Atlético Madrid dejó de ser el equipo del pueblo. Ya desde hace algunos años que al Colchonero no le cabe ese apodo, pero en este 2021, con un mercado de pases espectacular, definitivamente abandonó el lote de los equipos modestos de LaLiga de España, en la que viene de consagrarse, y tiene una plantilla como para ilusionarse con pelearle la UEFA Champions League a los más poderosos de Europa.
¿Podrá aprovechar está oportunidad única y dejar atrás las traumáticas finales ante Real Madrid de Lisboa 2014 y Milán 2016? El Atlético tiene varias razones para soñar con que eso finalmente ocurra.
En primer lugar, y como ya fue mencionado, el Colchonero concretó grandes refuerzos. El club rojiblanco invirtió más en traspasos que los dos grandes de España (Real Madrid y Barcelona) por tercera vez en cinco años. Rodrigo De Paul, que viene de ser campeón con Argentina en la Copa América, llegó desde Udinese para demostrar que se puede destacar en un grande de Europa. El brasileño Matheus Cunha, quien ya se sacó el título de ‘promesa’ brillando en el fútbol alemán y consiguiendo la medalla de oro en Tokio 2020, también se sumó a las filas rojiblancas. Y el más resonante llegó a último momento: Antoine Griezmann, campeón del Mundo e ídolo del Atleti, acordó su vuelta en el último día del mercado de pases, cedido a préstamo por el Barcelona.
Estas nuevas figuras se suman a grandes jugadores que logró retener el club, manteniendo una columna vertebral infalible. En el arco cuenta con la muralla Jan Oblak, los centrales Josema Giménez, Stefan Savic y Mario Hermoso ya consolidados, Koke y Marcos Llorente mezclando experiencia y juventud en el mediocampo, y un peligroso tridente de ataque conformado por Ángel Correa, Luis Suárez y Joao Félix. Diego Simeone se encuentra, sin lugar a dudas, con una de las mejores plantillas desde que asumió el cargo de entrenador del Atlético Madrid en 2011.
Además, está en estado de gracia. El equipo se consagró campeón de LaLiga superando al Barça y Real Madrid, los habituales candidatos, y tomó envión para agrandarse frente a las potencias del continente. El desafío ahora para Simeone, tras una gran conquista, es alimentar nuevamente el hambre de gloria y reiterar ese pacto que mantiene con sus futbolistas, aquel sello característico de sus equipos que tiene como premisa excluyente dejar alma y vida dentro de la cancha. Si aparece ese Atlético de Madrid, los colchoneros pueden soñar en grande.
Así lo explicaba el Cholo en ESPN tras la conquista, dejando un mensaje que le puede servir a la nuevas caras y que da otro fundamento, además del económico, para explicar los grandes fichajes:
Nuestra esencia es la forma de vivir el juego. Cuando uno llega al vestuario del Atlético, a unos les cuesta más adaptarse, a otros les cuesta un poco menos. Cuando se adaptan, entienden que sólo con el talento en el Atlético de Madrid no juegan. La diferencia no es el talento, es la personalidad, la seguridad, la convicción, el compromiso, el jugar en equipo. En 2014 se querían ir todos. Hoy no se quiere ir nadie. Porque se trabaja bien, hay estabilidad y el club está fuerte. Además, quieren venir los buenos, que antes pasaba menos. Los buenos elegían ir al Madrid o al Barcelona. No al Atlético”.
El título liguero ya es justificativo para perfilarlo como uno de los favoritos a llegar lejos en la Champions, pero esto toma aún más sentido si se repasan algunos números que dejó su consagración. El Atleti no recibió goles en 18 partidos, casi la mitad de la liga, y fue la temporada con menos derrotas de la era Simeone. Estos dos datos reflejan solidez defensiva y solvencia para conseguir resultados, características necesarias para superar a los equipos de grandes estrellas que se va a cruzar en el certamen europeo.
También conformó una dupla letal: Suárez-Llorente. El Pistolero se alimentó del destrato recibido en Barcelona y estuvo imparable desde que llegó a Atlético Madrid. Fue el goleador con 21 tantos, con influencia directa en 21 puntos, y junto con Marcos Llorente marcaron 32 goles en toda la temporada. El joven español también demostró su versatilidad para jugar en varias posiciones y fue uno de los jugadores indispensables del entrenador a lo largo del campeonato.
Sin embargo, así como los puntos a favor para Atlético Madrid son varios, también deberá afrontar algunos desafíos especiales que tiene esta Champions League.
EL GRUPO DE LA MUERTE
Atlético Madrid tiene una buena prueba de fuego en el arranque. Cayó en el Grupo B, con Liverpool, Porto y AC Milan, tres grandes del fútbol europeo que entre ellos suman 15 títulos de Champions League. Y al parecer hay alguien que ya espera cruzarse con el Colchonero. "Tenemos una cuenta pendiente con el Atlético", dijo Jürgen Klopp al culminar el sorteo de la fase de grupos y conocer a sus rivales. Su equipo quedó eliminado el año pasado en octavos de final a manos del Atleti.
Superar la primera fase ya se le presenta como un reto a los del Cholo.
PSG, EL SUPER EQUIPO OBLIGADO A GANAR
Si quiere consagrarse como el mejor, debe superar a los mejores. Previo al arranque de la fase de grupos, ese es el PSG. En cuanto a nombres, el conjunto parisino es el más armado y el gran favorito a levantar la Orejona. De la mano de Neymar, Lionel Messi, Sergio Ramos y Kylian Mbappé (la lista podría seguir), PSG se presenta como el cuco de la Champions, es casi una obligación con la que carga el entrenador Mauricio Pochettino y todo su plantel. La presión fue impuesta por los directivos del club, que cumplieron en traer a los mejores, y el pueblo futbolero, al catalogarla como una de las mejores plantillas de la historia. Por supuesto, esa presión puede jugar a favor del Atlético y todos los equipos que aspiran a pelearle el título, ya que de no manejarla correctamente, puede ser destructiva para PSG.
Con este escenario, un Atlético Madrid repleto de estrellas y con una liga española bajo el brazo buscará acreditar su título de candidato y conseguir su primera Champions League.
El camino del Colchonero arranca el miércoles 15 de septiembre, contra Porto en el Wanda Metropolitano.