El Cádiz ganó, 14 años después, su primer partido en primera división este domingo, derrotando al Huesca (0-2) gracias a los goles de Negredo y Pombo en un partido que tuvo su gran noticia en la presencia de Alberto Cifuentes como portero titular del equipo andaluz.
Y es que el meta, nacido en Albacete el 29 de mayo de 1979, se convirtió en el futbolista más veterano que debuta en la máxima categoría del fútbol español.
Casi tres meses después de que el mexicano Luka Romero pasase a la historia como el más joven en estrenarse en la máxima categoría española, con 15 años y 219 días, al debutar con el Mallorca frente al Real Madrid, Cifuentes consiguió un hito. Llegó a pertenecer al Mallorca, pero siendo siempre suplente, y nunca llegó a jugar en primera división en España. Dividió sus 578 partidos ligueros entre 2ªA y 2ªB, desde la temporada 1998-99 cuando debutó con el Albacete y hasta el pasado curso, el quinto en el Cádiz al que había llegado con el equipo en la tercera categoría nacional.
"Debería haberlo hecho antes, pero tengo la piel de gallina" reconoció el veterano portero al acabar el partido en Huesca.
Fijo en las alineaciones del club amarillo en las cinco anteriores campañas, en que sumó 199 partidos ligueros, Cifuentes quedó en el banquillo en la primera jornada de esta temporada, ocupando su puesto David Gil, su suplente en las cuatro pasadas temporadas.
La derrota cadista frente a Osasuna (0-2) decidió al entrenador, Álvaro Cervera, a volver a apostar por él cuando alrededor del club andaluz se sospechaba que, atendiendo a su edad, quedaría relegado a la suplencia, más aún después de la llegada del argentino Jeremías Ledesma desde Rosario Central.
Firme
Pero su larguísima trayectoria de 21 temporadas acabó por darle el premio sin quizá esperarlo. Debutante en 2ª División el 15 de noviembre de 1998, perteneciendo al Albacete y entrando por la expulsión del titular Julio Iglesias en un partido que su equipo perdió por 0-2 ante el Mérida, Cifuentes, entonces de 19 años, solo jugó un partido más aquel curso, marchándose al siguiente curso al Dos Hermanas, en 2ªB, disputando 24 encuentros y ganándose su fichaje por el Mallorca.
En el club bermellón no pudo sustituir a un indiscutible como el argentino Leo Franco durante cuatro años y de Moyá en el último, cuando solventó marcharse, en 2005, al Rayo Vallecano, en 2ªB.
Titular durante dos temporadas, en 2007 fichó por el Salamanca, en 2ªA, y al cabo de dos cursos pasó al Murcia, en el que fue titular durante tres temporadas, perdiendo el puesto en 2013 para irse al Lorca. Allí, ya con 34 años, fue indiscutible otra vez en 2ªB para, de forma sorprendente, iniciar una aventura, la única de su carrera, en el extranjero.
Fue en la temporada 2014-15, cuando jugó 15 partidos en el Piast Gliwice de la 1ª División polaca que dirigía el también español Pérez García y tras la cual recibió una oferta del Cádiz, entonces en 2ªB. Desde su llegada, primero bajo las órdenes de Claudio Barragán y después de Álvaro Cervera, Cifuentes se convirtió en indiscutible.
En 2019 firmó una última renovación por dos temporadas y ahora, en su último curso de contrato, a los 41 años y 114 días, logró un hito probablemente perseguido durante buena parte de su carrera pero que debió ver, hace ya tiempo, muy lejano.