Se viene un Superclásico a todo o nada. ¿Es realmente a todo o nada? ¿Quién se juega más en esta edición del duelo más histórico y atrapante del fútbol argentino? Boca Juniors y River Plate se enfrentan en los cuartos de final de la Copa de la Liga 2024 y el duelo significa, para ambos, muchísimo más que la lucha por conseguir el pasaporte a semifinales. El partido del domingo 21 de abril, desde las 15:30, se disputa en el Mario Alberto Kempes de Córdoba, con transmisión de ESPN Premium, y se vive a pleno en todo el país.
River, por su lado, tiene en la CONMEBOL Libertadores su principal objetivo y está en plena competencia, ya que con el alivio de haber ganado los dos primeros partidos de su grupo copero. En tanto, Martín Demichelis es mirado de reojo por muchos hinchas del Millonario, por más de un planteo y varios cambios en los últimos tiempos.
Por su cuenta, Boca quiere clasificarse a la Libertadores 2025 y para consumar esa meta es importante poder ganar la Copa de la Liga, que le otorgaría el boleto esperado. Por eso, se juega una parada muy grande, justo en el año que no pudo entrar en la Copa más valiosa, tras llegar a la final en 2023, y está disputando la Sudamericana. Como si fuera poco, tiene la necesidad de volver a ganar el clásico después de más de un año y medio.
Qué se juegan River y Boca en este Superclásico
En este duelo por cuartos de final, que tendrá como árbitro a Yael Falcón Pérez, River y Boca se juegan mucho más que el pase a semis. También hay demasiado orgullo y peso a cuestas. Boca lleva un año y siete meses sin poder ganarle a su archirrival, el de toda la vida, al que más desea justamente vencer, y sabe que es un gran momento para darse ese gusto.
River es el que llega mejor posicionado, aunque en un Superclásico nunca hay favoritos. El Millonario ganó su zona y apenas cayó en uno de los 14 encuentros de la fase inicial. En victorias, ambos terminaron iguales, con siete, pero el conjunto de Demichelis empató seis, mientras que el de Martínez igualó cuatro ya que perdió tres. Al fin de cuentas, River cosechó 27 puntos y Boca 25, con una diferencia grande, el doble, en diferencia de goles, de +16 contra +8.
Indudablemente, para el Millonario es todo un reto medirse a este Boca versión 2024, que supo recuperarse de algunos golpes y que viene de menor a mayor en el torneo. Es que Martínez le dio un funcionamiento colectivo al equipo porque logró sociedades y conexiones de alto vuelo, que le dan confianza y más atrevimiento a la hora de atacar.
Para River, se trata de un gran posibilidad para despejar todo tipo de dudas sobre la gestión del técnico, porque si bien ya suma tres títulos todavía su rendimiento genera dudas en una formación con grandes nombres. A Boca le costó mucho la clasificación a cuartos de final, que también logró en la última fecha, como el Millonario, pero por otra vía, sacando cuentas y haciéndolo con lo justo. El conjunto de Martínez rindió muy bien en los clásicos, lo que no le venía pasando, ya que les ganó merecidamente a Racing y a San Lorenzo, además del empate conseguido contra River en el Monumental.
River tiene un gran plantel. Miguel Borja, aún en duda por un problema físico, es uno de los goleadores del torneo gracias a su olfato y presencia. Pero si él no juega, Facundo Colidio es una gran alternativa. Para colmo, viene de un triplete sobre Instituto para darle la clasificación. Tiene a un pibe como Claudio Echeverri, una de las joyas del Millonario, en alza que le da frescura y calidad al equipo.
Boca, por su parte, cuenta con una figura de nivel internacional, como el uruguayo Edinson Cavani, que viene dulce, tras cortar el mes pasado la larga sequía con un hat-trick a Belgrano, y le metió esta semana el golazo a Godoy Cruz para sellar el boleto a cuartos de final. Kevin Zenón llegó para este torneo y es una pieza clave, porque es audaz, gambetea, es vertical y siempre se anima, además de haber formado una sociedad clave con el también llegado Lautaro Blanco, el lateral por la izquierda, quien suma cinco asistencias. Equi Fernández es otro que se afianzó en el centro del campo, con gran presencia, cortes y buena distribución del balón. Será clave poder reemplazar bien a Cristian Medina, ausente con aviso por expulsión, y autor del empate 1-1 en febrero en el Monumental.
Por eso, ambos se juegan mucho, por diferentes razones y objetivos. De eso no quedan dudas.