Universidad Católica empató sin goles ante Cuenca Juniors, pero gracias al 4-1 que consiguió en la ida, el trencito azul se clasificó a la final de la Copa Ecuador.
Como era de esperarse, el conjunto azuayo salió con todo desde el primer minuto; el local se adueñó del balón y siempre trató de encontrar a Roberto Ordóñez, su jugador de más experiencia, para encontrar un gol rápido. También, pasada la primera media hora del compromiso, Feyiseitan Asagidigbi sacó un remate potente y Rafael Romo apagó el grito de gol.
La Chatoleí resistió la insistencia del rival y por la vía del contragolpe buscó responder, aunque sin tener mayor efectividad. Cerca del cierre de la primera mitad, Bryan González conectó un frentazo y el poste evitó el 1-0 de “Los Gallos”.
La dinámica en el complemento no cambió y nuevamente “la Tuka” Ordóñez tuvo una clara opción de abrir la cuenta en el Estadio Alejandro Serrano Aguilar. Posteriormente, a los 56′, el cuadro camarata sufrió la lesión de Rafael Romo tras un choque que tuvo con “la Tuka”.
Johan Lara ingresó en su lugar y el guardameta de 26 años también cumplió con una buena participación, ya que tuvo dos buenas intervenciones para evitar el tanto de Cuenca Juniors. Ya en la recta final se dio la pena máxima para el equipo de segunda categoría, y Johan Lara le atajó el tiro penal a Roberto Ordóñez.
Luego de un gran esfuerzo, el equipo de Leonardo Vanegas bajó la intensidad y, a pesar de que luchó, no le alcanzó para al menos descontar en el global. Cuenca Juniors se despidió y su campaña fue histórica, pues siendo un club de menor categoría se metió entre los cuatro mejores y en el camino eliminó a un poderoso Barcelona.
Por otro lado, Universidad Católica, gracias al 4-1 de la ida, logró asegurar su boleto a la gran final de la Copa Ecuador y el equipo de Diego Martínez sueña con el primer título en la historia del trencito azul. Su rival saldrá del cruce entre Liga de Quito y Emelec (la ventaja es de 2-1 a favor del Rey de Copas).