El corredor Jeff Wilson Jr. se destapó en la Semana 7 para ganar honores como el mejor de la jornada dominical
Quizás fue la tarde de los quarterbacks estelares, con un número importante de desempeños brillantes por quarterbacks jóvenes y veteranos, pero nadie lo hizo mejor que un corredor suplente en la Semana 7.
Eso sí, fue una tarde agridulce para nuestro celebrado Coloso de la Semana, porque una lesión le impidió terminar su obra maestra. Pero, con todo y el juego incompleto, nadie jugó mejor que:
Jeff Wilson Jr., corredor, San Francisco 49ers
Los 49ers son uno de los equipos más afectados por lesiones, y el backfield ha sido particularmente golpeado. Con Raheem Mostert en la lista de reservas lesionados, y Jerick McKinnon golpeado, Wilson asumió las responsabilidades principales llevando el balón por tierra para San Francisco en un predio donde, usualmente, los rivales no avanzan mucho las cadenas de este modo.
Con Wilson, fue todo lo contrario. El corredor de tercer año llevó 17 veces el balón para 112 yardas con tres touchdowns, acabando materialmente con cualquier sueño de victoria de los New England Patriots en casa, y reforzando la confianza de los Niners de que pueden ganar partidos difíciles de gira con la profundidad de talento con que disponen en plantilla. San Francisco dominó con facilidad, ganando 33-6.
Tristemente, no fue un partido perfecto para Wilson, aunque no tiene que ver con su desempeño, El producto de North Texas sufrió una lesión en el tercer periodo cuando un jugador le rodó encima por detrás, y al término del encuentro, el head coach Kyle Shanahan dijo que temía un esguince en la parte alta del tobillo, problema que sin duda le obligaría a ausentarse algún tiempo.
La de Wilson no fue la única baja del partido para San Francisco. Antes, el receptor abierto Deebo Samuel, había abandonado por un problema en el tendón de la corva, y se espera que, él también, se pierda algo de tiempo.
La grata sorpresa que supuso el partido de destape de Wilson duró poco, con los Niners ahora enfocados en quién puede correr el balón ahora para el equipo. Sin embargo, y a largo plazo, San Francisco sabe que tiene un potencial cuadrangular cada vez que Wilson reciba una oportunidad, cuando se reponga de esta lesión.
Menciones honoríficas
Davante Adams, receptor abierto, Green Bay Packers. Vaya si se extrañaba a este Adams en Green Bay, particularmente después de la lesión de Allen Lazard. Adams se encargó de aniquilar a la defensiva secundaria de los Houston Texans con 13 recepciones para 196 yardas en recepciones. Anotó dos veces en la aplastante victoria de los Packers, por 35-20.
Tom Brady, quarterback, Tampa Bay Buccaneers. Lo que muchos esperaban en Tampa Bay, finalmente empieza a mostrarse, con Brady dirigiendo más envíos para Rob Gronkowski que a inicios de temporada. En contra de los Las Vegas Raiders, el quarterback completó 33 de 45 envíos para 369 yardas con cuatro touchdowns sin intercepciones, con Gronk atrapando touuchdown por segunda semana consecutiva, en una victoria por 45-20. El brillo de Brady resultó extremadamente contrastante con lo que ofreció su equipo, los Patriots, esta semena, aunque sí hubo un elemento familiar para Brady: el oponente. Los fans de los Raiders --y el head coach Jon Gruden-- recuerdan a la perfección una derrota en particular ante Brady.
Antonio Gibson, corredor, Washington Football Team. Los Dallas Cowboys han aprendido la facilidad de hacer ver a cualquiera ofensiva rival como un equipo All-Pro, pero está en los oponentes aprovechar todas las facilidades que ofrecen, y Gibson lo hizo. Llevó el ovoide 20 veces para 128 yardas con un touchdown, destazando en el proceso al grupo de linebackers y safeties de Dallas, para llevar a Washington a su segundo triunfo del año. Cuidado, que Gibson y los suyos todavía pueden salir campeones divisionales.
Justin Herbert, quarterback, Los Angeles Chargers. Por fin, Herbert logró deshacerse de la dona en la columna de victorias después de conducir a los Chargers a un triunfo de 39-29 sobre lso Jacksonville Jaguars. Herbert había jugado notablemente desde que asumió los controles ofensivos en lugar de Tyrod Taylor, pero no había llegado ese elusivo primer juego ganado. Con 27 de 43 pases completos para 347 yardas y tres touchdowns sin intercepciones, además de 66 yardas terrestres con otro touchdown, Herbert finalmente conocerá la satisfacción del "Victory Monday".
Tyler Lockett, receptor abierto, Seattle Seahawks. Hay momentos en que Lockett parece el mejor acróbata de la NFL, y esta semana lo confirmó en un partido que perdieron los Seahawks de visita ante los Arizona Cardinals por 37-34 en el desierto, Lockett atrapó 15 recepciones para 200 yardas --liderando a la liga en el día-- y tres anotaciones, incluyendo atrapadas con la cobertura estrecha del esquinero estelar Patrick Peterson.
Baker Mayfield, quarterback, Cleveland Browns. Atroz, fue el inicio de partido de Bayfield, siendo interceptado en su primer pase de la tarde, y con los siguientes cuatro envíos cayendo incompletos. Después de eso, Mayfield solo tuvo un pase incompleto más en todo el encuentro, uno en el que tiró cinco pases de touchdown, para superar a los Cincinnati Bengals en un tiroteo interesante contra el pasador novato Joe Burrow. En total, fueron 22 de 28 completos para 297 yardas de Mayfield. Y, por cierto, ¿ese otro pase incompleto? Fue cuando picó el ovoide para detener el reloj.
Aaron Rodgers, quarterback, Packers. Después de una salida para el olvido la semana pasada ante los Bucs, Rodgers volvió a montarse sobre su cabello pura sangre, con una actuación de 23 de 34 completos con cuatro touchdowns --dos de ellos para Adams--, sin intercepciones en la vapuleada sobre Houston. Incluso sin contar con Aaron Jones, Rodgers logró involucrar a Malik Taylor y Jace Sternberger en el ataque, demostrando que Green Bay es algo más que sólo Rodgers y compañía.