BARCELONA -- Lionel Messi concedió este martes una amplia entrevista a la emisora RAC1 en la que repitió su intención de permanecer en el Barcelona hasta acabar su carrera deportiva y descubrió que en 2014 pensó en marcharse.
En una conversación que se prolongó durante cerca de 45 minutos, el crack argentino reconoció que su intención, “aunque nunca puedes saberlo al 100 por cien”, es acabar su carrera en Barcelona “porque hoy por hoy cada vez está más claro que esa es la idea mía y de mí familia. Primero por cómo estoy en el club y después por cómo está mi familia en la ciudad. No me gustaría cambiar el círculo de amistades de mis hijos porque yo tuve que hacerlo y no me gustaría que ellos lo pasen”, refirió Leo, sentenciando que está “encantado de seguir aquí. Si me quieren porque mi idea siempre fue quedarme aquí”.
No siempre fue así, reconoció en voz alta. “Hubo momentos en que uno acaba cansado, agotado por cosas, circunstancias... Sí ha habido épocas, en el 2013, 2014... Cuando tuve una lesión grave y el problema con hacienda. Fue muy difícil para mí y mi familia porque la gente no se entera de lo que pasa, opina de oído y parte de la prensa habla también. En ese momento tuve en la cabeza largarme, no por querer dejar el Barça, sino por irme de España. Me sentí maltratado y quería salir de aquí”, expuso, aunque sin que ello significase tener sobre la mesa una oferta en firme: “No tuve una oferta en especial pero aquello iba más allá de mi sentimiento”.
“Al final se vio que todo era falso, fueron por mí, siendo el primero de los deportistas por todo lo que significó en ese momento y lo pasamos muy mal en mi familia”, mantuvo, en un recuerdo que, a lo escuchado, no olvida. Como tampoco la única vez que salió a la palestra por una crítica interna, del entonces directivo Javier Faus, “porque me tiraron desde dentro del club, gente que en teoría tenía que apoyarme y entonces dije que ya no aguanto más. Que saliera de un teórico aliado mío no lo aguanté”.
“Aquel tiempo, en 2013 y 2014, que me lesioné, estuve dos meses fuera y me fui a Argentina. Sí, desde luego, fueron los peores momentos que pasé”, resolvió el crack, dejando claro que aquello ya forma parte de un pasado lejano y que, en absoluto, se siente en parecidas circunstancias.
Sobre su renovación o esa opción que siempre sobrevuela de jugar en Newell’s, el capitán azulgrana aclaró que regresar a su país “es algo que siempre soñé, disfrutar esa experiencia de jugar el fútbol argentino... Pero a veces hay que pensar más en la familia que en lo que uno quiere porque la familia es lo más importante”, conviniendo que, en clave de futuro, aún no hay nada hablado de una nueva renovación: “No hay nada aún. Siempre me mantuve al margen de eso que lo lleva mi papá, pero no habrá ningún problema cuando llegue el momento”.
¿Hasta cuándo habrá Messi? “Me voy midiendo año a año, miro si estoy bien, si puedo seguir porque ya entro en una edad en que empieza a costar”, reconoció, no queriendo marcar ningún plazo: “No puedo decir que hasta los 36 porque a lo mejor no me veo, o sí. Lo que quiero es seguir compitiendo”, dejando claro su intención de mantener “un proyecto ganador. Siempre lo tuvimos y tenemos un plantel de grandes jugadores para ganarlo todo porque es lo que queremos y quiere la gente”.
Su discurso denotó de manera incuestionable su deseo de permanecer en el Barça hasta el final de su carrera y en Barcelona con su familia más allá de ese final, repitiendo que la siente “como mi casa. He pasado más años aquí que en Argentina, mi familia está aquí, bien, mis hijos son catalanes... Mateo nació un 11 de septiembre, así que no se puede ser más catalán”, bromeó, solventando que, en ese aspecto, recibir la Creu de Sant Jordi, galardón especial en Catalunya, “fue impresionante. Es diferente a todo lo que gané personalmente por todo lo que significa y por cerrar un círculo de mi vida”.
Una vida totalmente adaptada a Barcelona. “No soy de salir mucho porque me gusta estar en casa, pero no tengo problema y ahora con los hijos salimos más, aunque nos gusta estar en casa, ver series, que Antonella es una fanática y aprovechamos cuando los nenes duermen”, descubrió de su día a día, reconociendo que con Thiago ha vuelto a jugar a los videojuegos, “que los dejé después de sí jugar mucho de chico”.