraba que el "85 por ciento" de los peloteros de ligas mayores utilizaban sustancias prohibidas para aumentar el rendimiento. En el libro mencionó a peloteros renombrados como Jason Giambi, Alex Rodríguez Mark McGwire, Iván Rodríguez y Barry Bonds, entre otros.

Iker Casillas (Fútbol/España): El indiscutido mejor arquero español de la historia salió por la puerta de atrás, en 2015, del Real Madrid por ser supuestamente quien filtraba información a los medios sobre lo que sucedía en el vestuario del club en la turbulenta gestión del técnico portugués José Mourinho. 'San Iker' jura y perjura que no era el topo. "Decir que soy soplón está fuera de lugar", dijo entonces durante una concentración con la selección española. Nunca se probó el "delito" que le costó su estancia en el equipo merengue, pero la duda existió y las consecuencias fueron irrebatibles. PD: Su matrimonio con la periodista Sara Carbonero tampoco ayudó mucho.

Floyd Landis y Tyler Hamilton (Ciclismo/Estados Unidos): Quizás sus carreras no son grandilocuentes, pero sus testimonios fueron decisivos para derrumbar el mito de su compañero de equipo Lance Amstrong por el catalogado como el "más sofisticado, profesionalizado y exitoso programa de dopaje jamás visto". El presidente de la Unión Ciclística Internacional (UCI) entre 2005 y 2013, Pat McQuaid, además de llamarles cerdos a Landis y Hamilton, dijo: "(...) Otra cosa que me molesta es que Landis y Hamilton aparecen como héroes, pero están tan lejos de serlo como la noche del día. No son héroes, son escoria. Han hecho daño al deporte». Landis, que ganó el Tour de Francia en 2006 y luego perdió el título por dopaje, reconoció su culpa y aseguró que su compañero Amstrong también había hecho trampas. Hamilton, por su parte, dijo a la cadena CBS que vio a Armstrong inyectarse EPO más de una vez. Hamilton también fue sancionado por doping.