El 8 de octubre de 2015, Karim Benzema marcó dos goles con la Selección Francesa en un amistoso ante Armenia que culminó con goleada de los galos por 4-0. Aunque probablemente no lo supiera, serían las últimas dos conquistas del delantero con Les Bleus por un largo tiempo. A partir de ese encuentro, un veto de cinco años lo mantendría alejado del seleccionado conducido por Deschamps.
Las razones, claro, fueron extrafutbolísticas, si es que se las puede apartar de lo estrictamente deportivo. Benzema venía de ser sensación en Lyon, ya brillaba en Real Madrid y era un número puesto primero para Domenech en 2010, y luego para Deschamps a partir de 2014.
En primer lugar, el conflicto estalló por el conocido Affaire Zahia, quizás no tan recordado pero que tuvo mucha trascendencia en Francia. Benzema y Ribery se vieron envueltos en un escándalo por haber contratado los servicios sexuales de la actriz y modelo Zahia Dehar, entonces menor de edad. La investigación concluyó en 2014 con que ambos habían sido engañados y no sabían que Zahia tenía 17 años, según lo resuelto por la Justicia. En el plano deportivo, sin embargo, hubo condena: Benzema se perdió la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, aunque Ribery sí fue. Las polémicas decisiones de Domenech pasaron factura: desde la elección de futbolistas en base al horóscopo hasta la pelea interna con Evra durante la Copa del Mundo resultaron en una Francia eliminada en primera fase, última y con un punto de nueve, en un grupo compartido con Uruguay, México y Sudáfrica.
El regreso se daría en 2011, con Laurent Blanc al frente del seleccionado. Benzema volvería a disputar amistosos con Les Bleus y encuentros de Eliminatoria, aunque sin brillar. En 2012 jugó la Eurocopa en la que los galos se despidieron en cuartos de final, llegando a marcar dos goles en cuatro partidos.
A partir de allí, comenzaría la era Deschamps: una apuesta de la Federación Francesa para volver a la gloria. El entrenador asume en 2012 y en octubre de 2015 Benzema se despediría del seleccionado por un largo tiempo.
Apenas un mes después, en noviembre, el escándalo volvería a atraparlo cuando estallaba el "caso Valbuena". Su compañero de selección, Matheu Valbuena, había sido chantajeado con un video sexual y Benzema estaba implicado. Si bien él no lo chantajeó directamente, fue condenado por una conversación que mantuvo con Valbuena, en la que parecía tener el rol de "gestor", advirtiéndole que pagara lo que le pedían por el peligro que entrañaban las personas con las que lidiaba. Además, le había insistido para que se juntara con un hombre de su confianza, dando a entender que tenía relación con los implicados. Para el tribunal, la complicidad de Benzema en el chantaje era clara.
La Federación Francesa decidió vetarlo, mientras esperaban a que avanzara el proceso judicial. Tal era la magnitud y el abanico de jugadores de Deschamps, que Francia fue campeón en Rusia sin siquiera considerarlo, con Olivier Giroud y Antoine Griezmann como delanteros. Parecía que no habría más lugar para él.
Después de varias idas y vueltas en la causa judicial, una Eurocopa (2016) y un Mundial (2018), y con el altísimo nivel que estaba demostrando en Real Madrid, volvió el 18 de mayo de 2021 al seleccionado, preparado para disputar la Euro 2020.
El regreso, a nivel personal, no pudo ser mejor: marcó seis goles en seis partidos. A nivel colectivo, no fue ideal: Francia fue sorprendida por Suiza en los penales y quedó eliminada en octavos de final. A partir de allí, comenzaría un rendimiento decreciente, que lo mantiene con muchas dudas de cara a Qatar. Benzema, sin embargo, es una ficha fija: además de haber alcanzado su máximo nivel con 33 años, se quedó con el Balón de Oro de la FIFA por su rendimiento con Real Madrid la temporada pasada, donde fue decisivo para la obtención de LaLiga y de la UEFA Champions League.
Ese año, sin embargo, un manto de dudas volvió a posarse sobre su presente, cuando fue condenado en la causa Valbuena a un año de cárcel en suspenso. Las dudas, sin embargo, se disiparon rápidamente cuando fue respaldado por la Federación. La relación con Valbuena nunca se recompuso. En 2018, el volante había declarado que, si se cruzaba con Benzema le daría la mano, y Karim fue tajante con una historia en Instagram en la que le salió al cruce: Garde ta main! (Guarda tu mano). La historia para Valbuena tampoco fue la mejor: estuvo entre los 23 para la Copa del Mundo de Brasil, pero eso fue lo último en el seleccionado. Cuando tenía 34 años, no fue considerado para Rusia. Con Benzema prácticamente dejaron de jugar en el mismo momento, pero el destino quiso que la revancha la tuviera el delantero.
El atacante de ascendencia argelina tuvo una carrera atípica: no solo alcanzó su pico en una edad en la que la media de futbolistas ya transitó la plenitud, sino que los escándalos y los obstáculos que marcan su carrera no son los que vemos repetirse en varios deportistas con condiciones, como pueden ser la resistencia a entrenar, el rechazo a resignar vida social en pos de sus carreras o la mala alimentación. Benzema no tuvo esos problemas, pero se vetó solo de la selección francesa. Incluso sus comienzos estuvieron marcados por unas declaraciones que fueron objeto de críticas feroces. Además de renunciar a cantar "La Marsellesa" (el himno francés), el delantero dijo que "no lo iban a obligar" y redobló la apuesta: "Si escuchamos bien, la Marsellesa llama a la guerra, eso no me gusta", explicó.
Hoy esas declaraciones ya quedaron en el olvido, pero para un país en el que los discursos nacionalistas y antimigratorios fueron creciendo en estos últimos tiempos, fueron un puñal. Más cuando el delantero aún no había demostrado de lo que era capaz.
La Copa del Mundo de Qatar tendrá un gusto especial para Benzema, no solo por el sabor a revancha. Con 34 años, la vida lo pone ante su segundo y último Mundial, en una carrera marcada por escándalos que quiere dejar atrás. Además, con la obligación de sacar a flote a una Francia golpeada, deambulando con mucha incertidumbre de cara a su defensa del título y ante los ojos del mundo, el mejor futbolista de la temporada tiene su momento para brillar. ¿Será Qatar el lugar para hacerlo? ¿O dejará pasar su último tren en la historia de la Copa del Mundo?