Después de una temporada a la baja en el 2019, Khalil Mack promete mejoría para la nueva campaña de los Bears
El linebacker externo de los Chicago Bears, Khalil Mack, encapsuló la temporada pasada en cuatro simples palabras: "No fui suficientemente bueno".
Las 45 tacleadas, 8.5 capturas y cinco balones sueltos forzados por Mack constituirían un año decente para un defensivo promedio. Pero Mack no es un defensivo promedio, tanto en términos de productividad en el pasado como en salario.
Un ex Jugador Defensivo del Año de la NFL, Mack tuvo rachas de tal dominio en el 2018 (su primera temporada en Chicago tras arribar vía canje procedente de los Oakland Raiders) que las expectativas alcanzaron alturas insospechadas previo a la campaña del 2019.
Encima de todo, hay que considerar el dinero. Los Bears otorgaron al cinco veces elegido al Pro Bowl a una masiva extensión de cinco temporadas que incluyó 90 millones de dólares en garantías. Mack cobró 41 millones de dólares en el 2018, y 15.5 millones de dólares el año pasado.
Los resultados: Mack, de 29 años de edad, fue bueno, pero no grandioso. Conforme se hundió la campaña de Chicago en octubre, Mack registró apenas una captura durante la racha de cuatro derrotas al hilo que quebró la temporada del equipo, ante los Raiders, New Orleans Saints, Los Angeles Chargers y Philadelphia Eagles. Los Bears jamás se recuperaron. Chicago finalizó con registro de 8-8 y se perdió los playoffs por octava ocasión en nueve años.
"No fui bueno, para nada", declaró Mack. "Entendiendo que, hay diferentes intangibles que llegan con eso. No hago ninguna excusa. Simplemente, hay que elevarse a la ocasión, y me alisto para lo que viene. Será divertido, hombre. No puedo esperar.
"... Hubo muchos factores, hombre. Jugando este deporte, lidias con todo tipo de cosas, y no soy uno que acostumbra las excusas. Pero voy a cerciorarme de estar allá con mis hermanos, dando mi todo cada semana, y es lo que ustedes ya vieron. Así que, no entraré en detalles, pero, hombre, estamos listos este año. Estamos listos. Estamos listos para todo".
Chicago estaba desesperado por sumar a otro cazador de quarterbacks legítimo al lado opuesto de Mack después de que la defensiva empatara en el sitio N° 24 en capturas y N° 22 en la tasa de victorias de presión en situación de pase, de acuerdo a ESPN Stats & Information. Los Bears contrataron al veterano Robert Quinn en la agencia libre por 30 millones de dólares garantizados, y liberaron al ex linebacker externo titular, Leonard Floyd.
Quinn marcó la tasa más alta de victorias de presión en situación de pase (32.2 por ciento) en la liga el año pasado, como miembro de los Dallas Cowboys. También empató por el noveno puesto en capturas (11.5) y cuarto en tacleadas para pérdida de 5 yardas o más (14).
Por su lado, Floyd --noveno recluta global del draft del 2016 de la NFL--, tuvo tres capturas, cero balones sueltos forzados, y una tasa de victorias de presión en situación de pase de apenas 12.4 por ciento, bueno para colocarse N° 57 en la liga.
Quinn ha iniciado lentamente en Chicago. Los Bears mantuvieron al veterano de 30 años de edad fuera de los ejercicios de equipo en la primera semana de entrenamientos equipados porque --según el equipo-- lidió con un tema persona y necesitaba tiempo adicional de acoplamiento.
Aun así, los Bears son optimistas de que la presencia en días de juego de Quinn aliviará alguna de la presión que existe sobre Mack, dijo el head coach de los Bears, Matt Nagy.
"Todos siempre van con los números, con todos los jugadores, en realidad", explicó Nagy. "Cuando tienes muchas capturas en tu carrera como [Mack], eso es lo que la gente emplea para evaluarte. Pero les puedo decir de primera mano, enfrentando a Khalil y a otros grandes cazadores de quarterbacks, buscamos capturas, pero también estamos observando cuánto afectas al quarterback. Cada equipo que enfrentamos tendrá un plan de juego para él.
"Lo único que importa es, ¿está Khalil listo para rocanrolear? Y ciertamente lo está. Simplemente de pláticas y discusiones, ha tenido un receso de temporada increíble. Está muy, muy enfocado. No es un tipo que diga mucho, lo que te gusta, lo aprecias. Lo hace hablando en domingos, en días de juego".
El safety de Pro Bowl, Eddie Jackson, hizo eco a los sentimientos del head coach.
"Mack será Mack", dijo Jackson. "Es simplemente él. Nada ha cambiado, honestamente. Seguirá saliendo allá y siendo ese tipo de competidor que ves día a día... simplemente ser un hermano mayor para nosotros, a los más jóvenes, dándonos el hombro para recargarnos si lo requerimos, una mano si la necesitamos... siempre será ese tipo firme. No descansa. Todo simplemente al máximo".