Si tuvieran algún problema en el trabajo, por menor que éste fuera, ¿mencionarían a sus hijas como excusa?
Freddie Kitchens lo hizo.
Sin importar el mal paso de su equipo, el coach de los Cleveland Browns demostró que no merece ser entrenador en jefe de un equipo de la NFL luego de tomar dos pobres decisiones por una simple playera.
Días antes del segundo juego de los Browns en la temporada ante los Pittsburgh Steelers, Kitchens usó una playera que con la frase, “Pittsburgh empezó”, en relación a la bronca protagonizada por ambos equipos en la Semana 11 en Cleveland.
La bronca no fue menor. Myles Garrett fue multado y suspendido por el resto de la temporada por golpear en la cabeza a Mason Rudolph con el casco que le había zafado instantes antes al quarterback de los Steelers, quien, a su vez, hizo que el incidente escalara hasta ese punto por ir tras el defensivo de los Browns luego de que ya habían sido separados.
La NFL actuó rápidamente y al día siguiente anunció las primeras sanciones por el incidente.
Todo parecía haber quedado olvidado de no ser porque Kitchens usó la playera días antes del segundo compromiso del año entre Browns y Steelers y así, avivó innecesariamente un fuego que ya se había controlado.
“Usé la playera con una chamarra. Mis hijas querían que la usara y me la volvería a poner”, dijo Kitchens tras la derrota por 20-13 de los Browns en Pittsburgh. “Me tomé una foto y tan sencillo como eso (…). Estábamos listos para jugar. Eso es de lo que necesita preocuparse la gente. Estábamos listos”.
Todo hubiera estado bien si Kitchens no menciona a sus hijas. De no hacerlo, hubiera parecido un adulto que asumía su responsabilidad estuviera bien o no lo que hizo, pero Kitchen eligió escudarse en sus hijas con una excusa irresponsable sobre un problema.
No hubo broncas en esta ocasión, pero Kitchens creó tensión donde ya no había.
Un entrenador en jefe en cualquier nivel, desde infantiles hasta la NFL, es quien pone orden, quien da estabilidad a su grupo de trabajo y jugadores y no una figura que los expone irresponsablemente en el campo, porque, al final de cuentas, Kitchens estuvo en la banca y no saltó al campo luego de provocar a los Steelers con su playera.
Los Chiefs hacen lo correcto
Desde el juego que disputaron en la Ciudad de México, Patrick Mahomes y los Kansas City Chiefs enviaron el mensaje: hay que ser menos agresivos.
Antes de enviar a sus receptores a trayectorias largas de pase para aprovechar su velocidad, aspecto que los rivales parecen haber descifrado, el quarterback de los Chiefs ha aprovechado lo que las defensivas rivales le ofrecen en el campo.
Mahomes ha decidido, junto con el coach Andy Reid, sacrificar su desempeño estadístico por el bien común.
Ante los Chargers en el Estadio Azteca, fue notable que los Chiefs intentaron correr más, luego de lanzar el ovoide en 32 ocasiones por 27 carreras. Mahomes lanzó para 182 yardas, total que en ese momento era el segundo más bajo de su carrera.
todo.
En la victoria por 40-9 sobre los Oakland Raiders, los Chiefs corrieron en 29 ocasiones y lanzaron 29 pases para lograr un equilibrio perfecto en su desempeño y Mahomes completó 15 pases para sólo 175 yardas, cifra que ahora es el total más bajo en su carrera.
Irónicamente, en los dos juegos menos productivos de Mahomes, los Chiefs han salido con el triunfo.
¿Alguien quiere la NFC Este?
Los Philadelphia Eagles enfrentaban a un equipo con sólo dos victorias, tenían la posibilidad de adueñarse del liderato de la NFC Este y, de paso, dejar fuera del panorama de Playoffs a su rival más acérrimo, los Dallas Cowboys.
Al final, los Eagles dejaron ir.
El problema de los Eagles es que no saben cómo reaccionar a la adversidad en momentos clave ni cuando los rivales se les van encima.
En la actual temporada, los Eagles tienen marca de 0-7 en juegos en los que han estado abajo en el marcador en algún momento del cuarto periodo y en tres de ellos han tenido ventajas en el marcador que se les han escapado.
En la Semana 2, los Eagles dejaron ir la ventaja ante Atlanta en el último cuarto; en la Semana 11 vencían por 10 puntos en el segundo cuarto a New England y perdieron sin volver a meter las manos y en la Semana 13, vencían por 14 puntos a Miami en el tercer periodo.
Tal parece que ni los Cowboys ni los Eagles quierne ir a Playoffs, pero alguno tendrá que ir, quiera o no.