BARCELONA El Barcelona ha disputado ya 17 partidos de Liga y apenas ha recibido seis goles. De hecho solo ha encajado tres en 16 encuentros porque los otros tres se los marcó en el Clásico del Bernabéu el Real Madrid.
Real Sociedad, Osasuna y Espanyol han sido los únicos capaces de batir a Marc André Ter Stegen, que hasta en 13 encuentros ha dejado su portería a cero. La última ante un Getafe que fue creciendo a medida que avanzaba el partido... Y que acabó estrellándose ante el meta alemán, otra vez un coloso.
Le ha costado al Barça afianzarse en defensa pero si la llegada de Koundé y Christensen han sumado al crecimiento indiscutible de Araújo, el rendimiento providencial de Ter Stegen ha sido la clave que redondea la excelencia mostrada por el líder.
Si en los seis partidos de la fase de grupos de la Champions encajó 12 goles que se demostraron fatales y decisivos para explicar su eliminación, la imagen defensiva mostrada en el campeonato de Liga ha sido, esta siendo, soberbio y explica, también, su condición de líder.
CHRISTENSEN
Llegado en silencio, considerado, de entrada por muchos, un suplente de garantías, el danés ha mostrado, y sigue haciéndolo, una regularidad y perfección excelentes. Hasta el punto que se hace difícil de entender un partido de m´xima exigencia sin su presencia en la zaga.
Siempre bien colocado, poderoso por arriba, bien colocado y rápido al corte, su toque de balón también es notable, como se demostró en la jugada del gol: un robo y pase inmediato profundo para Raphinha.
ANSU FATI
Desde que debutó en el primer equipo, esta fue la segunda ocasión en que jugó un partido completo. Le faltó el gol y probablemente mayor entendimiento con sus compañeros de ataque, pero no dejó de pelear, buscar el desmarque y el remate. Soria le salvó un remate envenenado pero físicamente expresó un crecimiento evidente