Daniel Fonseca, padre del volante de León de México y la Selección de Uruguay, contó lo vivido por su hijo Nicolás Fonseca, al que llevaron en su auto, se lo sacaron, y lo dejaron en un lugar incómodo, y reveló que actualmente vive custodiado por policías armados.
“Estamos intentando digerir esta situación incómoda, fea, horrible, que no será ni el primero ni el último que pase una situación incómoda de estas, pero golpea. Yo estaba en un hotel en Río y Nicolás me escribe y me dice: papá, necesito hablar contigo ya por videollamada. Cuando le vi la cara, lo vi transformado y lo primero que le pregunté fue si le pasó algo físico o algo más y ahí empezó a contarme todos los detalles de lo vivido. No fue fácil”, comenzó diciendo Daniel Fonseca en "La mañana del fútbol" de El Espectador Deportes.
Cuando se le preguntó si podía revelar qué había pasado con su hijo Nicolás, el representante de jugadores respondió: “Yo no puedo contar detalles porque la Policía sigue indagando, lo cierto es que fue grave y estamos todos un poco preocupados. Me llamó el dueño (del club León), el presidente, la Policía, y están indagando porque hay cosas que no cierran. No fue un robo normal”.
Posteriormente, reveló más datos diciendo: “Gracias a Dios no le sacaron el teléfono, porque en un robo generalmente te sacan el teléfono. Le sacaron el auto y lo dejaron en un lugar incómodo, y al tener el teléfono llamó a una persona conocida, le pasó la ubicación, y le pidió que lo fuera a buscar”.
Fonseca calificó de “grave” la situación vivida por su hijo: “No me gusta cuando quieren minimizar, porque acá pasó algo grave, y como dice Nico, nació de nuevo. Este hecho no puede pasar”.
Daniel Fonseca, exjugador de la Selección, comentó que desde el momento en que sucedió el hecho, su hijo Nicolás vive con custodia.
“Desde ese mismo día anda con policías armados las 24 horas, él, su novia y su cocinero, que vive con ellos. Los tres apenas salen de la casa, están acompañados por policías y es incómodo porque perdés la libertad. Pero es una situación puntual. Por suerte, está muy fuerte de cabeza y pidió para jugar. Pero el día a día no es fácil”, expresó.
