El entrenador en jefe de los Rams aseguró que no estaría en esta posición de no ser por lo que logró John McVay en el pasado
El entrenador en jefe de Los Angeles Rams, Sean McVay, atendió a la prensa este lunes en la tradicional conferencia de prensa posterior al Super Bowl.
McVay, quien respondió preguntas por cerca de 10 minutos, reconoció el impacto que tuvo el legado de su abuelo John McVay en su carrera en la NFL.
"Significa mucho para mí, no estaría en esta posición si no fuera por el legado que dejó a nuestra familia", declaró McVay. "Mereció todo lo que ganó, estoy agradecido con él, fue muy especial. Fue importante para que pudiera incluso tener una posición, una oportunidad para dirigir en la NFL. Es muy especial".
John McVay, abuelo de Sean, fue ejecutivo de los San Francisco 49ers de 1980 a 1999, ganando cinco campeonatos de Super Bowl con la franquicia.
McVay también fue cuestionado sobre la lesión del receptor abierto Odell Beckham Jr., quien salió durante la primera mitad de la victoria 23-20 sobre los Cincinnati Bengals.
"No sé mucho en este momento, pero sé el gran impacto que tuvo en nuestro equipo desde que lo tenemos", refirió McVay. "Fue desgarrador ver eso [la lesión] por todo lo que pasó para llegar a ese momento y realmente tuvo un impacto con esas dos recepciones que fueron grandes jugadas. Creo que estaba listo para un gran partido".
Sin embargo, McVay reconoció a la plantilla por compensar la pérdida de Beckham tan pronto en el partido, pero reconoció que sin el receptor no habría sido posible el campeonato.
"Los chicos inevitablemente dieron un paso al frente, como hicieron Cooper [Kupp] y Matthew [Stafford] cuando más lo necesitábamos", expresó. "Lo hizo un poco más difícil, mi corazón está con él, amo a Odell, estoy muy agradecido por sus contribuciones. No seríamos campeones sin él".
McVay finalizó su conferencia con sentido del humor, luego que el comisionado Roger Goodell lo presentó indicando que solo iba a responder algunas preguntas.
"Tres preguntas, mi trasero", indicó McVay, despidiéndose con una sonrisa y bajó del estrado.