DALLAS -- Los playoffs del futbol americano colegial devolvieron la relevancia y casi resucitaron el Cotton Bowl a nivel nacional.
Este jueves por la noche, el tradicional partido de Año Nuevo de Dallas recibirá a las universidades de Alabama y Michigan State, en la segunda semifinal rumbo al campeonato nacional de la NCAA.
Será la segunda edición apenas del recién establecido sistema que resulta un campeón indiscutible, que no tiene que ser decidido por criterios personales o computadoras con base en ecuaciones que muy pocos entendieron alguna vez.
Alabama, segunda preclasificada en el país, enfrenta a Michigan State, tercera, y el ganador se medirá con el equipo que salga triunfante en el Orange Bowl, que disputan las universidades de Clemson y Oklahoma.
“Será un buen partido de futbol”, dijo el corredor de Alabama Derrick Henry, ganador del Trofeo Heisman. “Somos dos equipos parecidos en el estilo de futbol, con mucho juego físico y que hemos tenido temporadas contra rivales muy complicados”.
El Cotton Bowl disputará su edición número 80, la segunda como protagonista en el sistema de playoffs, luego de que en enero pasado fue la sede del partido de campeonato nacional.
Fue el regreso de este Bowl a la escena nacional de primer nivel, después de que por falta de infraestructura en el estadio fue relegado a segundo término cuando se implantó la Serie de Tazón de Campeonato (BCS, por sus siglas en inglés).
“Sé que antes fue uno de los tazones con más tradición e historia”, dijo el mariscal de campo de los Spartans Connor Cook. “Por aquí pasaron grandes jugadores como Joe Montana o Troy Aikman. Es maravilloso poder estar aquí dos veces disputando el Cotton Bowl en el mismo año, aunque ahora con más significado”.
El Cotton Bowl abandonó el estadio que lleva su nombre y desde el 2010 se juega en la casa de los Dallas Cowboys, el AT&T Stadium, uno de los inmuebles deportivos más fastuoso en el mundo, que incluye entre muchas otras cosas techo retráctil que permite controlar el clima en su interior.
Michigan State estuvo el pasado 1 de enero en el mismo juego y estadio, donde derrotó de manera sorpresiva a la Universidad de Baylor, aunque ya sin trascendencia con respecto al campeonato nacional.
Mientras tanto, Alabama enfrentó ese mismo día a Ohio State en el Sugar Bowl, que representó una de las dos semifinales nacionales en la temporada 2014.
El Crimson Tide fue derrotado de manera sorpresiva por Ohio State que unos días después derrotó en el AT&T Stadium a la Universidad de Oregon para colgarse el título colegial.
“Creo que aprendimos una lección muy dura”, dijo el entrenador de Alabama, Nick Saban, con respecto a la derrota que sufrió en la semifinal del año anterior. “Éramos los supuestos favoritos, igual que esta vez. Y al final eso de nada sirvió”.
El área Dallas-Fort Worth está invadida por decenas de miles de seguidores de ambos equipos, muchos de los cuales asistirán al estadio para ver un Cotton Bowl, que esperan sea especial.
“Por fin el partido Cotton Bowl regresa de la oscuridad para ocupar el lugar que nunca debió dejar, recibiendo un juego de trascendencia en todos los aspectos”, dijo Frank Ruiz, un aficionado de origen hispano que intentaba comprar boletos este miércoles por la tarde en las taquillas del estadio.
“¿Qué más se puede pedir que una semifinal entre Alabama y Michigan State? Muy poco más. Tal vez sólo el juego de campeonato nacional que tuvimos aquí hace unos meses…”.
AMBOS LLEGAN CON DERROTA
Las universidades de Michigan State y Alabama pudieron recuperarse de sorpresivas derrotas en temporada regular para llegar a las semifinales.
Alabama perdió ante Ole Mississippi en el tercer partido de la campaña, mientras que Michigan State cayó ante Nebraska, en su noveno juego.
REENCUENTRO DE ENTRENADORES
Nick Saban fue el entrenador en jefe de Michigan State entre 1995 y 1999.
Ahí contrató a Mark Dantonio, actual estratega de los Spartans, para que entrenara en aquel entonces a la defensiva secundaria.
Saban tiene marca perfecta de 8-0 cuando enfrenta a alguno de los que fueron sus asistentes, ya convertidos en entrenadores en jefe.
Desde el 2010, Saban tiene más victorias que ningún otro entrenador en jefe en el futbol americano colegial, 70; Dantonio es tercero, con 65 triunfos.
GRANDES PROSPECTOS A NFL
Entre muchos otros jugadores de ambas escuelas que tendrán oportunidad de probar sus talentos en el futbol americano profesional hay dos que destacan.
El quarterback de Michigan State Connor Cook está considerado uno de los mejores de la nación.
Esta temporada ganó el Premio Johnny Unitas al mejor mariscal de campo de último año en la nación.
El Crimson Tide está encabezado por el corredor Derrick Henry, quien hace apenas unos días ganó el Trofeo Heisman al mejor jugador colegial en el país.
EN BREVE…
El partido será transmitido por ESPN Deportes, a partir de las 8 p.m. ET, este último día del año.