En su peor crisis desde la llegada de Fernando Gago, pudo recuperar un poco de aire puro. De local, Racing Club empató 1-1 en la tercera fecha del Grupo A de la CONMEBOL Libertadores frente al vigente campeón, Flamengo, de Brasil, ahora dirigido por Jorge Sampaoli, en un partido muy intenso y continúa como único líder.
La Academia, líder del Grupo A de la Copa, producto de la victoria sobre Ñublense y el agónico triunfo ante Aucas, recién ahora cedió algún punto, porque suma siete en tres encuentros. Una realidad que contrasta con su presente en el Torneo de la Liga, donde sacó apenas un punto de los últimos 15 y sus hinchas ya le empezaron a expresar su descontento. Le faltó más volumen y calidad de juego, pero pudo sacar un empate, tras quedarse con un hombre menos un buen rato, y lo celebró con sus simpatizantes.
Los ataques de la Academia por la izquierda casi logran el fruto del gol, por la chance de Maximiliano Romero a los 21 minutos, pero fue llevado por el arquero visitante, Santos, hacia el costado, y quedó sin margen para un buen remate. Un puñado de minutos antes, Wesley Franca, lateral por esa zona, la derecha de la defensa del Mengao, habia sido el primer amonestado del encuentro.
Pero todo se le complicó al dueño de casa a los 25, por la segunda amarilla de Gabriel Hauche, por otra dura falta, que provocó su expulsión. El conjunto de Gago se quedó con 10 futbolistas, sin dudas un dolor de cabeza ante semejante rival.
Como si no fuera suficiente situación para condicionarlo, apareció el oportunismo de Gabriel Barbosa, el reconocido Gabigol, quien venía de perderse una gran chance, para aprovechar que se durmió la defensa local y marcó el 1-0. Otro duro impacto para Racing, ya que el gol se dio a los tres minutos del tiempo agregado del período inicial, por lo que sacaron desde la mitad de la cancha e inmediatamente el árbitro marcó el final de la etapa.
Faltando media hora para el desenlace, todo Racing reclamó un penal, pero el juez, Jesús Valenzuela, fue al VAR y la tecnología no aprobó la acción, ya que Wesley, del Flamengo, tocó primero la pelota con la cabeza, antes de darle en una mano, tras el cabezazo de Romero. Así se le esfumó una buena ocasión para poder dejar el marcador igualado.
Enseguida llegó algo de calma para los hinchas de la Academia, porque el mencionado Wesley cometió una dura falta, fue expulsado y ambos equipos pasaron a tener 10 jugadores. Y en breve llegó el desahogo, con un golazo de tiro libre de Nicolás Oroz, a los 73 de juego, para marcar el 1-1 y darle esperanza a su equipo, que así mantenía su liderazgo en soledad en el grupo copero.
Sin dudas, cuando se le venía la noche, con un panorama oscuro, surgió la calidad de Oroz y el anfitrión tomó oxígeno, en especial desde que ambos equipos quedaron igualados en cantidad de futbolistas. Ni la dirigencia considera que la continuidad de Gago esté en duda, ni el entrenador piensa dar un paso al costado, pero esta recuperación parece darle más vida al DT.
Por fútbol, otra vez quedó en deuda Racing, sumado a sus problemas físicos. Thiago Maia casi le convierte en el cierre, con un tiro que dio en el travesaño y se fue por arriba. Pero pudo ganarlo el anfitrión, por el disparo de Emiliano Saliadarre que dio en un palo, y el penal no otorgado en la jugada de Nicolás Reniero ante Erick Pulgar. Viene sufriendo varias de sus figuras y se cruzó un Flamengo versión 2023 con estrellas como Gabriel Barbosa 'Gabigol', Pedro, David Luiz, Giorgian de Arrascaeta y Arturo Vidal, que ya no es el "cuco" de un tiempo atrás. Desde comienzos de años, el Mengao venía mostrando su irregularidad y dejando entrever su vulnerabilidad.
De hecho, Independiente del Valle lo llevó hasta los penales en la Recopa Sudamericana. El mal debut en la Libertadores con la sorpresiva derrota ante Aucas fue la alarma que precedió las derrotas ante Fluminense en la final del Torneo Carioca y en la Copa de Brasil frente al modesto Maringá (aunque después dio vuelta la serie), pero no salvó a Vitor Pereira, quien fue destituído. Jorge Sampaoli tomó el mando hace casi 20 días y, desde entonces, su conjunto sumó dos caídas en el Brasileirao.
Ahora ambos sumaron un punto y, de esa manera, Racing pudo mantener la cima del grupo en soledad y a la vez evitó un triunfo del rival brasileño. Fue negocio para Gago y compañía.