Todos los años, el draft es una oportunidad para que los equipos mejoren significativamente el nivel de talento de sus plantillas a un precio rebajado.
Desafortunadamente, acertar con la toma de decisiones durante el proceso de reclutamiento suena más difícil de lo que es. Incluso en la era moderna, con toda la tecnología y análisis de datos disponibles, además del interminable anecdotario histórico, los equipos fallan, una y otra vez.
Desde luego, hay un cierto grade de injusticia con este ejercicio. Un buen número de prospectos que aparecen en nuestra lista parecían aciertos seguros, si es que cabe la expresión, tratándose del draft. Lesiones, cambios de sistema, disfuncionalidad organizacional y otros factores externos también juegan su papel.
Nadie es infalible en la NFL, y a continuación te presentamos las peores selecciones de primera ronda del draft para cada una de las 32 franquicias de la liga.
Arizona Cardinals
Josh Rosen, quarterback, UCLA (N° 10 en el 2018)
Los Cards llegaron al draft del 2018 con un head coach nuevo en Steve Wilks, un coordinador ofensivo nuevo en Mike McCoy, y una necesidad imperiosa de darle identidad a la ofensiva tras los retiros de Bruce Arians como head coach y Carson Palmer como quarterback. Naturalmente, ir de pesa al draft por un pasador en un año que era considerado especial en la posición, era lógico. Rosen fue el cuarto quarterback elegido entre los primeros 10 turnos, un récord de draft, y no tardó en proclamar públicamente el error de las nueve franquicias que eligieron antes, sin llamar su nombre desde el podio. Ese mismo año, los Cards cometieron el inmenso error, también, de sumar a Sam Bradford a su plantilla a cambio de un exorbitante contrato. Rosen inició en la banca, pero no tardó en saltar al campo como titular, consiguiendo una marca de apenas 3-10 de inicio y dejando a Arizona con la primera selección global del 2019 y el despido de Wilks y su grupo de asistentes. El nuevo head coach Kliff Kingsbury encontró rápidamente al reemplazo de Rosen en la forma de Kyler Murray, seleccionado primero global. Rosen fue traspasado a los Dolphins, donde tampoco recibió una oportunidad justa, y lo más probable es que lo veamos con un tercer uniforme distinto en tres años durante el 2020. Veintidós turnos más abajo, el siguiente quarterback seleccionado --Lamar Jackson de los Ravens-- acaba de ser nombrado jugador Más Valioso de la NFL. Robert Nkemdiche se lleva un cercano segundo lugar para este club.
Atlanta Falcons
Takkarist McKinley, ala defensiva, UCLA (N° 26 en el 2017)
Se suponía que McKinley se iba a convertir en una fuerza al lado opuesto de Vic Beasley Jr. en la defensiva de Atlanta, pero los Falcons siguen buscando la fórmula para presionar a los quarterbacks rivales. McKinley no inició ningún partido como novato, pero consiguió seis capturas. En el 2018 inició ocho cotejos, sumando siete capturas, pero en el 2019, iniciando 13 encuentros, consiguió un total decepcionante de apenas 3.5 capturas. Las lesiones han acompañado a McKinley desde que llegó a la liga, pero se le agota el tiempo para demostrar que no es un fiasco. Cuatro turnos más abajo, los Steelers encontraron a T.J. Watt.
Baltimore Ravens
Matt Elam, safety, Florida (N° 32 en el 2013)
Los Ravens tienen una merecida fama como uno de los equipos con mejores drafts, año con año, pero los errores también están allí. Breshad Perriman pelea este sitio, pero se lo damos a Elam porque sus problemas fuera del campo ayudaron a su caída. Elam inició 15 encuentros como novato, y 11 al año siguiente, pero se perdió la campaña entera del 2015 y la primera mitad del 2016 por lesión. En el 2017, Elam fue arrestado dos veces por cargos diferentes, con Baltimore tomando la decisión de seguir adelante sin él. Probó suerte con los Saskatchewan Roughriders de la CFL y lo vimos por última ocasión con los Houston Roughnecks de la XFL, pero fue cortado antes de que la temporada fuera suspendida tras cinco fechas. Tyrann Mathieu fue elegido en la tercera ronda del mismo draft.
Buffalo Bills
EJ Manuel, quarterback, Florida State, (N° 16 del 2013)
El draft del 2013 es recordado como el más flojo de los últimos años en su parte más alta, y Manuel contribuye. Los Bills optaron por convertir a Manuel en el primer pasador reclutado ese año --y único en la primera vuelta-- a pesar de que en FSU, ejecutaba solamente la mitad del libro de jugadas debido a su inhabilidad para leer el campo completo. Inició 10 partidos como novato, pero cuatro en su segundo año, dos en el tercero y uno en el cuarto durante su estadía en Buffalo, antes de jugar una campaña con los Raiders. Su marca como titular de los Bills fue de apenas 6-11, sin ganar más de cuatro juegos en un año. Con opciones como Geno Smith y Mike Glennon en las siguientes dos rondas, definitivamente no fue un buen año para buscar un quarterback en las filas colegiales.
Carolina Panthers
Vernon Butler, tackle defensivo, Louisiana Tech (N° 30 del 2016)
Butler acaba de firmar como agente libre con los Bills, pero quizás no haya mucho de qué emocionarse por un ex recluta de primera ronda que solamente inició nueve partidos en cuatro años en Carolina, todos en la temporada pasada, y gracias a una lesión a Dontari Poe. Eso sí, al menos viene de su mejor desempeño, con seis de sus ocho capturas como profesional llegando en el 2019. Chris Jones fue elegido por los Chiefs siete turnos más abajo, ya en la segunda ronda.
Chicago Bears
Gabe Carimi, tackle ofensivo, Wisconsin (N° 29 del 2011)
Mitchell Trubisky está peleando fuerte por esta distinción, pero al menos ya logró una aparición de Pro Bowl. Carimi nunca estuvo cerca. Seleccionado con la idea de anclar como tackle el lado izquierdo de la línea, Carimi eventualmente pasó a jugar como tackle derecho y finalmente a la posición de guardia. en el corto tiempo que estuvo con los Bears. Las lesiones le perjudicaron en sus dos años con Chicago, y para su tercera temporada, en el 2014, ya estaba con los Buccaneers antes de firmar en el 2015 con los Falcons. Inició solamente 26 de los 48 partidos que jugó como profesional a lo largo de esos cuatro años. Opciones como Marcus Gilbert para los Steelers y Marcus Cannon para los Patriots salieron más tarde en ese draft.
Cincinnati Bengals
Cedric Ogbuehi, tackle ofensivo, Texas A&M (N° 21 del 2015)
En términos generales, los Bengals son un equipo que no había escondido demasiado sus necesidades de draft, y las atacaba de frente bajo el head coach previo, Marvin Lewis. Tackle ofensivo era una necesidad en el 2015, como reemplazo de Andre Smith por derecha y posible sucesor a Andrew Whitworth por izquierda. Ogbuehi no logró establecerse en ninguno de los dos flancos. Inició 25 partidos entre su segunda y tercera temporada, los únicos que acumula como profesional, pero no ha iniciado ninguno desde entonces. Pasó el año pasado en la banca de los Jaguars. D.J. Humphries y Donovan Smith aparecen entre los tackles ofensivos seleccionados más tarde que han sido más productivos en la NFL.
Cleveland Browns
Justin Gilbert, esquinero, Oklahoma State (N° 8 del 2014)
¿Por dónde empezar? Los Browns son uno de esos equipos especialistas en despilfarrar selecciones de primera ronda, y elegir solamente a un jugador aquí no fue sencillo, con candidatos como Barkevious Mingo, Corey Coleman, Cam Erving, Trent Richardson, Brandon Weeden, Phil Taylor o Johnny Manziel. Y eso que solamente nos remontamos hasta el 2010. Gilbert se lleva la mención especial, por su prácticamente nula productividad. En dos años, inició tres partidos e interceptó un pase --eso sí, devuelto para touchdown--. Para su tercera temporada, ya estaba intentando hacer renacer su carrera con los Steelers, pero ese experimento duró muy poco. Entre las cosas que sí obtuvo en la NFL fue una suspensión de un año por sustancias prohibidas, y nunca regresó de eso. Seis peldaños más abajo, Kyle Fuller se fue a Chicago y ya suma dos invitaciones al Pro Bowl y un nombramiento al primer equipo All-Pro.
Dallas Cowboys
Taco Charlton, ala defensiva, Michigan (N° 28 del 2017)
Dallas es uno de los equipos que mejor trabajo han hecho en primera ronda en la última década, pero aquí nadie está exento del pecado. Los Cowboys saltaron sobre Charlton hace tres años, y solamente recibieron dos años de servicio y cuatro capturas como retorno de la inversión. Fue cortado al no encontrar algún interesado en canje, y posteriormente firmó con Miami, el año pasado, registrando una marca personal con cinco capturas. Sí, dos turnos más abajo, Watt se fue a Pittsburgh.
Denver Broncos
Paxton Lynch, quarterback, Memphis (N° 26 del 2016)
Las selecciones de primera ronda de la última década, en conjunto, no lucen muy grandiosas para los Broncos. De Noah Fant, Garett Bolles, Shane Ray y Sylvester Williams, esperábamos más. Pero ningún fiasco en la era John Elway/ejecutivo ha sido mayor a Lynch, quien duró apenas dos temporadas con el equipo, iniciando cuatro cotejos, y compilando marca de 1-3. En tres recesos de temporada, Lynch fue incapaz de superar en competencias por el puesto titular a Trevor Siemian, Brock Osweiler, Case Keenum y Chad Kelly. En la cuarta ronda de ese año, los Cowboys --quienes tenían la mira sobre Lycnh antes de que lo ganara Denver-- encontraron a Dak Prescott, quien está a punto de convertirse en uno de los quarterbacks mejor pagados en la historia del deporte.
Detroit Lions
Eric Ebron, ala cerrada, North Carolina (N° 10 del 2014)
Sí, es cierto que Ebron se ganó una invitación al Pro Bowl en el 2018, pero eso fue ya con el uniforme de los Colts. En los cuatro años previos, con Detroit, Ebron nunca superó las 61 recepciones, 711 yardas por recepción, o cuatro touchdowns en una temporada. Esa es una producción muy baja para un Top-10 del draft. En retrospectiva, los Lions no lo han hecho tan mal en primeras rondas recientes, y siendo justos, no hubo grandes opciones en la posición ese año. Austin Seferian-Jenkins, Jace Amaro y Troy Niklas son algunos de los alas cerradas que salieron después de Ebron. De todos los jugadores listados aquí, los Lions cometieron el error menos grave de los 32 equipos.
Green Bay Packers
Rashan Gary, linebacker, Michigan (N° 12 del 2019)
Seguro, todavía está muy a tiempo de rescatar su carrera, y llamar fiasco a Gary es prematuro. Pero la realidad es que su presencia fue prácticamente nula como novato para Green Bay el año pasado. En 16 apariciones, ninguna como titular, Gary sumó apenas dos capturas, y hubo periodos largos de los partidos en que ni siquiera saltaba al campo, aunque también, hay que mencionar que llegó con lesión en el hombro a la NFL. Lo cierto es que Brian Burns, cuatro turnos más abajo para los Panthers, tuvo un mejor impacto de novato.
Houston Texans
Kevin Johnson, esquinero, Wake Forest (N° 16 del 2015)
Se suponía que Johnson completaría una tripleta de primera línea con Johnathan Joseph y Kareem Jackson, el novato asumiendo las responsabilidades en la ranura, pero el plan nunca se concretó. Johnson ha lidiado con lesiones a lo largo de casi toda su carrera, y después de iniciar 10 partidos como novato, nunca ha iniciado más de cuatro en una campaña. Su única intercepción como profesional también llegó en su temporada debut. Jugó el año pasado en Buffalo donde, al menos, por segunda ocasión en su carrera vio actividad en los 16 partidos de temporada regular. Dos turnos más abajo, Marcus Peters --dos veces elegido All-Pro de primer equipo y con tres apariciones de Pro Bowl-- se fue a Kansas City.
Indianapolis Colts
Bjoern Werner, ala defensiva, Florida State (N° 24 del 2013)
Werner es el segundo jugador de los Seminoles que fue elegido en la primera ronda del 2013 que aparece en nuestra lista, después de Manuel. Un ala cerrada sumamente completo y confiable como universitario, en las filas profesionales nunca mostró un aspecto sobresaliente en su juego. El alemán arrastraba problemas de rodilla que con el tiempo le robaron explosividad, y en algún momento se sometió a ocho operaciones de rodillas en un lapso de ocho años. Inició un partido como novato, 15 en su segundo año, y hasta ahí, sumando 6.5 capturas en tres años de servicio, pero ninguna en su temporada final. No hay una sola estrella en la posición, elegido después de Werner, pero al menos Alex Okafor, elegido en la cuarta ronda de ese año, se mantiene activo y productivo en la liga.
Jacksonville Jaguars
Justin Blackmon, receptor abierto, Oklahoma State (N° 5 del 2012)
Jacksonville es otro de los cuadros con múltiples yerros de primera ronda, incluyendo a Blaine Gabbert y Taven Bryan, más recientemente. Pero ninguno dejó peor parado a los Jags que Blackmon, Entre arrestos y suspensiones de la liga por varias infracciones, Blackmon solamente jugó 20 partidos, 18 de inicio, en tres temporadas como parte de la plantilla de los Jags. Blackmon no es el único receptor abierto de primera ronda del 2012 que aparece en nuestro listado, pero en la tercera ronda, Indianapolis encontró una gema en T.Y. Hilton.
Kansas City Chiefs
Jonathan Baldwin, receptor abierto, Pittsburgh (N° 26 del 2011)
Baldwin parecía ese enorme y corpulento receptor abierto con velocidad en línea recta que iba a ayudar a los Chiefs a estirar el campo verticalmente, y atrapar los pases disputados por lo alto pese a las coberturas pegajosas. Después de todo, al otro lado tenía a Dwayne Bowe, quien venía de una temporada de Pro Bowl en el 2010. Todo se quedó en proyecto. Baldwin se fracturó una muñeca en una riña de vestidor con el corredor Thomas Jones, y le costó prácticamente toda su temporada de novato. En su segundo año, inició solamente siete de 15 encuentros jugados, y con dos touchdowns en dos temporadas en Arrowhead, fue enviado en canje a los Niners para su tercer año, a cambio de otra de las decepciones que aparecen más abajo en este listado. Con San Francisco, inició solamente un partido de nueve jugados, y ahí se acaba su historia de NFL. Torrey Smith y Randall Cobb fueron elegidos en la segunda ronda de ese draft.
Las Vegas Raiders
D.J. Hayden, esquinero, Houston (N° 12 del 2013)
Todo el mundo sabía que la selección de Hayden era riesgosa en el draft. El back defensivo de Houston había sufrido una ruptura de una vena en el corazón durante una colisión en un entrenamiento de su última temporada colegial, poniendo en peligro su vida. Durante el Combinado, donde no pudo realizar ninguna actividad física porque seguía en recuperación, narró la experiencia, señalando que casi no podía ver nada por el ojo izquierdo al momento del golpe. Los Raiders apostaron a él y desde las actividades organizadas del equipo debió ser hospitalizado de nuevo por complicaciones relacionadas al golpe en el pecho. Ese año, solamente jugó ocho partidos, iniciando dos. Su mejor temporada para los Raiders fue la tercera, cuando inició 13 de los 16 partidos en los que jugó, pero al final, su nivel no igualó lo mostrado a nivel universitario. En cuatro temporadas con Oakland, interceptó apenas tres pases, y en el 2017 ya estaba con los Lions. Jugó el último par de temporadas para los Jags, y de por vida acumula únicamente cuatro intercepciones como profesional. Desmond Trufant con una invitación al Pro Bowl, y Xavier Rhodes, con tres invitaciones al Pro Bowl y una selección como All-Pro de primer equipo, encontraron acomodo en esa primera ronda, después de Hayden.
Los Angeles Chargers
D.J. Fluker, tackle ofensivo, Alabama (N° 11 del 2013)
La selección de Fluker tan alto en el orden de la primera ronda fue extraña, considerando que se trataba de un tackle derecho, que suele ser menos valioso que uno izquierdo. Curiosamente, su compañero de línea ofensiva, el guardia Chance Warmack, había sido elegido un puesto antes, y otro miembro del Tide, un esquinero que también aparece en esta lista, los antecedió a ambos en el noveno escalón. La selección de Fluker no fue absolutamente terrible, porque como sea, fue titular indiscutible en los cuatro años en que estuvo en San Diego. Pero, no ganó segundo contrato, y para su segunda temporada, ya había sido mudado al puesto de guardia. Pasó el 2017 con los Giants y los últimos dos años con los Seahawks. Terron Armstead de tercera ronda, y David Bakhtiari de cuarta, suman, cada uno, dos selecciones al Pro Bowl, de la misma camada.
Los Angeles Rams
Greg Robinson, tackle ofensivo, Auburn (N° 2 del 2014)
La segunda selección global del 2014 había sido entregada a los Rams como parte de un cuantioso pago en el traspaso que permitió a los Redskins elegir a Robert Griffin III en el 2012. Robinson fue insertado de inmediato en la alineación titular, pero desde el inicio delató problemas para contener a los cazadores de quarterbacks de élite de la NFL. Duró solamente tres años con los Rams, después de que lo probaran en las dos posiciones de tackle y las dos posiciones de guardia. Tras su corte, firmó por una temporada con los Lions, y jugó el último par de años en Cleveland. En febrero de este año, fue arrestado en la frontera entre Estados Unidos y México transportando drogas. Los dos siguientes tackles ofensivos elegidos ese año fueron Jake Matthews, con una selección de Pro Bowl, y Taylor Lewan con tres.
Miami Dolphins
Dion Jordan, ala defensiva, Oregon (N° 3 global del 2013)
El espigado Jordan parecía un sueño para un coordinador defensivo en busca de un jugador de impacto capaz de crear caos desde el exterior como lo hiciera por tantos años Jason Taylor en Miami. Pero Jordan distó mucho de ser un segundo Taylor. El egresado de Oregon jugó todos los partidos de su temporada de novato, pero no inició ninguno, y para su segundo año, ya se había metido en problemas de suspensiones por sustancias prohibidas. En total, fueron tres suspensiones diferentes por el mismo motivo para Jordan, limitándolo a tres capturas en 26 partidos, solamente uno iniciado, con los Dolphins. Regresó a la NFL en el 2017 con los Seahawks y pasó el año pasado con los Raiders, pero en cinco temporadas como profesional, suma 10.5 capturas. Dos turnos más abajo, Ezekiel Ansah fue seleccionado pro Detroit, donde se ganó una invitación al Pro Bowl.
Minnesota Vikings
Laquon Treadwell, receptor abierto, Mississippi (N° 23 del 2016)
Definitivamente, el 2016 no fue un buen año para los receptores abiertos de primera ronda. Dos de los tres elegidos, incluyendo a Treadwell, apareen en nuestra lista, y el otro, Coleman, bien podría estar, también. Treadwell fue el tercero de ellos que escuchó su nombre desde el podio, luego de una carrera estelar en Ole Miss. El juego profesional no ha tratado bien a Treadwell desde entonces. En cuatro campañas con los Vikings, quienes en algún momento lo cortaron y volvieron a recontratar, nunca ha sumado más de 35 recepciones o 302 yardas, y suma apenas dos touchdowns de NFL. Oportunidades, ha tenido, participando en 53 juegos en total, 13 de ellos de inicio. El 2020 lo disputará defendiendo los colores de los Falcons. A la mitad de la segunda ronda de ese año, New Orleans encontró a Michael Thomas.
New England Patriots
Dominique Easley, tackle defensivo, Florida (N° 29 del 2014)
No es sencillo encontrar fiascos tan pronunciados en New England como la selección de Easley. El tackle defensivo llegó a la NFL muy tocado de la rodilla, habiendo sufrido roturas de ligamento anterior cruzado en dos ocasiones mientras jugaba con los Gators. Los Patriots esperaban que Easley eventualmente sucediera en el interior de la línea defensiva a Vince Wilfork, haciendo dupla con Malcom Brown, seleccionado en la primera ronda un año después de Easley, pero el plan no funcionó. Easley terminó en la lista de reservas lesionados de su segunda temporada, otra vez con una lesión de ligamentos, y fue cortado antes de comenzar su tercer ciclo con los Pats. Easley firmó con los Rams, en el 2016, pero en el 2017 sufrió una cuarta rotura de ligamento anterior cruzado. En el 2018 se mantuvo con los Rams, pero solamente jugó tres partidos. A la mitad de la segunda vuelta, los Ravens reclutaron a Timmy Jernigan.
New Orleans Saints
Stephone Anthony, linebacker, Clemson (N° 31 del 2015)
Los Saints eligieron dos veces en la primera ronda del 2015. Aunque el liniero ofensivo Andrus Peat no ha sido precisamente legendario, al menos sigue jugando, como guardia, tras no dar el ancho como tackle. Pero con Anthony, sí abanicaron por completo. El linebacker inició todos los partidos de su temporada de novato, pero su nivel cayó dramáticamente para el segundo año, y solamente inició tres duelos. Antes del inicio de su tercera temporada, fue canjeado a los Dolphins por una selección de quinta ronda, quedándose en Miami por dos años. El año pasado, firmó brevemente con Falcons y Jets, pero volvió a aterrizar con los Saints, esta vez en un papel de franco suplente, iniciando apenas un partido de 12 jugados, obligado por lesión. Benardrick McKinney de los Texans y Eric Kendricks de los Vikins, ambos elegidos a la mitad de la segunda ronda, han sido mucho más productivos como linebackers internos.
New York Giants
Ereck Flowers, tackle ofensivo, Miami (N° 9 del 2015)
Los Giants pensaron que habían encontrado a su tackle izquierdo del futuro en Flowers cuando lo tomaron en el noveno peldaño del 2015, pero en tres años y fracción, el ex Hurricane jamás consiguió solidificar la posición, obligando a la escuadra neoyorquina a desembolsar billetes grandes por Nate Solder cuando llegó a la agencia libre en el 2018. Los Giants probaron suerte con él por izquierda, por derecha, y finalmente lo cortaron a media temporada del 2018, firmando con los Jaguars de inmediato. Allí volvió a jugar como tackle izquierdo, pero pasó la temporada del 2019 como guardia con los Redskins, iniciando toda la campaña por el lado izquierdo. Peat y Ogbuehi fueron los siguientes dos tackles elegidos ese año, así que no fue necesariamente una gran camada en la parte más alta de las selecciones.
New York Jets
Dee Milliner, esquinero, Alabama (N° 9 del 2013)
El 2013 sería la primera temporada para los Jets sin Darrelle Revis, quien emigraría esa campaña a los Buccaneers, por lo que el equipo dirigido por Rex Ryan necesitaba a un sucesor en la esquina. Milliner se hizo de una reputación como un duro golpeador en la posición de esquinero, capaz de jugar agresivamente sobre la línea de golpeo, una cualidad que le llamó la atención a Ryan. Los Jets convirtieron a Milliner en el back defensivo del Tide reclutado más alto en el draft desde Antonio Langham para los Browns, en 1994. La movida no funcionó. Milliner llegó a la NFL arrastrando una lesión de hombro, y rápidamente fue evidente que no tenía la velocidad o los instintos para competir al nivel más alto, siendo enviado a la banca en numerosas ocasiones como novato. En su segundo año, se rompió el tendón de Aquiles, y en su tercera temporada, una lesión de muñeca le impido dar argumentos para quedarse. Su carrera acabó habiendo iniciado 14 de 21 partidos jugados en tres años para los Jets, con tres intercepciones, todas como novato. Hayden, Trufant y Rhodes fueron los siguientes tres esquineros elegidos en ese año.
Philadelphia Eagles
Marcus Smith II, linebacker, Louisville (N° 26 del 2014)
Podríamos estar ante la peor selección de todo el listado, aquí en Philadelphia. En el 2014, el entonces head coach Chip Kelly sorprendió a todos --literalmente, a todos-- eligiendo en la primera ronda a un jugador que era considerado ampliamente como recluta de segunda a cuarta ronda, dependiendo a quién se le preguntase. Los Eagles apostaron a que sería el híbrido perfecto entre linebacker externo y ala defensiva que les ayudaría en su transición hacia una defensiva 23-4, pero los resultados fueron menos de lo esperado. En tres temporadas en Philadelphia, Smith inició cero partidos y sumó cuatro capturas. Probó suerte una temporada en Seattle y otra en Washington, pero en ninguna de esas franquicias tuvo impacto significativo. Aunque se trata de un ala defensiva puro, DeMarcus Lawrence se fue ocho peldaños más abajo a los Cowboys, mientras que el linebacker externo Kyle Van Noy, 14 lugares después de Smith.
Pittsburgh Steelers
Artie Burns, esquinero, Miami (N° 25 del 2016)
Por un momento, parecía que Burns podría ser la solución a un problema en Pittsburgh que llevaba tiempo sin resolverse: la calidad en las esquinas. Burns jugó los 16 partidos de su temporada de novato, iniciando nueve, y para el segundo año, ya era el titular de tiempo completo, con 16 inicios. Entre esas dos temporadas, interceptó cuatro pases. El declive fue repentino, con Burns perdiendo el puesto titular permanente, e iniciando apenas seis cotejos. El 2019 fue peor, con apenas un inicio en 10 apariciones. Burns no lleva intercepción en los últimos dos años, y su total de jugadas participadas del año pasado fue de apenas 6 por ciento a la defensiva. Trece turnos después de Burns, Miami seleccionó a Xavien Howard.
San Francisco 49ers
A.J. Jenkins, receptor abierto, Illinois (N° 30 del 2012)
Los Niners no tardaron demasiado en percatarse de que Jenkins había sido un error. Desde su temporada de novato, Jenkins solamente vio acción en tres partidos, ninguno de inicio, pese a no cargar con lesiones. Duró apenas un año el experimento, y en la siguiente temporada, fue canjeado a Kansas City por Baldwin, otro proyecto fallido. Jenkins duró apenas dos temporadas con los Chiefs, jugando en 28 partidos, pero iniciando apenas tres. Sus estadísticas finales de NFL se limitan a 17 recepciones para 223 yardas sin touchdowns en tres campañas. Sus 4.39 segundos en las 40 yardas del Combinado terminaron siendo, probablemente su mejor actuación en un evento relacionado a la liga. Alshon Jeffery y Mohamed Sanu se fueron en segunda y tercera ronda, respectivamente, ese mismo año.
Seattle Seahawks
Rashaad Penny, corredor, San Diego State (N° 27 del 2018)
La realidad de las cosas, es que Seattle no parecía tener una necesidad urgente en la posición de corredor en el 2018, con Chris Carson asumiendo un rol protagónico. Es más, se puede decir que con dos temporadas consecutivas superando las 1,000 yardas como titular de los Seahawks, Carson se ha asegurado de que su equipo no necesita invertir alto en la posición, sino simplemente rodearlo de buenos complementos. Con todo y eso, los Seahawks seleccionaron a Penny, en la primera ronda de un draft que parecía tener mejores nombres disponibles para ese rango de la parte final de la primera ronda y la segunda. Penny ha aparecido en 24 partidos como profesional, pero no ha iniciado ninguno. El destino le jugó una mala pasada cuando, en su mejor momento con Seattle, se rompió el ligamento anterior cruzado de la rodilla izquierda el año pasado. Otras opciones en la posición, que fueron seleccionados después, incluían a Nick Chubb, Sony Michel, Derrius Guice y Kerryon Johnson, y un número de analistas los tenían a todos ellos con mejores calificaciones que a Penny.
Tampa Bay Buccaneers
Vernon Hargreaves III, esquinero, Florida (N° 11 del 2016)
Como en algunos otros casos, Hargreaves lució mucho mejor como novato que en temporadas posteriores. En su temporada debut en Tampa Bay, el esquinero inició los 16 partidos de la campaña y registró su primera intercepción como profesional. Una lesión de tendón de la corva a la mitad de su segundo año marcó el inicio del fin para el back defensivo con los Bucs. Ese año, solamente jugaría nueve partidos, siete de inicio. En su tercera temporada, otra vez una lesión le robó la oportunidad de trascender, aterrizando en la lista de lesionados con un problema de hombro luego de apenas un juego. El año pasado, y después de iniciar los nueve partidos en que jugó, fue cortado sorpresivamente en el mes de noviembre. Fue reclamado vía waivers por los Texans, pero cortado al final de la temporada, aunque recientemente firmó un contrato nuevo en Houston. En cuatro años como profesional, totaliza apenas dos intercepciones. Howard, en la segunda vuelta, ha sido una opción más productiva.
Tennessee Titans
Jake Locker, quarterback, Washington (N° 8 del 2011)
Los Titans buscaban dejar atrás la era de Vince Young cuando hicieron de Locker el segundo quarterback seleccionado en el 2011, después de Cam Newton, quien se fue primero global a Carolina. El pasador de Washington se había convertido en un nombre a seguir con una gran campaña universitaria en el 2009, pero en lugar de dar el salto anticipadamente, se quedó un año más con lo Huskies, en su temporada final como colegial estuvo lejos de cumplir las expectativas creadas un año antes. Locker pasó su primer año observando desde la banca a Matt Hasselbeck, asumiendo el control como titular en el 2012, cuando inició los 11 partidos en que participó. Su marca ese año fue de 4-7, y tiró 10 touchdowns contra 11 intercepciones, y se perdió cinco juegos a media temporada por una lesión de hombro. El año siguiente, se acumularon las lesiones, Un problema de cadera y otro en el pie lo limitaron a siete salidas, consiguiendo marca de 4-3, su única temporada con récord ganador. Su última temporada no sería diferente, con lesiones de muñeca, pulgar y hombro, además de que fue enviado a la banca por pobre desempeño. Inició cinco de los siete partidos en que jugó, compilando marca de 1-4, y se retiró a los 26 años de edad. Andy Dalton y Colin Kaepernick fueron seleccionados en la parte alta de la segunda vuelta ese mismo año.
Washington Redskins
Josh Doctson, receptor abierto, Texas Christian (N° 22 del 2016)
Doctson es el segundo de los tres receptores abiertos seleccionados en la primera vuelta del 2016 que aparece en nuestra lista, junto a Treadwell, y varios sitios por delante de Thomas, quien se fue hasta la segunda ronda a New Orleans. Saliendo de TCU, Doctson fue comparado con A.J. Green por Jay Gruden después del draft. Ya sabemos cómo va esa historia. Doctson, vio cortada prematuramente su primera campaña por una rotura del tendón de Aquiles, pero se hizo de un rol prominente en la ofensiva de los Redskins para el 2017 y 2018. Los resultados no fueron muy halagadores. Las marcas personales para una temporada del receptor son 44 recepciones para 532 yardas, en el '18, y seis touchdowns, en el '17. Washington lo cortó antes del inicio de la cuarta temporada con el club. Firmó con los Vikes, pero participó solamente en un partido antes de aterrizar en la lista de reservas lesionados. Irónicamente, Minnesota, que había cortado a Treadwell, lo volvió a firmar para suplir la baja de Doctson. Doctson jugará la siguiente campaña con los Jets.