Alexander Domínguez ya es una leyenda en Quito. El gigante guardameta de Liga fue la figura de la final y del título de la CONMEBOL Sudamericana, la quinta estrella continental de la U en su historia.
Esmeraldeño, de 33 años, Domínguez se transformó en uno de los mejores arqueros en la historia del fútbol ecuatoriano. Con la U ganó cinco títulos, lo que incrementa su figura en el Albo.
Fue suplente en el título de la Libertadores en 2008, pero luego se apoderó de la titularidad y fue quien levantó la Sudamericana del 2009 y las Recopas de 2009 y 2010.
En esta gloriosa campaña 2023, Liga llegó a la definción por penales en tres ocasiones, donde Alexander Domínguez le pudo transmitir confianza y seguridad a sus compañeros. Acuñó la frase: “Tranquilo que dos atajo yo”.
Ante Ñublense, en los octavos de final, atajó dos remates y Liga ganó la definición 4-3 en el estadio Rodrigo Paz. Ante Sao Paulo, la definición fue el estadio Moumbí. Allí, no atajó ninguno, pero Liga triunfó 5-4.
Esta vez, ante Fortaleza, también fue en estadio ajeno y se lució con tres excelentes tapadas. Con la serenidad que le caracteriza se erigió de héroe, dejó atrás las fallas de de Alexander Alvarado y Paolo Guerrero y juntos levantaron el trofeo de campeón.
“Quiero cumplirle la promesa que le hice a don Rodrigo Paz”, dijo hace dos días. Y cumplió. Ya es campeón con el equipo que le abrió la puerta en el fútbol profesional e internacional, le permitió llegar a la Selección y jugar dos Mundiales. El año pasado, que regresó al equipo luego del paso por el fútbol de Argentina, Uruguay, Colombia y México, dijo que regresaba a su casa. Y nunca se sintió tan cómodo.