Estudiantes parecía despedir el semestre envuelto en dudas. El equipo de Eduardo Domínguez venía de una racha floja, con apenas un triunfo en los últimos siete partidos de la fase regular, lo que lo obligó a esperar una combinación de cuatro resultados para entrar a los playoffs del Torneo Clausura. Ese ingreso agónico, sumado a las declaraciones del entrenador luego de la derrota ante Argentinos, cuando afirmó que su continuidad dependía del club y recordó que “ya lo habían querido sacar este año”, configuraban un clima de tensión en City Bell.
Sin embargo, el inicio de los mano a mano cambió drásticamente la escena. El Pincha dejó atrás su inestabilidad y recuperó autoridad para eliminar consecutivamente a Rosario Central y Central Córdoba. Así, el equipo volvió a instalarse entre los cuatro mejores del fútbol argentino y revirtió una imagen que parecía encaminada al desgaste.
Un ciclo que se sostiene en las definiciones
A pesar del bache reciente, Domínguez sostiene números que lo posicionan como uno de los entrenadores más efectivos del club en los últimos años. En su gestión, Estudiantes disputó cinco finales: la Copa Argentina 2023, donde se consagró campeón ante Defensa y Justicia. La Copa de la Liga 2024, que también levantó tras vencer a Vélez por penales, la Supercopa Argentina, perdida frente a River; el Trofeo de Campeones, donde superó a Vélez por 3-0 y la Supercopa Internacional, en la que cayó ante Vélez. A esa lista se suma ahora una nueva semifinal, la tercera de su ciclo, que lo confirma como un técnico habituado a competir en instancias decisivas.
Todas las semifinales de Domínguez en el Pincha
En cuanto a las semifinales dirigidas por Domínguez en Estudiantes, la primera fue en la Copa Argentina 2023 frente a Boca, con triunfo por 3-2; la segunda en la Copa de la Liga 2024, también ante Boca, con empate 1-1 y una posterior definición por penales 3-1 y la tercera es la actual del Torneo Clausura 2025, que disputará contra Gimnasia en condición de visitante.
El clásico, una cuenta pendiente
El clásico agrega un componente especial. Domínguez todavía no logró ganar en el Bosque: debutó allí en marzo de 2023 con una derrota por 2-1, volvió en febrero de 2024 y empató 0-0, y la última visita fue en abril de este año con un 1-1 que se definió sobre el final. En total, el entrenador dirigió dieciocho clásicos a lo largo de su carrera, entre sus pasos por Huracán, Colón, Independiente, Nacional y Estudiantes. En ese recorrido ganó cuatro, empató nueve y perdió cinco, números que muestran que estos encuentros suelen ser complejos para sus equipos.
Un cierre que cambió de forma inesperada
Lo que parecía un cierre discreto del ciclo terminó transformándose en un renacer competitivo. A fuerza de resultados en los playoffs, Domínguez recuperó impulso, se reencontró con la solidez que distinguió a su etapa en el club y volvió a instalar al Pincha en una semifinal que será mucho más que un partido: se juega ante Gimnasia, en el Bosque, por un lugar en la final.
El proyecto, que hace apenas unas semanas tambaleaba, hoy vuelve a mostrar vitalidad. Y con la posibilidad concreta de pelear otro título, Estudiantes se ilusiona con que la mano del Barba pueda escribir un capítulo más en este ciclo que, pese a los sobresaltos, sigue firme y competitivo.
